La Intrusa en mi Habitación

Antes de empezar quisiera alclarar que cada relato contiene tanto material real como ficticio.
Al final de cada relato se especificara el tipo de relato y que porcentaje de realidad contiene este.

La Intrusa en mi Habitación



anal



LA INTRUSA EN MI HABITACIÓN
by Mr. Owl


Soy Josep y esta es la historia
Esto paso hace tiempo en casa de mi madre.

Las vacaciones se aproximaban y como cada año salíamos a algún destino turístico, pero en este año sería la excepción. Ya que los familiares a los que normalmente visitábamos, en su linda y grande casa en la paradisiaca playa de Cancún, vendrían a visitarnos gracias a una tremenda ocurrencia de mi madre. (Gran idea eh! – Sarcasmo Off)

Pero bueno, ellos ya estaban aquí incluyendo a mi prima, Romina de 19 años (Yo tenía la misma edad) Para darles una breve descripción de mi prima, ella es una típica chica linda pero insegura.

Ya que la casa de mi madre no contaba con una habitación para invitados, mi hermana y yo tuvimos que cederles las nuestras. Afortunadamente, para mi hermana, se iba quedar con una amiga (Ja! Eso era lo que creían mis padres) así que a ella no le molestaba que se quedaran, en cambio a mí, me desalojaron de mi habitación para entregársela a mi prima, que por cierto, no nos llevábamos tan bien. Mejor dicho éramos bastante distantes, solo un “hola como has estado” y ya, de eso constaba nuestra charla.

Pues durante esa semana tendría que dormir en el sofá. Durante el día no me molestaba para nada, pues normalmente a esa hora estaba en la casa de mi novia o en algún lugar pasando el tiempo con mi chica. Pero cuando llegaba a casa, mi prima estaba pegada en mi computadora y ese hecho me molestaba pues nunca me pidió permiso para usarla. Me molestaba pero pues eran invitados y en algún momento se tenían que ir.

Ya habían pasado unos días sin ningún contratiempo, hasta el día jueves. Mi madre me pidió de favor, que si podía llevar a Romina a dar una vuelta por la ciudad. No me parecía la mejor de las ideas, pero me vería muy mal al rechazarla. Así que acepté.

Romina tardo casi una hora en alistarse para salir, no creó ser el único al que le haya pasado esto, pero cuando bajó la vi exactamente igual a como estaba, no sé porque se tardan tanto en arreglarse si se ven igual. Bueno pero ese es otro tema.

Salimos (¡Por fin!) y trate de llevarla a los lugares más representativos de la ciudad de México, como: El Palacio de Bellas Artes, El Hemiciclo a Juárez, La Torre Latinoamericana y culminamos nuestro recorrido en Chapultepec, que por cierto estaba demasiado concurrido en esos días. Aunque el tour fue bastante placentero, seguíamos sin tener una buena relación, nuestras charlas no tomaban más de 2 minutos y seguido de eso un incomodo silencio.

Ya en casa, ella se fue directo a mi habitación, al parecer tenía cosas que hacer. Después de ver la televisión casi hasta la medianoche, olvide de mandarle un mensaje a mi novia, pues le prometí hacerlo. Antes de que Romina se metiera a mi alcoba, le pedí que pusiera cargar mi celular, así que este seguía en mi habitación. Me dispuse a ir por él, toqué la puerta en repetidas ocasiones y no respondía, creí que estaba dormida. Así que entre tratando de no hacer ruido para no molestarla.

Cuando entre me lleve una gran sorpresa pues no estaba dormida sino masturbándose al frente de mi computadora. Con los audífonos puestos, totalmente denuda y abierta de piernas, frotando su vagina con gran velocidad, al parecer estaba llegando a su clímax pues la intensidad aumentaba y los gemidos que emitía hicieron que me mi excitación despertara, pues el hecho de tener que reprimir su gemidos para no hacer ruido y despertar a los demás, hacía que sus pequeños lamentos sonaran bastante sexy.

Ya alcanzado su orgasmo, respiró profundamente, recobró el aliento y abrió lentamente sus ojitos. Estaba sorprendida al verme parado en la puerta babeando y con una cara de enfermo sexual. Romina estaba en shock, no sabía qué hacer. Tomé la iniciativa y la besé sin que ella ofreciera ningún tipo de resistencia, al contrario ella me correspondía con un fuerte abrazo. Sinceramente creí que me iba a abofetear o algo por el estilo, pero la calentura se apoderó de mí y afortunadamente ella reaccionó bien a mi acción.

