Este relato es la sexta parte de una serie.
Parte 1: http://www.poringa.net/posts/relatos/2935629/Belen-mi-mejor-amiga-1ra-parte.html
Parte 2: http://www.poringa.net/posts/relatos/2937733/Belen-mi-mejor-amiga-2da-parte.html
Parte 3: http://www.poringa.net/posts/relatos/2938633/Belen-mi-mejor-amiga-parte-3.html
Parte 4: http://www.poringa.net/posts/relatos/2940647/Belen-mi-mejor-amiga-parte-4.html
Parte 5: http://www.poringa.net/posts/relatos/2942140/Belen-mi-mejor-amiga-parte-5.html
Buenas. Después de mucho tiempo, retomo la historia del viaje que hice a Venezuela con mi amiga Belén.
El sábado nos levantamos temprano, yo había armado un bolso con ropa de playa, toallas y una muda de ropa interior, no íbamos a pasar las siguientes 36 horas a Los Roques, a una cabañita en una playa sin nada, ni luz,con acceso solo desde el mar.
Tomamos una avioneta desde Maiquetía hasta Los Roques y desde ahí nos dejaron en una lanchita, junto con una botella de 20 litros de agua,una conservadora con un poco de comida, suficiente para el día y medio que íbamos a pasar en ese lugar.
La cabañita tenía luz para la noche (con paneles solares y baterías), una cama de dos plazas completita, unos estantes para dejar la ropa y un baño muy rudimentario que, por suerte, no necesitamos usar. Afuera había una parrilla muy básica y chiquita. La playa era espectacular, no se veía a nadie, ni se escuchaba otra cosa que el viento en los árboles. La lancha se retiró, no sin antes coordinar el horario en que nos iban a venir a buscar al día siguiente.
En cuanto terminamos de sacar la ropa, Belu se sacó la ropa y se puso una micro bikini, ante mi sorpresa, me dijo que la había comprado un par de días antes. Adelante, apenas le tapaba la concha depilada y atrás, se le perdían dos hilitos entre los cachetes. Arriba no se puso nada. Yo me puse un pantalón corto, mas que nada para tapar un poco mi pija durísima por la vista. Salimos a la arena, tiramos unas lonas a unos metros de la cabaña y nos acostamos al sol. Era apenas pasado el mediodía y si bien hacía calor, el sol no estaba fuerte.
Belu me preguntó si me iba a dejar el pantalón puesto y le expliqué como la excitación masculina es mucho mas evidente que la femenina. Ella se arrodilló y me sacó el pantalón. Ahí estaba, al sol, en bolas y con una erección que podría haber rivalizado con los troncos de las palmeras de la playa. Belu empezó a acariciarme la pija muy despacio, me acariciaba muy levemente todo el largo con el frente y el dorso de la mano, hasta que empezó a usar la lengua, igual que la mano, subía y bajaba desde mis bolas hasta la puntita del glande, siempre con la mirada fija en mí. Después de un par de pasadas de lengua, se la metió en la boca y empezó a chupar con vigor casi inmediatamente. Yo me retorcía en la lona, con la boca me estaba pegando una garchada monumental y con las manos me masajeaba las bolas, estaba en las nubes y sentía el orgasmo viniendo, intenté separarla de mi pija, ya que no quería acabar tan rápido. Belu, sin dejar de chupar, se agarró con firmeza y no me dejó apartarla, bajó su mano de las bolas a mi cola y empezó a masajearme el ano con un dedo, eso me desarmó y acabé muy intensamente. Fue un orgasmo largo, principalmente porque Belu no paraba de pasarme un dedo húmedo por todo mi agujero posterior, era un masaje enérgico, pero sin meter el dedo. Quedé totalmente doblado del placer, no llegué a ver si había tragado todo o si había escupido en la arena, pero ella se acostó al lado mío y lo único que dijo fue:
- ¿Viste?. Se terminó el problema del pito parado.
Yo quise besarla,pero me dijo que no, que ahora quería tomar sol. La dejé, tenía que recuperar el aire.
Pasado un ratito, me pongo de costado y empiezo a mirarla.Estaba mortalmente hermosa. Insisto en que no es una modelo. Es una mujer de cuarenta y pocos, que se cuida bastante, pero que ha pasado muchos años estudiando y que, además, tiene una familia de la que se hace cargo. Pero estaba hermosa, acostada al sol boca arriba, con las lolas al aire y con la rajita apenas tapada por la mini micro tanga. Empecé a besarle la panza y ella se sobresaltó,pero no me detuvo. Empecé a besarla muy despacio, apenas tocando su piel. Empecé a subir hacia sus tetas y me detuve un ratito en la base, me salteé los rosaditos pezones (con mucho esfuerzo) y me le fui al cuello y empecé a bajar nuevamente.
