Los que me siguen hace rato habrán leído mi última anécdota donde conté como chupe una pija por primera vez y todo lo que sentí al respecto.
El era un amigo muy cercano, y me daba miedo que nuestra relación se ponga rara, pero en gran medida todo siguió igual. La mayor diferencia es que ahora, cada vez que venía a casa (más seguido que antes) siempre se la chupaba. No importaba que hablemos o para que haya venido, siempre terminaba yo con su pija en mi boca, ya sea en la cama, en el baño, o en el sillón en frente de la tele, siempre todo terminaba con su lechita calentita en mi garganta.
A mí me encantaba toda la situación, su pija peluda y bien de macho, sus huevos peludos en mi boca, su mano en la parte de atrás de mi cabeza guiandome, todo me calentaba mucho, todo en contraste con mi pitito chiquito, mis huevitos que casi ni se ven y toda lampiña y depilada.
La viernes de la semana pasada fue diferente, supuestamente el venía a arreglar algo de mi compu, que por algún motivo mis juegos no estaban funcionando bien. Se sentó a arreglarla y yo, suponiendo que era lo que el quería, le arrodille para chupársela. Me dijo que hoy no quería eso, no entendí bien y pensé que no quería hacer nada, por ahí ya no le atraía más, me preocupe. Pero el se levantó de la silla y me empezó a desvestir, quedé desnuda en la parte superior y una tanguita abajo, me empezó a besar y me agarraba la cola con fuerza, me apoyo suavemente en la cama y me empezó a besar el cuello, después mis tetitas, después la pancita y después termino dándome besitos en mi pitito y en mis huevitos.
No era la chupada de pija fuerte y morbosa que le hago yo para sacarle la leche, eran besos amorosos y caricias tiernas, mientras lo hacía me hizo chuparle un dedo y luego me empezó a acariciar la cola con ese dedo, de a poco lo fue metiendo para adentro mientras seguía dándome besos, yo estaba loca de placer.
Luego de un rato de estar así, saco el dedo y me empezó a chupar la cola, fue una sensación hermosa que me hizo pensar que me encantaría estar horas sentada en su cara. Hasta que en un momento me dijo "estás lista" y saco del bolsillo de su pantalón un lubricante chiquito.
Me puso en cuatro, sentí el frío del lubricante en la cola y ya sabía que era lo que iba a pasar, hace rato quería que pase. Sentí como presiono muy fuerte su pija para que pueda empezar a entrar, al ser mi primera vez estaba muy cerrada. Cuando finalmente entro casi me muero de placer, estaba gimiendo y sacaba la lengua como una perra, los ojos se me iban para atrás. El lo único que me dijo fue "solo entro la punta" y yo no lo podía creer, pero lo confirme cuando lentamente siguió entrando, me dolía pero me gustaba, entro y entro hasta que chocamos y me dijo, ya está, está toda adentro.
Me acuerdo y me dan ganas de que me coja otra vez. Se empezó a mover de a poquito y lentamente fue yendo más rápido hasta que estábamos en una velocidad considerable y el ruido era fuerte, en casa no había nadie más por suerte, vivo con mi familia.
Me detonó muy rico en cuatro hasta que me dijo que me quería ver de frente, mi cara, no lo espalda, y sin sacar la pija de mi cola me hizo rotarme en la cama hasta que quedamos uno arriba del otro acostados pero enfrentados, yo con mis patitas a su hombro.
El bajo una mano y la llevo a mi pijita, sigui cogiendome mientras me pajeaba y me decía que le encantaba la carita de puta que ponía, que nunca se había imaginado que íbamos a terminar así.
En el medio de todo me asusté porque me acordé que nunca se puso forro, pero ya era muy tarde para cualquier cosa, ya me estaba cogiendo así que me guarde el comentario y disfrute.
Empezó a temblar y sentí como su leche calentita entraba a mi cuerpo, al mismo tiempo yo largaba la mía en mi pancita. Fue mucha la que largo el y cuando terminó siguio adentro mío y se acercó a comerme la boca.
Cuando la saco, se fue a limpiar y volvió a acostarse conmigo, que todavía estaba sucia con mi leche en mi pancita, me la limpio con la lengua y nos pegamos una siesta de varias horas.
