Trio

Hace un tiempo me pasó algo que nunca pensé podría sucederme. Porque siempre uno anda detrás de concretar fantasías, pero es difícil que se de. Sin embargo, pude cumplir la clásica: un menage a troi.
Resulta que viajaba a la Capital Federal por cuestiones laborales y tenía que quedarme un par de días allá. Nada mas aburrido que estar al pedo en Capital (en las horas libres claro); así que mi plan era reencontrarme con amigos o terminar encamado con una escort en el hotel.
Llamé a Juan proponiéndole que armara un encuentro de amigos: José, Jorge, María Elena, Marina, entre otros. Juancito se puso de inmediato a convocarlos y quedamos en encontrarnos en Puerto Madero el viernes por la noche.
Ese viernes llegué de la última de las sesiones de trabajo al hotel y me puse presentable para la noche de marcha que se vendría.
Llegamos casi todos al mismo tiempo; en realidad, el único que venía solo era yo. Juancito pasó a buscar a las chicas y los otros machitos no pudieron venir.
Las chicas: se las presento: María Elena: una piba mas bien petisita, pero de cuerpo armonioso. Se destacaban sus bien torneadas piernas, rematadas por un culito perfecto: tamaño justo, paradito y duro. No mucho de tetas y con cara de peterita enmarcado en un cabello leonino. Marina mas bien flaca, muy divertida e irónica..., y un culo! extraordinario. Toda esa mujer parecía comenzar y terminar en ese culo extraordinario, mas bien grande pero firme, durito. Una potranca que sabía explotar este atributo que bamboleaba al caminar.
Ni decir que estaban producidas para la ocasión: unas verdaderas perras.
Juancito creo yo que venía ni había invitado a los demás pibes con la intención de voltearse de una buena vez a Marina y sabía que a mi siempre me gustó María Elena, así que las cosas estaban dadas como para que la velada terminara de lo mejor.
No quiero demorarlos en la cena. Solamente diré que entre ambas mujeres había como un marcado recelo, diría que competitivo, hasta agresivo, pero la cosa comenzó a ponerse caliente cuando Juancito les propone ir a un boliche de la zona a bailar. Ambas dijeron que sí.
Entramos en un ambiente bien poco iluminado, en el que se podía sentir el olor a porros. Tomé de la mano a Maria Elena y la llevé a bailar. Juancito hacía lo mismo con Marina.
María Elena comenzó a hacerme un baile bien sensual por lo que al rato le estaba comiendo la boca. No me importaba nada. En el medio de un montón de gente la manosee totalmente. Inclusive, le metí mano en la concha que se notaba húmeda y caliente.
Pero para mi sorpresa, Juancito me dice que se va..., con Marina le pregunto? no bolú! -me dice-, la hija de puta me sacó cagando cuando la quise transar y ahora ni quiere que la lleve a la casa. Lo lamente, creo que te cagué la joda de esta noche.
Le dije que no se hiciera problemas y se fue...
Busqué entonces a Marina, la agarré de un brazo y la llevé a la pista. La mina medio como que no entendía nada pero se dejó arrastrar. Comencé a hablarla: le dije que lástima Juancito. Es un boludo me dijo, es claro que está caliente conmigo, pero no puede pretender cojerme en la pista! Tenés razón le dije, no te hagas problemas que yo te llevo mas tarde. Nooo, yo me voy sola, quedate con María Elena que la tenes lista jajaja, me decía. Entonces le dije que las dos eran mis amigas, por lo que no la dejaría sola. Entonces me dice: es una perra, siempre interponiéndose entre los pibes que me gustan. Ya me pasó con Ivan (su ex novio) y ahora se nota que no te quiere entregar, jajaja. Mi sorpresa ya era mayúscula: Marina quería coger conmigo tambien!!!
Como pude las reuní y las convencí que teníamos que terminar la noche juntos, es decir: yo finalmente las llevaría a sus respectivas casas; cuando un nuevo conflicto apareció: a quien llevaba primero..., porque ninguna quería ser la última.
Solución: las llevo a las dos conmigo les dije. Creo que entre la bebida, la noche y la calentura que a esa hora juntábamos los tres, me dijeron que sí. Vamonos dijimos!
Adonde, pensaba yo. La casa de Marina no era opción. Estaba casada aún. La de María Elena tampoco. Decidí jugarme: chicas vengan a mi hotel! te parece, nos dejaran pasar? preguntaban. Siii, aseguraba yo con la duda carcomiéndome la cabeza, pero pensando mas bien con la pija.
En el hotel, el conserje me vió entrar con las dos pibas; me hizo una seña para hablar: no se puede me dijo..., tendremos que arreglar algo le dije: esto no me lo puedo perder. Así que con la ayuda de un vuelto que pasó a la mano del tipo la cosa se solucionó.
Una vez que entramos en el ascensor, una risa nervios invadió a los tres.
Jugado por jugado, las abracé a ambas, una de cada lado y le metí un piquito a Marina, luego otro a María Elena. Las dos se rieron, así que ahora fue un beso total a Marina que me respondió y otro a María Elena que no se quedó atras..., bueno, bueno, bueno pensaba yo, esto termina mal... o bien!
Entramos en mi habitación, abrí el frigobar y tomé el champan que estaba disponible. Un par de copas era lo que había, asi que las llené y se las entregué. Nos sentamos en la cama a tomar. Ellas me pasaban un traguito. La verdad que no se ni que boludeces hablábamos.
En un momento empezaron nuevamente los besos, al ratito mandé mano a las dos. Ellas se miraban casi amenazadoramente, como compitiendo a ver quien llegaba mas lejos. Yo mientras tanto, estaba metiendo mis dedos en las conchitas..., los saqué y los metí en mi boca...
Ahí se me tiraron encima. Era casi una lucha cuerpo a cuerpo. Me desnudaron y las desnudé
Las tipas estaban alzadas mal..., comenzaron a mamarme la verga y sucedió lo obvio: se encontraron boca con boca. Se partieron en un beso profundo y total!
Luego el desenfreno: penetrar a una mientras chupaba otra concha y cambio! hacer una cola mientras la otra mandaba lengua en la conchita! ufff, no se como me aguantaba! seguramente la mezcla de calentura, alcohol, deshinibición total.
Mi verga aguantó todo lo que pudo pero al final me dolían los huevos de ganas de acabar. Les dije acabo, acabo, acabo!
Aquí, aquí me dijo María Elena, en mi bocaaaa
En ese momento se arrodillaron y yo dejé escapar mi leche a chorros en la cara de las dos
Cada una saboreo mi leche y se limpiaron a pura lengua lo que les había quedado en la cara.
Se comieron a besos y me limpiaron la verga hasta la última gotita.
Finalmente, nos bañamos los tres juntos; nos vestimos, la llevamos a Marina a su casa y volvimos al hotel a dormir juntitos María Elena y yo.
Ahora somos "amigos con derechos" y ellas se encuentran muy seguido porque descubrieron que mas que ser competidoras, se tenían ganas...

6 comentarios - Trio

realplay80
buen relato y gracias por compartir
BerteF
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Maru975 +1
Me gusto!!!!! los tríos son lo mas
LemmeM
muy buen relato ojala pueda yo hacer un buen trio asi!!!!!!!!!!!!
ferchus2008
te felicito como me calientan los trios