A Belu la pone muchísimo que le chupen los dedos de los pies, así que al llegar ahí abajo me tomé un par de minutos. Ella estaba gimiendo, amasándose las lolas. Le separé las piernas y empecé a acariciarle los muslos y la conchita por arriba de la tanga. Belu abrió un poco más las piernas y subía y bajaba su cadera muy despacio. Le corrí la tanga, estaba muy húmeda. Empecé a pasarle la lengua por los labios y yo ya estaba a full otra vez. Me detuve en el clítoris y empecé a lamerlo suavemente, la verdad es que estaba delicioso. Belu empezó a ronronear y seguía amasándose las tetas. Mientras seguía chupándole el clítoris, empecé a meterle un dedo en la conchita, dos dedos. Belu empezaba a mover la cadera mas enérgicamente y empezaba a gemir mas fuerte. Entre los gemidos me dijo algo que no escuché y enseguida levantó la cabeza y mirándome me dijo:
- La cola, metéme un dedo en la cola.
Rápidamente bajó la cabeza y siguió gimiendo. Yo saqué un dedo de la conchita y empecé a masajearle el ano muy despacio. Belu arqueaba la espalda y se tensaba con cada presión en su agujerito mas lindo, abriendo grande la boca. Cuando sentí que estaba lista, le metí el dedo mayor en el culito, el índice en la conchita y con el pulgar le masajeaba el clítoris. La vista era fenomenal. Belu estaba sacadísima, tenía las tetas coloradas y los pezones durísimos de la amasada que ella misma se había pegado. El orgasmo le llegó en un par de minutos. No dejé de mover los dedos dentro de ella mientras acababa. Al cabo de unos segundos ella misma me empujó las manos fuera de ella, me acosté a su lado y nos dimos un beso largo.
Ella me pidió que le saque la tanga porque estaba toda mojada. Yo le pedí que vayamos al agua y me fui a buscar las dos mascaras de buceo y los snorkel. Nos metimos al agua en bolas, tocándonos y abrazándonos en el agua. Nos pusimos las máscaras y empezamos a recorrer un poco la costa, sin alejarnos demasiado. Verla a Belu buceando en bolas cerca del fondo era absolutamente erótico, excitante y uno de los mejores momentos que he vivido hasta ahora.
Estuvimos un rato en el agua, nos tocamos muchísimo, nos besamos y yo ya estaba listo para el segundo round. Salimos y nos fuimos a las lonas, el clima estaba espectacular, Belu estaba mortal y en el camino desde el agua hasta la cabaña, unos veinte metros, se me volvió a parar la pija mientras veía ese culo hermoso. Belu se dio vuelta al llegar y cuando me vio, puso carita de superada. Me acosté al lado de ella y nos volvimos a besar. Ella me manoteó la pija y después de un par de sacudidas y una lengüeteada, me dijo que vayamos a la cabaña, que el sol estaba bastante fuerte. Me levanté y ella iba caminando adelante, llevándome de la pija. Llegamos a la cama y nos acostamos. Yo la di vuelta y ella se puso boca abajo, le levanté la colita y los cachetitos del culo se le separaron, dejando a la vista el culito hermoso y empecé a chuparlo como si no hubiera un mañana. La mezcla de su gustito natural con la sal del mar lo hacían delicioso, empecé a abrirme paso con la lengua y ella se agarraba de las sábanas y gemía como loca.
Se dio vuelta de golpe y se acostó con las piernas bien abiertas en medio de la cama. Pasé mis piernas a ambos lados de ella y nos pusimos a hacer un 69. La conchita, mas salada que de costumbre estaba bien humedita y ella se relamía, chupándome la pija con energía.
