Tras muchas semanas no pare de masturbarme pensando en la tremenda verga de mi hijo discapacitado, me hacía sentir mal sentir esta lujuria.

Por lo pensé y cedí a mi tentación, venía un fin de semana larga y pensaba de pasar la barrera de madre e hijo, ya que yo necesitaba su verga y mi hijo necesitaba calmarse y no se lo iba entregar a prostitutas, el era mi vida, es mi vida y tendremos una vida juntos.
El viernes hasta la tarde fue todo normal, le cocine, vimos dibujos animados, le dibuje y pintamos juntos. El piensa como un niño. Pero después lo metí a bañar. Automáticamente parece que mi bebé se convierte en hombre, se le para la verga de 25 cm y se pone lujurioso y bastante agresivo.

Yo todavía me impresionó de ver si gran tamaño, nunca me entra en la boca. Me hace adicta a su sabor.
Así que se la mame hasta que mi bebé se vino y lo deje limpio a su verga y cuepro.

Después de la ducha lo vesti pero yo nunca, me quedé desnuda para activarle su cuerpo para la noche.

Después le cocine mientras me masturbaba, dejaba que mi olor le llegara y le ponía squirt mío a su comida.
Después de la cena lo acosté pero en mi cama.
Ahí a el se le puso duro y comencé a chupársela.

Pero yo ya no me resistía así que deje de hacerlo y me puse sobre el.
Deje que me masajeara la vagina con su verga y me vine con solo esa sensación, aún así empezó a meterla, era tan grande que solo entraba su cabeza hasta que en un ataque de impulso el dió una embestida y la metió entera.

Yo grite de dolor, el dolor paso a placer y el placer a locura, ya no era conciente de nada, hace muchos años que no tenía sexo y no solo eso sino que solo tuve con su padre y era muy diferente a este monstruo.

Yo empecé a cabalgar en el y no podía parar era puro placer, su verga me estaba haciendo adicta.

Es ahí que sentí como mi bebote se venía en mi, sentí su calor y como su verga se hincho, creo que creció unos dos o tres centímetros, hizo que me viniera.
Después de eso le limpié su tremenda verga y dormimos juntos.

A la mañana siguiente lo desperté y ya estaba duro, deje que me chupara las tetas y que se viniera en mi mano, era como un bebé, mi bebé, mi hijo, mi hombre.

Mi gordito no permitía que hiciera nada, estuvo lujurioso todo el día, me ponía a limpiar y se le ponía dura y tenía que dejar que me cogiera.

Después cocinaba y se le ponía duro por lo que tenía que chupársela

Cogíamos en el sillón.

En la ducha.

Y en mi habitación

Mínimo se vino 15 veces en mi en esos días.

Quedé sumamente enlecahda y llenada por mi hijo esa semana

Por lo pensé y cedí a mi tentación, venía un fin de semana larga y pensaba de pasar la barrera de madre e hijo, ya que yo necesitaba su verga y mi hijo necesitaba calmarse y no se lo iba entregar a prostitutas, el era mi vida, es mi vida y tendremos una vida juntos.
El viernes hasta la tarde fue todo normal, le cocine, vimos dibujos animados, le dibuje y pintamos juntos. El piensa como un niño. Pero después lo metí a bañar. Automáticamente parece que mi bebé se convierte en hombre, se le para la verga de 25 cm y se pone lujurioso y bastante agresivo.

Yo todavía me impresionó de ver si gran tamaño, nunca me entra en la boca. Me hace adicta a su sabor.
Así que se la mame hasta que mi bebé se vino y lo deje limpio a su verga y cuepro.

Después de la ducha lo vesti pero yo nunca, me quedé desnuda para activarle su cuerpo para la noche.

Después le cocine mientras me masturbaba, dejaba que mi olor le llegara y le ponía squirt mío a su comida.
Después de la cena lo acosté pero en mi cama.
Ahí a el se le puso duro y comencé a chupársela.

Pero yo ya no me resistía así que deje de hacerlo y me puse sobre el.
Deje que me masajeara la vagina con su verga y me vine con solo esa sensación, aún así empezó a meterla, era tan grande que solo entraba su cabeza hasta que en un ataque de impulso el dió una embestida y la metió entera.

Yo grite de dolor, el dolor paso a placer y el placer a locura, ya no era conciente de nada, hace muchos años que no tenía sexo y no solo eso sino que solo tuve con su padre y era muy diferente a este monstruo.

Yo empecé a cabalgar en el y no podía parar era puro placer, su verga me estaba haciendo adicta.

Es ahí que sentí como mi bebote se venía en mi, sentí su calor y como su verga se hincho, creo que creció unos dos o tres centímetros, hizo que me viniera.
Después de eso le limpié su tremenda verga y dormimos juntos.

A la mañana siguiente lo desperté y ya estaba duro, deje que me chupara las tetas y que se viniera en mi mano, era como un bebé, mi bebé, mi hijo, mi hombre.

Mi gordito no permitía que hiciera nada, estuvo lujurioso todo el día, me ponía a limpiar y se le ponía dura y tenía que dejar que me cogiera.

Después cocinaba y se le ponía duro por lo que tenía que chupársela

Cogíamos en el sillón.

En la ducha.

Y en mi habitación

Mínimo se vino 15 veces en mi en esos días.

Quedé sumamente enlecahda y llenada por mi hijo esa semana
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