Quedamos en vernos de nuevo mañana, me encantó todo lo que hicimos y quiero que se repita ❤️
El era un amigo muy cercano, y me daba miedo que nuestra relación se ponga rara, pero en gran medida todo siguió igual. La mayor diferencia es que ahora, cada vez que venía a casa (más seguido que antes) siempre se la chupaba. No importaba que hablemos o para que haya venido, siempre terminaba yo con su pija en mi boca, ya sea en la cama, en el baño, o en el sillón en frente de la tele, siempre todo terminaba con su lechita calentita en mi garganta.
A mí me encantaba toda la situación, su pija peluda y bien de macho, sus huevos peludos en mi boca, su mano en la parte de atrás de mi cabeza guiandome, todo me calentaba mucho, todo en contraste con mi pitito chiquito, mis huevitos que casi ni se ven y toda lampiña y depilada.
La viernes de la semana pasada fue diferente, supuestamente el venía a arreglar algo de mi compu, que por algún motivo mis juegos no estaban funcionando bien. Se sentó a arreglarla y yo, suponiendo que era lo que el quería, le arrodille para chupársela. Me dijo que hoy no quería eso, no entendí bien y pensé que no quería hacer nada, por ahí ya no le atraía más, me preocupe. Pero el se levantó de la silla y me empezó a desvestir, quedé desnuda en la parte superior y una tanguita abajo, me empezó a besar y me agarraba la cola con fuerza, me apoyo suavemente en la cama y me empezó a besar el cuello, después mis tetitas, después la pancita y después termino dándome besitos en mi pitito y en mis huevitos.
No era la chupada de pija fuerte y morbosa que le hago yo para sacarle la leche, eran besos amorosos y caricias tiernas, mientras lo hacía me hizo chuparle un dedo y luego me empezó a acariciar la cola con ese dedo, de a poco lo fue metiendo para adentro mientras seguía dándome besos, yo estaba loca de placer.
Luego de un rato de estar así, saco el dedo y me empezó a chupar la cola, fue una sensación hermosa que me hizo pensar que me encantaría estar horas sentada en su cara. Hasta que en un momento me dijo "estás lista" y saco del bolsillo de su pantalón un lubricante chiquito.
Me puso en cuatro, sentí el frío del lubricante en la cola y ya sabía que era lo que iba a pasar, hace rato quería que pase. Sentí como presiono muy fuerte su pija para que pueda empezar a entrar, al ser mi primera vez estaba muy cerrada. Cuando finalmente entro casi me muero de placer, estaba gimiendo y sacaba la lengua como una perra, los ojos se me iban para atrás. El lo único que me dijo fue "solo entro la punta" y yo no lo podía creer, pero lo confirme cuando lentamente siguió entrando, me dolía pero me gustaba, entro y entro hasta que chocamos y me dijo, ya está, está toda adentro.
Me acuerdo y me dan ganas de que me coja otra vez. Se empezó a mover de a poquito y lentamente fue yendo más rápido hasta que estábamos en una velocidad considerable y el ruido era fuerte, en casa no había nadie más por suerte, vivo con mi familia.
Me detonó muy rico en cuatro hasta que me dijo que me quería ver de frente, mi cara, no lo espalda, y sin sacar la pija de mi cola me hizo rotarme en la cama hasta que quedamos uno arriba del otro acostados pero enfrentados, yo con mis patitas a su hombro.
El bajo una mano y la llevo a mi pijita, sigui cogiendome mientras me pajeaba y me decía que le encantaba la carita de puta que ponía, que nunca se había imaginado que íbamos a terminar así.
En el medio de todo me asusté porque me acordé que nunca se puso forro, pero ya era muy tarde para cualquier cosa, ya me estaba cogiendo así que me guarde el comentario y disfrute.
Empezó a temblar y sentí como su leche calentita entraba a mi cuerpo, al mismo tiempo yo largaba la mía en mi pancita. Fue mucha la que largo el y cuando terminó siguio adentro mío y se acercó a comerme la boca.
Cuando la saco, se fue a limpiar y volvió a acostarse conmigo, que todavía estaba sucia con mi leche en mi pancita, me la limpio con la lengua y nos pegamos una siesta de varias horas.
Quedamos en vernos de nuevo mañana, me encantó todo lo que hicimos y quiero que se repita ❤️
0 comentarios - Mi amigo me saco la virginidad (femboy)