Manchando el vestido de mi chica

Hemos salido juntos, por fin. Esperé tanto este momento, Juliana. Su ex marido se ha ido no sé donde. Sus dos críos quedaron con una chica divina. Ella es divina. Pero no se lo digo. Charlamos en el interior de su auto hasta quedarnos secos de temas. Y nos gusta. Lo disfrutamos como si fueramos dos chicos intercambiando naipes de superhéroes. Me gusta su aroma. Me puede. Me mata. Eso si se lo digo. Su vestido es una bella pieza de colección. Estoy seguro que debajo lleva unas típicas bombachas blancas sin gracia. Seguimos charlando y escuchamos “Everything but the girl”. Le digo que sus manos son grandes. Hermosas. Ella las abre como una flor. Pongo la mía, más grande aun sobre la suya y sin pensarlo nuestros dedos se entrelazan. Ella viene sobre mi y apenas si nos damos un beso pequeño. Me abraza fuerte. Siento su respiración agitada. Me sorprende lo caliente que estoy. Le beso la frente pero lo que quiero es hundirme en su concha. Mi pija está dura como si tuviera un hueso ahí dentro. No me reprimo. Te amo, le digo. Te amo, no respondas nada. Le meto la mano debajo del vestido. Corro su bombacha y la subo arriba mío. No sé en qué momento me he bajado el cierre. Se la meto. Tan fácil. Tan simple. Tan preciso. Su concha mojada. Ella empieza a moverse sin prisa, pero empuja. Fuerte. Se ubica. Se acomoda. Gime. Y me mira con tristeza ¿qué me haces si yo no te pedí nada? Parece decirme, pero sigue. Yo también, te amo, y seguimos así. Creo que una hora. Mis manos en su culo. Después mi dedo en su hoyo. Y ella pega grititos que se me antojan tontos. Cada vez más fuerte. Como me calientas, grito, y sin poder controlarme me pongo a llorar y acabo. Se la saco antes, le mancho todo el vestido, eyaculo leche, yogurt, salsa blanca, libros de cómo coger bien a una mina como esta. Le estiro la bombacha. No la rompas, me ruega. Me pasa el dedo por la punta de mi pija, la limpia y se la vuelve a meter. Se me para lo justo y necesario y le damos. Seguimos un rato más. Soy perfecto. Un dios. No duramos mucho. Ella gime y empuja con increíble potencia, me duele, loca. No le importa un carajo. Siento sus uñas clavándose en mis hombros. Me muerde. Me hiere y me gusta demasiado. Acabo pero esta vez la dejo adentro. Creo que no sale una gota pero nunca sabes. Te amo, me dice ella y nos quedamos así. Como dormidos. Como despiertos, escuchando “Driving”.

2 comentarios - Manchando el vestido de mi chica

mujerplay
Muy bueno, realmente muy bueno. Acelerado y sin puntos aparte, sin cortes y sin pausas. Felicitaciones. 😉
monica_lov
muy excitante realmente muy bueno te felicito amigo!!!!! 😀 😀 😉