Estábamos revolcándonos en mi cama, para como estaba el panorama con mi prima, nunca pasó por mi mente el estar en esta situación con mi prima. Yo recorría cada centímetro de su cuerpo con mis manos, seguíamos besándonos mientras yo intentaba deshacerme de mi ropa. Algo que me sorprendió de mi primita, eran las ricas tetas que poseía, que debido a la ropa que usaba no eran tan notorias. Debido a la tremenda masturbada que se había dado, su vagina aún estaba muy sensible al contacto, acto que le parecía muy placentero para ella e igual de excitante para mí, aunque un poco divertido pues cada que le tocaba esa linda conchita ella se retorcía de placer.

Le acerque mi pene a su boca, que para mi sorpresa, ella comenzó a chuparlo con gran intensidad y con cierta desesperación. Parecía que ya tenía algo de práctica pues lo manejaba bastante bien. La tomé por la cabeza e inserte mi pene hasta el fondo llegando a su garganta, ella pareció no agradarle pero no me detuve, se sentía tan bien. Por fin la solté y me dispuse a penetrarla. Tomé un condón de mi gaveta y la recosté con el culo levantado, se lo metí intentando llegar al fondo de una vez, pero su conchita estaba bastante apretada y entraba con dificultad, así que le pregunté:




- ¿Eres virgen?-
- No, ya tuve sexo con mi novio, pero si me duele un poco- Contestó






Entonces mi pene entraba lentamente en su vagina, que aunque estaba bastante húmeda, no me permitía cogérmela con facilidad. Yo arremetía con fuerza, su vagina apresaba mi pene fuertemente mientras yo gozaba de esa rica sensación. Sus tetas rebotaban al ritmo de mis arremetidas, las agarre con gran devoción, pues ni mi novia tenía el tamaño y la textura de las ricas tetas de Romina.
Al ver el vaivén de su culito, tomé uno de mis dedos y lo introduje en su ano.

Creí que reaccionaría mal pero ya estando ahí, ¿Por qué no intentar? Romina soltó un gemido que aumentó mi calentura en un 100%. Para mi asombro, a mi dedo no le costó nada de esfuerzo entrar en ese lindo agujero. Ya estando experimentando saqué mi pene de su concha, para encaminarlo a su ano, pues mi novia hasta ese día no me había dejado intentarlo por ahí. Cuando toqué su ano, ella me pidió que no pues dolería bastante, a lo que le respondí:




- No te preocupes, voy a tratar de ser gentil-
- Está bien pero si me duele, me la sacas. ¿ok?- Me dijo
- Si te lo juro- Finalicé





Comencé a introducirlo, como ya había comentado antes, mi pene enraba con más facilidad que en su vagina, ella gemía del dolor y mordía una almohada para no emitir ningún sonido. Entraba y salía con asombrosa facilidad, ella por medio de señas me pedía que la sacara, pero me cegó el placer que sentía. Romina intentaba sacarse mi pene de ella, pero no me podía contener, así que seguí. Ella parecía que iba a explotar por el dolor y el placer que sentía.

De pronto ella contrajo todo su cuerpo y se vino con gran potencia. Sus piernas perdieron fuerza y se derrumbaron en la cama, aún la seguía penetrando pues yo todavía no alcanzaba mi máximo. Yo continuaba penetrándola por ese bello culito y después de unos minutos bombeando a gran velocidad saqué rápidamente mi pene, me quité el condón y me vine en esas ricas nalgas.

Mi prima seguía descansando en mi cama que estaba empapada por sus fluidos, le di un beso en la mejilla, me puse mi ropa y salí de ahí como si nada hubiera pasado.

Al día siguiente ya cuando la calentura de disipó, entró la culpa y el arrepentimiento. Pues me temía que ella estuviera molesta conmigo pues no hice lo que le había prometido. Pero Romina bajo normalmente a desayunar y nos saludo a todos con una alegría intensa. Todos le preguntaron el porqué de su felicidad, pues hasta el día anterior se había mantenido un tanto aburrida y ahora estaba radiante. Ella se limitó a contestar que gracias a mí por lo de ayer.

Yo obviamente sabía a cual se refería pero todos los demás se imaginaban el tour que le di por la ciudad.
Ese mismo día en la noche, no encontraba mi celular, yo estaba seguro que lo había dejado en el sofá, así que le pregunté a mi madre en donde estaba, a lo que respondió que Romina se lo había llevado para conectarlo al cargador.

Así que esa noche tuve que ir otra vez por mi “celular”




FIN










Autor: Mr. Owl
Genero: Filial,Anal,Secreto
Porcentaje de Realismo: 50% (Paso hace ya unos años, pero es un gran recuerdo)


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Pues espero y sea de su agrado.

Opinen si les gusto o no.

4 comentarios - La Intrusa en mi Habitación

doors09 +1
Excelente! 🙂
MorpheoM
jejeje esta muy bueno