El secreto de mamá 5 (primera parte)

Charla con una prostituta.

Quinto polvo (primera parte).

Por una cuestión de tiempo, vos a dividir este último capítulo en dos.

Pueden ver el primer polvo en este link: http://eroticasaventuras.blogspot.com.ar/2016/09/las-eroticas-aventuras-de-lucas.html

El segundo en este: http://eroticasaventuras.blogspot.com.ar/2016/09/para-leer-el-primer-capitulo-hace-click.html

El tercero en este: http://eroticasaventuras.blogspot.com.ar/2016/09/las-eroticas-aventuras-de-lucas_21.html

Y el cuarto en este: http://eroticasaventuras.blogspot.com.ar/2016/09/las-eroticas-aventuras-de-lucas-cuarto.html

-¿Cómo fue tu despedida de soltero?- preguntó Silvia, preguntó la sesentona puta, que estaba más que agotada. La habíamos agarrado entre 5 pendejos y no le dejamos en paz ninguno de sus agujeros que cogimos sin piedad. Cada uno se hechó un polvo en cada uno de los agujeros de la veterana, que quedó feliz tras cumplir su dolorosa fantasía.
-Fue una semana antes- contestó Lucas -una semana antes de la fecha que tenía para casarme-
-¿Qué tenías para casarte? ¿No me dijiste que estas casada con tu media hermana?-
-Si. Bueno, no. Osea, si, pero no en ese primer momento. Tenía planeado todo, pero se me había venido todo abajo-.
-¿Por qué?- preguntó Silvia -¿Qué pasó?-.
-Mi vieja-
-¿Qué hizo tu vieja?-
-Cogimos-
-¿Cómo?- Silvia quedó boquiabieta.
-Me cogí a mi vieja en mi despedida de soltero-
-¿Vos la buscaste o ella te buscó?-
-Ella me buscó a mi- comenzó a relatar Lucas -Una semana antes que me casara, mi mamá me pidió que pasara por el departamento porque quería hablar. Como supuse que iba a estar ocupada con sus clientes, esperaba una charla rápida, para seguir con mis cosas.
Llegué al departamento que tan bien tenía conocido, por todas las veces que fui a coger con Vivi, y esperaba que ella me atendiera la puerta, porque mi mamá estaba siempre ocupada. Para mi sorpresa, fue mi mamá quien me recibió, vestida con su ropa de trabajo. Estaba montada sobre unos tacos, que la acercaban a mi altura. Una tanga color roja y un baby doll rojo que, mediante su transparencia, dejaba ver sus tetas. Mi mamá ya no era esa puta que descubrí a sus 40. Habían pasado casi 15 años y ella, con sus 55, seguía estando regia. Tal vez sus tetas, esas tetas que me dieron de comer, estaban un poco más caída y su cuerpo algo más arrugado. Pero la confianza y la actitud y la experiencia de su impronta, podrían haber calentado a cualquiera, sin importar su edad.
Cuando la vi, hice lo que hacia siempre: la miraba de arriba abajo y me calentaba, aunque después descargara mi leche en otra. Ella, después de darme una generosa vista de sus tetas, se dio vuelta y comenzó a caminar hacia su cuarto. La seguí, sin sacarle la mirada a su culo madura y generoso, acentuado por la altura que le daban los tacos.
-¿Te gusta mi culo, hijo?- preguntó mi mamá.
-¿Cómo?- respondí, haciéndome el tonto.
-Si te gusta mi culo. Ya se que lo estás mirando, como me miras siempre, desde que eras un pendejito. Te conozco, yo te parí, no te olvides-
Me quedé en silencio pero ella me volvió a preguntar -¿Te gusta mi culo, si o no?- mi mamá se puso de frente a la pared, dándome la espalda, apoyó sus manos y levantó la cola lo más que pudo, para que vea todo ese monumento, además de su concha, que comenzaba a asomarse a través de la tanga.
De fondo se escuchaban los gemidos fingidos de Vivi, que estaba con un cliente, en su cuarto, por lo que preferimos más intimidad, y nos encerramos en el cuarto de mi mamá.
-¿Sabes por qué te traje Lu?-
-No mamá ¿Por qué?-
.Por tu despedida de soltero Lu-
Yo miré para todos lados. Estabamos los dos solo, y el cuarto no tenía nada de especial, por lo que supuse que quería organizar mi despedida. -¿A quién vas a traer para mi despedida? ¿Cuándo va a ser?-
-Hoy, ahora. Y no voy a traer a nadie. ¿O no te alcanza conmigo?- mi mamá se sacó el baby doll y los tacos.
-Obvio que me alcanza con vos, pero ¿Qué vamos a hacer?-
Mi mamá se acercó, me apoyo sus hermosas tetas naturales, me agarró la pija por encima del pantalón y acercando su boca solo me respondió con una frase -a coger pendejo ¿O no es eso lo que queres desde que se te empezó a parar la pija?-

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