Dos en un día (Gay)

Resulta que después de nuestro primer encuentro, Carlos y yo seguimos hablando por teléfono de vez en cuando, siempre buscando la manera de tener otro encuentro, pero por su trabajo o el mío no habíamos coincidido, hasta una vez que me llamó por teléfono para preguntarme si podía pasar por mi, le dije que sí y entonces como a las 10 de la noche paso a recogerme en su coche, estaba lloviendo muy fuerte así que corrí para subirme al coche un tanto empapado.

- Tenia muchas ganas de verte (me dijo Carlos)
- ¿si?, yo también, es difícil ponernos de acuerdo. (le contesté)
- Si, lo se, el trabajo…
- Además tu sabes que no me es fácil encontrar espacio
- Si, lo se, pero ya estas aquí ¿no?
- Es que ese es el punto, la verdad es que no tengo mucho tiempo, solo quería verte y saludarte. (me dijo Carlos con un aire de tristeza)
- Muchas gracias, no te hubieras molestado.
- No es molestia, sirve que te dejo en tu casa y no te mojas

Carlos manejaba hacia el rumbo de mi casa (nunca lo invité a mi casa, pero le dije donde vivía) mientras tanto, me acariciaba las piernas. Yo estaba un poco frustrado por que veía mis posibilidades de sexo desvanecerse.

- ¿Entonces no tenemos tiempo de nada? (pregunte con la esperanza de que se animara)
- No… bueno, tenemos de aquí a que llegamos a tu casa

Yo sonreí, y entendí el mensaje; me deslice como pude bajo sus brazos, baje su cierre y le saque la pija del pantalón; metí esa verga enorme en mi boca y se la empecé a mamar. La verdad era un poco incomodo, su auto era estándar y tenia que hacer malabares para que el pudiera manipular la palanca de velocidades, pero afortunadamente llegamos pronto a la calle en la que se encuentra mi edificio.

Carlos se estacionó y entonces yo tuve mas oportunidad para acomodarme y poder continuar con la mamada que le estaba dando. A mi la emoción me mataba, sentía los nervios de mamársela a alguien en un auto en plena calle, a pesar de que como les dije llovía a cantaros, así que no había mucha gente en la calle y seguramente no se vería nada hacia adentro del auto.

Tomaba la base de la verga de Carlos con una mano y aún me metía un buen trozo en la boca, como les conté anteriormente, no era una verga muy gruesa pero si muy larga. Carlos mientras tanto, metía su mano entre mi pantalón para acariciarme las nalgas, eso me gustaba, mientras yo tenia su pija en mi boca, succionando de arriba abajo y presionándosela con la mano. Se la mamé un rato hasta que me dijo que se iba a venir, y me pidió que me retirara, yo no lo hice y seguí chupando y jalándosela un poco mas rápido, entonces descargó su leche en mi boca y sentí como me llenaba, era mucho semen, seguramente derramé algo en su asiento. Continué con una chupada mas leve, como limpiando los rastros de leche en su verga, y finalmente me retiré, el se abrochó el pantalón y le me dijo que había estado rico.

Me dijo que se tenia que ir, pero esperaba que nos viéramos otro día con mas calma. Nos despedimos y yo subí a mi departamento.

La verdad es que me había quedado un poco caliente, desde que Carlos me había hablado me había hecho a la idea de que me cogería esa noche, y pues solo había podido mamársela, así que llegue a mi casa con la firme intención de masturbarme. Prendí la computadora para buscar algún video y empecé a jalármela. Pero justo cuando empezaba llamaron a la puerta. Me levante el pantalón y fui a abrir; Era Roberto.

- Wey que haces aquí!!! (le dije sorprendido y con ánimo rejuvenecido)
- Pues aquí, visitándote ¿estas ocupado? (me preguntó)
- No… para nada, pásate.
- ¿Quieres algo de tomar?
- No, gracias… mas bien ¿tu quieres algo? (me dijo sonriendo)
- jajajajaja, si… ¿qué me ofreces? (le continúe su broma)
- Tu lechita y a dormir
- Aaaa, ok… pues si, si quiero.
- Pero la vas a tener que ordeñar…
- Yo encantado…

Nos pasamos a la habitación sin que yo me acordara de que tenía pausado un video de un tipo atravesado por una pija de 20 metros… Roberto miró la computadora y a mi me dio un poco de pena…

- jajajaja ¿estabas ocupado?
- jaja,(yo me ruboricé), no sabia que ibas a venir, y pues uno tiene sus necesidades…
- pero ya estoy aquí (Me dijo, sentándose en el borde de la cama)
- ya se, en vivo es mucho mejor.

Me acerqué a Roberto y le quité el pantalón y la ropa interior y el se quedó sentado al borde de la cama, yo me puse de rodillas en el suelo entre sus piernas y tome la hermosa verga de Roberto para metérmela a la boca, (otra vez mi boca tenia su merecido), se la mamé un rato en esa posición y luego le dije a Roberto que se acostara, así lo hizo y yo seguí mamándosela en cuatro.

Roberto me alcanzó un condón de mi buró y se lo puse, y también le empapé de lubricante la verga, yo tenia prisa, necesitaba ese tronco en mi cola, y no tenia tiempo para dilataciones…

Entonces me senté en el y comencé a moverme de arriba abajo… Roberto solo miraba con las manos detrás de la cabeza como hacia el trabajo. Me cansé y Roberto me dijo que me pusiera en 4, me voltee y levente el culo para que me la metiera, Roberto me puso la punta de su verga en el ano y me tomo de las caderas para empujar… hacia movimientos deliciosos, no muy rápido, permitiendo que su verga entrara y saliera casi por completo, recorriendo mi culo con cada empujón.

Yo gemía de placer, entonces después de estar de rodillas atrás de mi, Roberto se incorporó un poco poniéndose encima de mi y clavándome la verga de arriba hacia abajo… era increíble, sentía como me llegaba al fondo, y sentía sus testículos estrellándose contra mi, fue tanta la emoción que me la estaba jalando y me vine, dejando todo mi semen sobre la colcha.

Roberto se volvió a poner de rodillas detrás de mi, y volvió a tomarme de la cintura, para jalarme, pero le dije que me dejara moverme a mi, el se quedo quieto y yo comencé a moverme hacia delante y hacia atrás, sintiendo como la verga de Roberto me penetraba en cada vaivén, me gustaba hacer eso, por que aunque me tenia en 4 y a su merced, cuando yo me movía, controlaba las sensaciones, la profundidad y la fuerza con la que me clavaba la pija de mi amigo.

Entonces Roberto me dijo que se quería poner bien de pie, los dos bajamos de la cama y yo puse mis manos sobre el colchón mientras Roberto me cogía desde atrás, en un momento me avisó que terminaría y me sacó la verga para quitarse el condón y masturbarse frente a mi cara, le encantaba hacer eso… Roberto se la jalo muy poco tiempo antes de que apuntara su verga a mi boca abierta para llenármela de semen tibio, trague y chupé un poco su verga hinchada del orgasmo que acababa de tener Roberto.

Esa noche Roberto se quedo en mi casa después de haber rescatado una noche que parecía que no seria tan buena.


Espero que les haya gustado este relato, gracias por pasar a leer y por sus comentarios.

2 comentarios - Dos en un día (Gay)

gusti128 +1
Flor de historias tenes con Roberto. Son de esas historias inolvidables 👍 👍 👍 👍 👍 👏 👏 👏 👏
lizzard24
Siempre es un gusto leer tus comentarios!!!!
kramalo
muy caliente tu relato..
lizzard24
Gracias por pasar!!!!