Manu, primera parte

MANU – 1era parte
Mi marido me dejó hace dos años, por una mujer mucho másjoven que yo, de pelo largo, renegrido, brilloso, con un cuerpo esbelto y muybonita, odio reconocerlo.  Yo soyregordeta, rubia, de pelo ni largo ni corto, y aunque no soy fea, ya estoymadura.
Mi marido y yo siempre tuvimos sexo bueno, convencional,creo, porque no tenía mucha experiencia para poder comparar. Por ejemplo, nuncahabía probado el sexo anal, y las pocas veces que mi marido me lo sugirió, nome animé. 
Cuando quedé sola, tenía unos 55 años, y me sentía muy pocacosa. Creo que por venganza, por despecho y por curiosidad, decidí que teníaque conseguirme un amante, o un hombre, o un nuevo marido. Pero no es fácil. Miautoestima estaba por el suelo.
Sin embargo, pocos meses después de la ida de mi ex, me llamóun día Manuel. Era el hijo de una pareja muy amiga nuestra, al que había vistonacer y crecer, y que había jugado de chiquito con mis hijos.
Manuel me llamó ese día, y me preguntó si podía venir a tomarun café a casa. Yo estaba sola, mis hijos estaban cada uno por su lado y en susactividades. Ya no vivían en casa. Luego entendí que él sabía todo eso, eraamigo de ellos y hasta había sido noviecito de mi hija. Le dije que viniera, claro,pero me llamó la atención.
Llegó, y lo hice pasar. Tenía más o menos la edad de mishijos, unos 28 años. Le pregunté qué quería tomar y me pidió algo “fuerte”. Ledije que solo tenía whisky y serví dos, me senté en el sofá al lado de él, peroa cierta distancia y me dispuse a escuchar lo que venía a decirme.
Tomó su bebida en tres tragos y me miró fijo. Allí vi queManu, ese chiquito que había venido tantas veces a jugar con mis hijos, era yaun hombre, era masculino y tenía una mirada muy seductora.
Me sentí de pronto un poco incómoda, porque me miraba fijo yno me decía nada. Se paró y se sirvió otra medida. Yo solo había dado un sorboal mío. Y volvió al sofá. Y por fin habló.
Me dijo que sabía que estaba pasando por una etapa difícil,luego del abandono, y que seguramente yo necesitara más tiempo para digerir lahumillación de haber sido abandonada por otra mujer tanto más joven, pero élquería que yo supiera que yo era una mujer hermosa y muy atractiva, que hacíatiempo que él me deseaba, y que ya no era ese nenito que yo había visto nacer,sino un hombre hecho y derecho que deseaba mucho hacer el amor conmigo.
Me quedé helada. Y a la vez, un calor me invadió de pies acabeza. Lo miré y sentí la mirada expectante de Manu. Supongo que él esperaba queyo dijera que sí o que lo echara de mi casa.
Me di cuenta que me estaba excitando, estaba contenta, mesentí bonita otra vez. Y solo atiné a decir “¿Y?” y al instante lo tuve pegadoa mi cuerpo, abrazándome y comiéndome la boca.
Sentí que se me había humedecido la entrepierna. Sentítambién cómo bajaba su lengua por mi cuello y subía por mi garganta para volvera besarme tan maravillosamente, penetrándome con esa lengua voluptuosa hastacasi tocar mi garganta… Sus manos acariciaban mis muslos. Y subían lentamente…

4 comentarios - Manu, primera parte

mdqpablo
muy lindo relato . queremos.saber mas de esta milf preciosa
veteranodel60 +1
Muy sugerente y caliente quedó el relato espero la próxima van puntos para que sigas contando