Despues de mucho tiempo de ausencia, he vuelto. Y les traigo la ultima aventura. Espero la disfruten.
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Nos conocimos por chat. Ella es de la ciudad Mendoza y nunca vi una foto suya. Ella tampoco me conocía a mi. Pero igual decidimos arriesgarnos. Cuando estoy llegando, veo una chica apoyada contra la pared, oculta tras sus lentes de sol. Por como estaba vestida supuse que era ella. Me paro delante suyo.
-Hola Cari
-Hola- me responde tímidamente.
Nos damos un beso en la mejilla y comenzamos a caminar. Ella es casada y aunque su marido se quedo en Mendoza, conoce mucha gente en Buenos Aires, por lo que decidimos que lo mas prudente seria ir a mi departamento.
Al cabo de unos minutos entramos y nos quedamos mirándonos. Tomamos cada uno de esos breves segundos para apreciarnos. Muchas veces habíamos tenido charlas calientes, hemos fantaseado con estar juntos, pero esta es la primera vez que nos vemos. Como si nuestros cuerpos no quisieran perder el tiempo, ambos sentimos el impulso y nos entregamos a nuestros mas bajos instintos. Nos unimos en un abrazo al mismo tiempo que nuestras bocas se fusionaban. Su cuerpo era delicioso. Podia sentir su figura a través de la ropa y eso me excitaba mucho. Intento ir a cerrar las cortinas para que no nos vean desde otros departamentos pero ella me lo impide.
-No me importa que nos vean. Te deseo ya
Sus palabras desataron mis deseos mas calientes. La tomo entre mis brazos y la llevo contra la pared. Nuestras lenguas juegan intensamente mientras mis manos frotan todo su cuerpo e intentan meterse bajo su ropa. Ella hace lo mismo con sus manos. En pocos segundos ambos quedamos completamente desnudos. Sus enormes pechos están coronados por unos pezones muy firmes. Sin dudarlo acerco mi boca y comienzo a besarlos, lamerlos y morderlos. Juego con sus tetas, acariciándolas. Se siente muy bien sus pezones en mi boca, pero entonces ella me separa de un empujon. Agarra mi verga, ya completamente erecta, y comienza a acariciarla. Entonces ella se agacha delante mio y comienza a besarme. Siento su labios posarse sobre la punta de mi pene, dejando su boca ligeramente mojada con mi liquido pre seminal. Se saborea. Saca la lengua y la pasa sobre la punta, mientras comienza a masturbarme. Entonces comienza a meterla en su boca, llegando mas y mas profundo, hasta que toda queda dentro. Acaricia mis testículos. Siento su lengua jugando con mi pene al tiempo que mi verga sale y entra de su boca. Entonces veo por la ventana del balcón que desde el departamento de enfrente nos miran. Una chica con la mirada fija en nosotros y su mano dentro de su pantalón. Se masturba ante la imagen que le ofrecemos. Tomo a mi pareja por la cabeza y comienzo a moverme, penetrándola por la boca. Ella, arrodillada delante mio y con las piernas ligeramente separadas, acerca su mano a su conchita. Empieza a masturbarse. Agarro sus tetas con una mano y pellizco sus pezones, sin dejar de cogerla por la boca. Tan calientes estábamos el uno con el otro que no podemos resistir mucho mas. Ella es la primera en llegar. Sus gemidos se ahogan por mis embestidas en su boca. Miro hacia abajo y veo como ella fija sus ojos en mi. Mas abajo, mi verga entra y sale de su boca y, mas abajo aun, su mano se mueve rápidamente en su conchita. Veo como su cuerpo se estremece al llegar al orgasmo. Yo tampoco puedo resistirlo mas. Mi verga late al tiempo que chorros de leche llenan su boca. Mi vecina aun nos mira y parece que ella también esta acabando. Miro nuevamente hacia abajo y veo su boca llena de leche. Leche que chorrea por la comisura de sus labios, cayendo sobres sus tetas. Cuando la ultima gota termina de salir de mi verga, siento como se traga la leche que hay en su boca y da una ultima chupada a mi verga, intentando no desperdiciar ni una gota de leche.
Mi compañera se para, me da un beso en los labios y me dice:
-Quiero mas
Entonces mira por la ventana, saluda a la vecina y se pone en el sillón, a 4 patas, separando sus labios, y lista para recibirme dentro suyo.
A pesar de ya haber acabado mi verga esta muy dura. Sin dudarlo me acerco a ella y sin perder tiempo le hundo mi verga hasta el fondo de su concha. Paso mi mano por debajo de su cintura y me acerco a su concha. Mientras la cojo, la estoy masturbando. Ahora sus gemidos no son ahogados por mi verga y puedo escucharla, casi gritando de placer. Llega su segundo orgasmo, puedo sentirlo, sus musculos tensándose, apretando mi verga. Y yo, sin poder evitarlo, vuelvo a acabar. Comienzo a vaciarme dentro de ella. Aunque en menor cantidad que antes, siento como le lleno la concha de leche. En una ultima embestida la dejo mi verga bien adentro, soltándole las ultimas gotas. Ella agarra mi mano, para que deje de tocarla. Me empuja hacia atrás y se incorpora. Me mira a los ojos mientras agarra mi verga con la mano
-Te portaste muy bien. Esta noche mi culito va a estar muy contento de recibirte.
