Propuestas de mi prima -juegos sexuales-.

Cuando era más pequeño solia jugar con una prima, a la que dejaban quedarse en casa de vez en cuando. La última vez que habia estado en casa teniamos yo trece años y ella doce. Yo en plena pubertad y con todo lo que implica y ella desarrollándose como mujer. Recuerdo que la última vez que la vi su cuerpo era distinto, le crecian las tetas y se le ensanchaba un poco la cadera.

Sin embargo por azares del destino no volví a verla hasta mucho después. Unos 8 o 9 años más tarde. Cuando entre a casa y la ví, no la reconocí de inmediato. Era una chica hermosa y eso es poco decir. Tenia unas tetas grandes y unos labios hermosos. Fue hasta que ella me saludo, entonces me dí cuenta que era ella; mi prima.

Habia venido a casa para quedarse un par de días, pues se iba a casar una amiga de ella y de mi hermana y no podian faltar. Asi que ella trajo consigo una maleta pequeña con su ropa y sus enseres de belleza; ya lo saben las mujeres se preparan para una boda a veces más que la misma novia.

Cuando nos vimos en la sala, solo la salude y pase a recoger unas cosas pues tenia prisa.

A la tarde cuando llegué a mi cuarto ella estaba allí. Mirando mis cosas, yo al entrar quedé pasmado ante tal imagen: ella de espalda mirando la repisa de mis cds, cogia uno lo veia y lo devolvia. Mi mirada bajo rápidamente por ese vestido con escote en la espalda que traia puesto, floreado en tonos bemellones, se veia el brassiere de color azul claro y bajando su cintura se entallaba a la perfección para luego ensancharse en un culo; de los mejores que he visto en mi vida. Sus piernas se veian gruesas y muy apetecibles, yo sin quererlo ya me habia chutado con la vista a mi prima completita y ella ni siquiera me habia visto allí.  Esta actitud lasciva me hizo sentir mal. Pues nunca antes me habia pasado, con ninguna mujer. Solo con ella y en ese instante. Yo a sabiendas que era parte de mi familia pues no me sentia nada bien.

Ella voteo y me vio allí, yo disimulé.

-Hola primo...- me dijo.

-Hola- le contesté- ¿ te gustan mi música?

-Si, veo que seguiste coleccionando cosas interesantes. Aunque veo que tienes mucho rock y jazz.

-Si prima... es lo que más me gusta. Le dije mientras me olvidaba de la erección que habia tenido antes. Pero verla de frente y con esas tetas que tenia, era casi imposible no empalmarse. Esta prima estaba sexy por donde se le viera, seria mi infierno de seguir alli.

-Te volviste un tipo interesante- me dijo- ¿sabes? dice mi tía que has estado estudiando la universidad, que eres reservado pero yo creo que sigues siendo un tipo inteligente e interesante, debes tener muchas admiradoras y novias.

-Gracias prima pero... -no sabia bien que decir ante tal cumplido- no, no es así como tu crees. Tampoco no es para tanto. Las chicas buscan solo hombres guapos... no inteligentes o interesantes.

-Pero tu lo eres... primo.

Después de varias pláticas que tuvimos ella se enteró de mi vida, que no tenia novia, que seguia siendo virgen -lo supuso-, que me iba bien en la escuela, que tenia pocos amigos, etc, etc. Ella al contrario era una chica más sociable, tenia muchas amigas y estaba quedando con un novio desde hace tiempo. Yo no podia sacar de mi mente su sensualidad mientras veia mis compactos musicales. Era una imagen fuerte... recordaba inclusive como se le marcaba en las nalgas la linea de la braga, cada que lo recordaba; empalmaba. Asi de sencillo. Y recordaba las tetas y el escote, que aunque miraba discretamente, siempre  miraba allí.

Una de esas noches cuando regresé a casa, cansado por el ajetreo del estudio. Ella me esperaba en el cuarto, esta ves revisando mis libros. Tenia un par en la cama y estaba sentada leyendo uno mientras acariciaba la contaportada. Yo la ví y de nuevo fue una imagen imponente.

Tenia las piernas cruzadas, el vestido subia unas dos cuartas arriba de la rodilla, se marcaba su musculatura, se ensanchaba en las caderas y los senos se le veian llenos y firmes. Ella al verme en la puerta, solo me miró y sonrio.

-Tienes buen gusto- me dijo- estube un rato pasando ojo por tus libros. Espero no incomodarte.

-No prima... para nada- le dije- no me incomodas pero si me sorprendió encontrarte aqui.

-¿Por qué?- me preguntó con algo de malicia.

-Bueno esque, yo supuse que andarias fuera paseando, con tu prima -me referia a mi hermana-.

-No, ella se fue con el novio y no me apetecía salir con ellos. Queda una como farola entre dos tortolitos. Me dijo y se rio.

Despues de un rato llevamos la platica hacia terrenos candentes, de manera inconsciente o quizás ella lo provocaba.

-¿En serio primo, no sé porque me miran tanto los hombres de acá?