Le pedí parar, porque me la estaba chupando tan bien, que me estaba por arrancar el lechazo, así que me bajé de la cama y yo la seguí chupando a ella, hasta que me separó y se dio vuelta, poniéndose en cuatro y se golpeó un par de veces las nalgas. Me paré y me puse detrás de ella, le pasé mi pija dura por la concha, hacia arriba y hacia abajo dos veces y en la tercera pasada ella empujó hacia atrás y se ensartó solita. Sé que todas las conchas son húmedas y que todas las conchas son tibias, pero esta, la concha de Belu,era celestial. Me quedé un momento quieto, para sentir en detalle cada curva y rugosidad. La saqué un poco, muy despacio y volví a meterla, muy despacio nuevamente. Belén me miraba sobre el hombro y sus ojos me demostraban que a ella también le gustaba. Me quedé dentro de ella un momentito mas y empecé a moverme un poco más rápido, cada dos o tres veces que empujaba, le hacía un movimiento lateral, que sabía que le gustaba. Además, al llegar a tocar mi pelvis con su cola, le apretaba un poquito mas y ella gemía un poco mas fuerte.Así estuvimos hasta que ella acabó nuevamente. Me pedía que siga, que no pare,que tenía otro orgasmo viniendo y casi enseguida enterró la cabeza en la almohada, dejándome toda su espalda a la vista y en el remate, el año, chiquitito, arrugadito. Lo escupí y empecé a pasarle un dedo, ella se despegó de la almohada y empezó a moverse también. Al cabo de unos treinta segundos, me pidió que se la meta en el culo.
Nos paramos, la llevé afuera y la puse de frente contra una palmera, ella levantó el culito y me agaché a chupárselo un poco, estaba todo listo. Me paré y la ensarté por el orto, despacio, hasta que tuvo toda mi pija adentro. Después me empecé a mover despacio, disfrutando nuevamente el roce. Belu hacía algo que me partía al medio, cuando yo la garchaba despacio por el culo. Cuando yo iba hacia adelante, hacia adentro de su culito, ella aflojaba, pero cuando empezaba a sacarla ella apretaba y el incremento del roce en mi pija era fenomenal. Esta vez lo hizo un par de veces,pero enseguida empecé a darle un poco más rápido, ya que no quería prolongarlo mucho, porque había dejado el lubricante en la cabaña. En menos de un minuto ella acabó muy fuerte y escucharla a ella acabar fue demasiado, me vine dentro de ella como si fuera un toro de cría. Debo haberle dejado un litro de leche en el culito.
Nos quedamos quietos, con la respiración agitada unos momentos, hasta que mi pija se salió solita de ese culo hermoso. Nos besamos y nos fuimos a la cama a descansar un poco.
Parte 1: http://www.poringa.net/posts/relatos/2935629/Belen-mi-mejor-amiga-1ra-parte.html
Parte 2: http://www.poringa.net/posts/relatos/2937733/Belen-mi-mejor-amiga-2da-parte.html
Parte 3: http://www.poringa.net/posts/relatos/2938633/Belen-mi-mejor-amiga-parte-3.html
Parte 4: http://www.poringa.net/posts/relatos/2940647/Belen-mi-mejor-amiga-parte-4.html
Parte 5: http://www.poringa.net/posts/relatos/2942140/Belen-mi-mejor-amiga-parte-5.html
Buenas. Después de mucho tiempo, retomo la historia del viaje que hice a Venezuela con mi amiga Belén.
El sábado nos levantamos temprano, yo había armado un bolso con ropa de playa, toallas y una muda de ropa interior, no íbamos a pasar las siguientes 36 horas a Los Roques, a una cabañita en una playa sin nada, ni luz,con acceso solo desde el mar.
Tomamos una avioneta desde Maiquetía hasta Los Roques y desde ahí nos dejaron en una lanchita, junto con una botella de 20 litros de agua,una conservadora con un poco de comida, suficiente para el día y medio que íbamos a pasar en ese lugar.
La cabañita tenía luz para la noche (con paneles solares y baterías), una cama de dos plazas completita, unos estantes para dejar la ropa y un baño muy rudimentario que, por suerte, no necesitamos usar. Afuera había una parrilla muy básica y chiquita. La playa era espectacular, no se veía a nadie, ni se escuchaba otra cosa que el viento en los árboles. La lancha se retiró, no sin antes coordinar el horario en que nos iban a venir a buscar al día siguiente.
En cuanto terminamos de sacar la ropa, Belu se sacó la ropa y se puso una micro bikini, ante mi sorpresa, me dijo que la había comprado un par de días antes. Adelante, apenas le tapaba la concha depilada y atrás, se le perdían dos hilitos entre los cachetes. Arriba no se puso nada. Yo me puse un pantalón corto, mas que nada para tapar un poco mi pija durísima por la vista. Salimos a la arena, tiramos unas lonas a unos metros de la cabaña y nos acostamos al sol. Era apenas pasado el mediodía y si bien hacía calor, el sol no estaba fuerte.
