Una navidad diferente

Bueno, después de tanto tiempo de ser espectador voy a tratar de ser "protagonista".
Esta historia se sitúa allá por el 2004, acababa de terminar el colegio y empezaba la facultad.
Ese año mi familia decidió pasar las fiestas en la casa de unos tíos en Esteban Echeverría, en una quinta enorme, llena de árboles, perros y una hamaca paraguaya que me encantaba, era orgazmica esa hamaca.
La cuestión es que fuimos mis viejos, mi hermana y yo; y allí nos esperaban mis tios, mís primos ( C y J, ambos de 30 años en esa época) y la mujer de J, M ( que es de Paraguay, se imaginarán la sangre caliente de esa mujer).
Bueno la cuestión es que M era hermosa, de ojos claros y un cuerpo de la hostia, caminaba y meneaba las nalgas como si el viento las hamacara, y ni que hablar cuando te miraba fijo, te dejaba babeando a lo perro con hambre.
Yo la miraba y miraba a J y me preguntaba como ese nabo tenía a esa mujer ( mi primo es el ejemplo del fracaso) pero bueno es el destino. Ese día, el 24 a la tarde, la pase en la pile boludeando y M también boludearba conmigo hasta que en un momento se dio cuenta que tenía a mi amigo duro como hormigon; me miró, sonrió ( mientras yo estaba rojo como huevo de ciclista) y se fue de la pileta no sin antes mostrarme bien su cola blanca ( me acuerdo y mi cuerpo despierta su instinto animal). Después de eso salgo de la pileta y entró a bañarme, estoy en medio del "baño" ( en realidad le estaba sacando punta al lápiz) y siento que abren la puerta y me dicen " no te asustes, hago pis y me voy", era ella y yo con el amigo en la mano, obviamente me quedé quiero pero eso no evitó la siguiente frase: "yo pensé que la ibas a guardar para mi", nahhhh! en ese momento me explotó todo, repinte el baño en 5 minutos.
Claramente salí del baño relajado como fumon después de un pipazo, y acompañe a mi primo a comprar el carbón y boludeces de último momento, mientras caminábamos yo le veía dos guapas en la cabeza, del tamaño de un brazo adulto, pero bueno el respeto pudo más, por lo que deje de imaginar y le seguí la.conversación que me saco en el camino.
Volvimos y M estaba vestida tan perra que cualquier hombre le entregaba hasta el pin de la tarjeta de débito, era una de esas imágenes que a los 17 te dejaban los huevos secos y las manos con principio que quemaduras.
Una vez más se me abarrotaron los pantalones y caminaba como chueco para disimular, ella me miraba y sonreía ( a todo esto yo no atiene a decir nada a nadie sólo quería agarrar a esa mujer y sacarle el acebto a caderazos contra la pared, quería hacerla gemir, quería que se moje así.como ella me dejo el amigo el forma de mástil)

Bueno nos sentamos a la mesa y oh casualidad ella quedó al lado mío, no se dan una idea lo que transpire, lo que mediante para no arrancarle la ropa y darle bomba ahí con el papa Noel de centro de mesa pero me contuve hasta entrada la madrugada donde algo paso pero eso es parte del próximo post.
Espero que les halla gustado y que el mensaje de que la bestialidad, el olor a sexo, las ganas de partir al medio a alguien no quita el respeto, la buena onda y sobre todo el reír en el después halla llegado.
Abrazo de gol a todos! 🙂

1 comentario - Una navidad diferente

DAVIDORTIZ10
QUE HIJO DE PUUUU.. CONTAAAAA
dcoco
Conté toda la historia, fíjate que hay dos post mas