-Bueno esque... eres -me puse algo nervioso- muy guapa.

-Si bueno pero una es guapa y ya... allá en mi ciudad no me miran asi.

-¿Y cómo te miran aqui? - le pregunté.

-Pues no sé, como con deseo. Lo noto.

-¿En serio? bueno esque eres muy atractiva. Es solo eso.

-¿A ti te gusto? ¿Te parezco atractiva?

Yo no supe muy bien que decir... -eh bueno prima... eres mi prima-.

-Vale primo, no te hagas el tonto. Te he visto como me miras. Desde el primer dia, lo supe.

-Perdón... -en verdad me sentia apenado y tonto a la vez, segun yo habia disimulado y resulto que habia sido descubierto a primeras-.

-Descuida... no es nada del otro mundo. Me dijo Mientras descruzaba las piernas para cruzarlas hacia el otro lado. Yo sólo pude mirar como se abria su faldita casi dejaba ver sus bragas y luego se cerraba. Ella me miro sonriendo, yo estaba anonadado. Luego ella saco su lengua y la paso inocentemente por sus labios. -¿Te gusta primo?.

Yo sólo le conteste con la mirada pues seguia viendola a los ojos, a las piernas y los pechos. Se me empezó a empalmar como nunca. Durisima. Ella lo notó y siguió jugando con eso. Me dijo que cerrara la puerta y yo obedecí. Entonces se puso de pié y se puso de espaldas a la silla con una rdilla en el asiento y la otra pierna en el suelo, se curvo de tal manera que el culo se le veia especialmente sensual,  Se levanto un poco la falda pero aún sin dejarme ver las bragas, solo se marcaba la linea. Yo estaba muy pero muy empalmado. Se dejaron ver un poco las bragas luego se sento y cruzó las piernas, inclinándose un poco mientras me mostraba los senos dentro de ese escote tan sensual.

-Ahora vas a decirme que no te gusta...

-Pues eh....- estaba nervioso aún.

-Pero mira - me señalo a la entrepierna donde se notaba el bulto de mi erección- si ya estas erecto. O ¿no?.

Yo solo me sonroje... y entonces ella, bajando la voz para que no la fueran a oir mis padres me dijo algo que jamás habria imaginado ni soñado siquiera.

-Dejáme verte. dejáme ver como te masturbas.

Yo sólo le negué con la cabeza, era inimaginable que yo fuera a hacer algo así con mi prima. Me sentía como si fuera a hacer algo totalmente indebido. Pero ella insistió:

-Si me dejas verte... y me provocas yo lo hago para tí. Anda y mientras me decia esto se levanto la falda, pude ver sus bragas y su concha carnosa debajo mientras ella se acarició un poco y luego se bajo la falda de nuevo.

Yo sin decir más nada me desabotone el jeans y baje mi truza poco a poco. De repente estaba allí mi pene colgando, con un hilillo de líquido pre-seminal colgando entre el glande y la truza. Mi prima solo solto una risita cachonda y yo notaba como un rubor me subia al rostro, mi temperatura estaba más alta  que nunca.

Entonces ella desde la silla cerró su puño y me dijo en un ademán -jalátela- después me lo dijo entredientes suave y cachondamente -jalátela primo... venga ya. Y se comenzó a tocar la concha aún con las bragas puestas. Yo la veía y allí de pie comencé a masturbarme, primero lento como lo hacia ella, luego más rápido. Ella se quito las bragas y me las aventó juguetona. Y me dijo:

-Envuelve tu pene con ellas y jalátela.

Yo me sentí extasiado, cogí sus bragas y las enrolle en mi pene, mientras seguía jalándomela. Al ritmo que ella se tocaba. Esto parecío gustarle porque pronto comenzo a correrse, gimiendo y moviéndose fuertemente en la silla, mientras cerraba los ojos y luego los abria mucho. Yo casi al momento me corri, dos explosiones fuertes de semen desde mi verga dura enrollada en su braga y ella solo se río con una risa poco común, estaba extasiada. Mi primita estaba extasiada y cachonda. Seguro si le hubiera pedido en ese momento que me dejara metersela me habria dejado. Pero yo no queria hacer una estúpidez, a fin de cuentas eramos familia.

Le devolví las bragas y ella sólo las olió y se las puso mientras me sonreía. Después me dijo al oido:

-Antes que me vaya quiero hacerlo de nuevo guardame tu lechita.

Yo que pensé que con eso iba a descansar de ese deseo mórbido que me corroía al verla. Pero los dias siguientes fueron más intensos aunque ambos disimulabamos, al verla en cualquier lugar no podia verla con ese deseo y lascivia. Y ella disfrutaba esto. En alguna ocasión enla cocina ella me agarró el paquete mientras me dio un beso en la mejilla.

Pero ese... es otro relato.

J.R. 2015

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Si te gustó acá te dejo el link del prmer relato que subí a Poringa... pasa también a ese:

http://www.poringa.net/posts/relatos/2800836/Una-paja-espontanea--en-el-bus-.html