Belu me preguntó si me iba a dejar el pantalón puesto y le expliqué como la excitación masculina es mucho mas evidente que la femenina. Ella se arrodilló y me sacó el pantalón. Ahí estaba, al sol, en bolas y con una erección que podría haber rivalizado con los troncos de las palmeras de la playa. Belu empezó a acariciarme la pija muy despacio, me acariciaba muy levemente todo el largo con el frente y el dorso de la mano, hasta que empezó a usar la lengua, igual que la mano, subía y bajaba desde mis bolas hasta la puntita del glande, siempre con la mirada fija en mí. Después de un par de pasadas de lengua, se la metió en la boca y empezó a chupar con vigor casi inmediatamente. Yo me retorcía en la lona, con la boca me estaba pegando una garchada monumental y con las manos me masajeaba las bolas, estaba en las nubes y sentía el orgasmo viniendo, intenté separarla de mi pija, ya que no quería acabar tan rápido. Belu, sin dejar de chupar, se agarró con firmeza y no me dejó apartarla, bajó su mano de las bolas a mi cola y empezó a masajearme el ano con un dedo, eso me desarmó y acabé muy intensamente. Fue un orgasmo largo, principalmente porque Belu no paraba de pasarme un dedo húmedo por todo mi agujero posterior, era un masaje enérgico, pero sin meter el dedo. Quedé totalmente doblado del placer, no llegué a ver si había tragado todo o si había escupido en la arena, pero ella se acostó al lado mío y lo único que dijo fue:
- ¿Viste?. Se terminó el problema del pito parado.
Yo quise besarla,pero me dijo que no, que ahora quería tomar sol. La dejé, tenía que recuperar el aire.
Pasado un ratito, me pongo de costado y empiezo a mirarla.Estaba mortalmente hermosa. Insisto en que no es una modelo. Es una mujer de cuarenta y pocos, que se cuida bastante, pero que ha pasado muchos años estudiando y que, además, tiene una familia de la que se hace cargo. Pero estaba hermosa, acostada al sol boca arriba, con las lolas al aire y con la rajita apenas tapada por la mini micro tanga. Empecé a besarle la panza y ella se sobresaltó,pero no me detuvo. Empecé a besarla muy despacio, apenas tocando su piel. Empecé a subir hacia sus tetas y me detuve un ratito en la base, me salteé los rosaditos pezones (con mucho esfuerzo) y me le fui al cuello y empecé a bajar nuevamente.
A Belu la pone muchísimo que le chupen los dedos de los pies, así que al llegar ahí abajo me tomé un par de minutos. Ella estaba gimiendo, amasándose las lolas. Le separé las piernas y empecé a acariciarle los muslos y la conchita por arriba de la tanga. Belu abrió un poco más las piernas y subía y bajaba su cadera muy despacio. Le corrí la tanga, estaba muy húmeda. Empecé a pasarle la lengua por los labios y yo ya estaba a full otra vez. Me detuve en el clítoris y empecé a lamerlo suavemente, la verdad es que estaba delicioso. Belu empezó a ronronear y seguía amasándose las tetas. Mientras seguía chupándole el clítoris, empecé a meterle un dedo en la conchita, dos dedos. Belu empezaba a mover la cadera mas enérgicamente y empezaba a gemir mas fuerte. Entre los gemidos me dijo algo que no escuché y enseguida levantó la cabeza y mirándome me dijo:
- La cola, metéme un dedo en la cola.
Rápidamente bajó la cabeza y siguió gimiendo. Yo saqué un dedo de la conchita y empecé a masajearle el ano muy despacio. Belu arqueaba la espalda y se tensaba con cada presión en su agujerito mas lindo, abriendo grande la boca. Cuando sentí que estaba lista, le metí el dedo mayor en el culito, el índice en la conchita y con el pulgar le masajeaba el clítoris. La vista era fenomenal. Belu estaba sacadísima, tenía las tetas coloradas y los pezones durísimos de la amasada que ella misma se había pegado. El orgasmo le llegó en un par de minutos. No dejé de mover los dedos dentro de ella mientras acababa. Al cabo de unos segundos ella misma me empujó las manos fuera de ella, me acosté a su lado y nos dimos un beso largo.