Sus palabras me excitaron mucho, y pase todo el dia excitado, esperando que llegue la noche…
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Nos conocimos por chat. Ella es de la ciudad Mendoza y nunca vi una foto suya. Ella tampoco me conocía a mi. Pero igual decidimos arriesgarnos. Cuando estoy llegando, veo una chica apoyada contra la pared, oculta tras sus lentes de sol. Por como estaba vestida supuse que era ella. Me paro delante suyo.
-Hola Cari
-Hola- me responde tímidamente.
Nos damos un beso en la mejilla y comenzamos a caminar. Ella es casada y aunque su marido se quedo en Mendoza, conoce mucha gente en Buenos Aires, por lo que decidimos que lo mas prudente seria ir a mi departamento.
Al cabo de unos minutos entramos y nos quedamos mirándonos. Tomamos cada uno de esos breves segundos para apreciarnos. Muchas veces habíamos tenido charlas calientes, hemos fantaseado con estar juntos, pero esta es la primera vez que nos vemos. Como si nuestros cuerpos no quisieran perder el tiempo, ambos sentimos el impulso y nos entregamos a nuestros mas bajos instintos. Nos unimos en un abrazo al mismo tiempo que nuestras bocas se fusionaban. Su cuerpo era delicioso. Podia sentir su figura a través de la ropa y eso me excitaba mucho. Intento ir a cerrar las cortinas para que no nos vean desde otros departamentos pero ella me lo impide.
-No me importa que nos vean. Te deseo ya
Sus palabras desataron mis deseos mas calientes. La tomo entre mis brazos y la llevo contra la pared. Nuestras lenguas juegan intensamente mientras mis manos frotan todo su cuerpo e intentan meterse bajo su ropa. Ella hace lo mismo con sus manos. En pocos segundos ambos quedamos completamente desnudos. Sus enormes pechos están coronados por unos pezones muy firmes. Sin dudarlo acerco mi boca y comienzo a besarlos, lamerlos y morderlos. Juego con sus tetas, acariciándolas. Se siente muy bien sus pezones en mi boca, pero entonces ella me separa de un empujon. Agarra mi verga, ya completamente erecta, y comienza a acariciarla. Entonces ella se agacha delante mio y comienza a besarme. Siento su labios posarse sobre la punta de mi pene, dejando su boca ligeramente mojada con mi liquido pre seminal. Se saborea. Saca la lengua y la pasa sobre la punta, mientras comienza a masturbarme. Entonces comienza a meterla en su boca, llegando mas y mas profundo, hasta que toda queda dentro. Acaricia mis testículos. Siento su lengua jugando con mi pene al tiempo que mi verga sale y entra de su boca. Entonces veo por la ventana del balcón que desde el departamento de enfrente nos miran. Una chica con la mirada fija en nosotros y su mano dentro de su pantalón. Se masturba ante la imagen que le ofrecemos. Tomo a mi pareja por la cabeza y comienzo a moverme, penetrándola por la boca. Ella, arrodillada delante mio y con las piernas ligeramente separadas, acerca su mano a su conchita. Empieza a masturbarse. Agarro sus tetas con una mano y pellizco sus pezones, sin dejar de cogerla por la boca. Tan calientes estábamos el uno con el otro que no podemos resistir mucho mas. Ella es la primera en llegar. Sus gemidos se ahogan por mis embestidas en su boca. Miro hacia abajo y veo como ella fija sus ojos en mi. Mas abajo, mi verga entra y sale de su boca y, mas abajo aun, su mano se mueve rápidamente en su conchita. Veo como su cuerpo se estremece al llegar al orgasmo. Yo tampoco puedo resistirlo mas. Mi verga late al tiempo que chorros de leche llenan su boca. Mi vecina aun nos mira y parece que ella también esta acabando. Miro nuevamente hacia abajo y veo su boca llena de leche. Leche que chorrea por la comisura de sus labios, cayendo sobres sus tetas. Cuando la ultima gota termina de salir de mi verga, siento como se traga la leche que hay en su boca y da una ultima chupada a mi verga, intentando no desperdiciar ni una gota de leche.
Mi compañera se para, me da un beso en los labios y me dice:
-Quiero mas
Entonces mira por la ventana, saluda a la vecina y se pone en el sillón, a 4 patas, separando sus labios, y lista para recibirme dentro suyo.
A pesar de ya haber acabado mi verga esta muy dura. Sin dudarlo me acerco a ella y sin perder tiempo le hundo mi verga hasta el fondo de su concha. Paso mi mano por debajo de su cintura y me acerco a su concha. Mientras la cojo, la estoy masturbando. Ahora sus gemidos no son ahogados por mi verga y puedo escucharla, casi gritando de placer. Llega su segundo orgasmo, puedo sentirlo, sus musculos tensándose, apretando mi verga. Y yo, sin poder evitarlo, vuelvo a acabar. Comienzo a vaciarme dentro de ella. Aunque en menor cantidad que antes, siento como le lleno la concha de leche. En una ultima embestida la dejo mi verga bien adentro, soltándole las ultimas gotas. Ella agarra mi mano, para que deje de tocarla. Me empuja hacia atrás y se incorpora. Me mira a los ojos mientras agarra mi verga con la mano
-Te portaste muy bien. Esta noche mi culito va a estar muy contento de recibirte.
Sus palabras me excitaron mucho, y pase todo el dia excitado, esperando que llegue la noche…
3 comentarios - Con la mendocina