Ella me pidió que le saque la tanga porque estaba toda mojada. Yo le pedí que vayamos al agua y me fui a buscar las dos mascaras de buceo y los snorkel. Nos metimos al agua en bolas, tocándonos y abrazándonos en el agua. Nos pusimos las máscaras y empezamos a recorrer un poco la costa, sin alejarnos demasiado. Verla a Belu buceando en bolas cerca del fondo era absolutamente erótico, excitante y uno de los mejores momentos que he vivido hasta ahora.
Estuvimos un rato en el agua, nos tocamos muchísimo, nos besamos y yo ya estaba listo para el segundo round. Salimos y nos fuimos a las lonas, el clima estaba espectacular, Belu estaba mortal y en el camino desde el agua hasta la cabaña, unos veinte metros, se me volvió a parar la pija mientras veía ese culo hermoso. Belu se dio vuelta al llegar y cuando me vio, puso carita de superada. Me acosté al lado de ella y nos volvimos a besar. Ella me manoteó la pija y después de un par de sacudidas y una lengüeteada, me dijo que vayamos a la cabaña, que el sol estaba bastante fuerte. Me levanté y ella iba caminando adelante, llevándome de la pija. Llegamos a la cama y nos acostamos. Yo la di vuelta y ella se puso boca abajo, le levanté la colita y los cachetitos del culo se le separaron, dejando a la vista el culito hermoso y empecé a chuparlo como si no hubiera un mañana. La mezcla de su gustito natural con la sal del mar lo hacían delicioso, empecé a abrirme paso con la lengua y ella se agarraba de las sábanas y gemía como loca.
Se dio vuelta de golpe y se acostó con las piernas bien abiertas en medio de la cama. Pasé mis piernas a ambos lados de ella y nos pusimos a hacer un 69. La conchita, mas salada que de costumbre estaba bien humedita y ella se relamía, chupándome la pija con energía.
Le pedí parar, porque me la estaba chupando tan bien, que me estaba por arrancar el lechazo, así que me bajé de la cama y yo la seguí chupando a ella, hasta que me separó y se dio vuelta, poniéndose en cuatro y se golpeó un par de veces las nalgas. Me paré y me puse detrás de ella, le pasé mi pija dura por la concha, hacia arriba y hacia abajo dos veces y en la tercera pasada ella empujó hacia atrás y se ensartó solita. Sé que todas las conchas son húmedas y que todas las conchas son tibias, pero esta, la concha de Belu,era celestial. Me quedé un momento quieto, para sentir en detalle cada curva y rugosidad. La saqué un poco, muy despacio y volví a meterla, muy despacio nuevamente. Belén me miraba sobre el hombro y sus ojos me demostraban que a ella también le gustaba. Me quedé dentro de ella un momentito mas y empecé a moverme un poco más rápido, cada dos o tres veces que empujaba, le hacía un movimiento lateral, que sabía que le gustaba. Además, al llegar a tocar mi pelvis con su cola, le apretaba un poquito mas y ella gemía un poco mas fuerte.Así estuvimos hasta que ella acabó nuevamente. Me pedía que siga, que no pare,que tenía otro orgasmo viniendo y casi enseguida enterró la cabeza en la almohada, dejándome toda su espalda a la vista y en el remate, el año, chiquitito, arrugadito. Lo escupí y empecé a pasarle un dedo, ella se despegó de la almohada y empezó a moverse también. Al cabo de unos treinta segundos, me pidió que se la meta en el culo.
Nos paramos, la llevé afuera y la puse de frente contra una palmera, ella levantó el culito y me agaché a chupárselo un poco, estaba todo listo. Me paré y la ensarté por el orto, despacio, hasta que tuvo toda mi pija adentro. Después me empecé a mover despacio, disfrutando nuevamente el roce. Belu hacía algo que me partía al medio, cuando yo la garchaba despacio por el culo. Cuando yo iba hacia adelante, hacia adentro de su culito, ella aflojaba, pero cuando empezaba a sacarla ella apretaba y el incremento del roce en mi pija era fenomenal. Esta vez lo hizo un par de veces,pero enseguida empecé a darle un poco más rápido, ya que no quería prolongarlo mucho, porque había dejado el lubricante en la cabaña. En menos de un minuto ella acabó muy fuerte y escucharla a ella acabar fue demasiado, me vine dentro de ella como si fuera un toro de cría. Debo haberle dejado un litro de leche en el culito.
Nos quedamos quietos, con la respiración agitada unos momentos, hasta que mi pija se salió solita de ese culo hermoso. Nos besamos y nos fuimos a la cama a descansar un poco.
2 comentarios - Belén, mi mejor amiga (parte 6)