
Me hice un poco del rogar, pero ya me había convencido, nos fuimos a mi recámara, en cuanto entramos, él, sin pensarlo, abrió el botón de su pantalón, bajo su cierre, metió su mano dentro de su ropa interior, se sacó su enorme miembro y se empezó a masturbar frente a mí. Él, al mirar que yo sólo me le quedé viendo, me presionó para que me quitara la ropa. Yo, con algo de pena, me quité el calzado, el pantalón y la ropa interior, pero me dejé la playera y los calcetines. Yo no tenía mucha experiencia, me habían cogido otras cuantas veces, pero no alguien tan enorme. Yo, estaba lleno de miedo y de deseo, yo me acaricié las nalgas con mis uñas estimulando mi culo, mientras él se acababa de desnudar. Acuéstese boca arriba me ordenó, yo no sabía que esperar exactamente, pero así lo hice porque quería que lo que iba a pasar, pasara pronto. Ya me encontraba yo acostado boca arriba, entonces, se acercó a mí con un enorme deseo, él iba apretando mis piernas mientras su boca se acercaba a mi miembro y fue entonces cuando sentí la delicia de la humedad de su boca, empezar a chupar mi miembro. Yo, por instinto, le acaricie el cabello mientras su cabeza bajaba y subia al chupármela. Luego de un rato, se detuvo y sin decir palabra, se hincó arriba de mí y agarrando mi miembro, se acomodó para metérselo en el culo. Yo estaba, más que contento, él, con cada pequeño brinco, me hacía sentir delicioso. Yo veía su cara de placer y de igual manera me he de haber visto yo. Después de un rato de sentones y meneos de su culo sobre mi miembro, no resistí y sentí como mi semen se derramó dentro de su culo. Yo quedé agotado y complacido. Pero, esto aún no había terminado. Voltéese, me ordenó de nuevo y así lo hice. Sentí sus manos abrir mis nalgas y sentí su legua pasar por mi culo, luego un escupitajo cayó sobre él, después me acarició mi culo ensalivado con sus enormes dedos y me empezó a meter el de enmedio. Ya no pudo más y paró de hacer lo de los dedos, y se acostó sobre mí, al tiempo que acariciaba con su miembro mi culo y ¡ZAS! hasta adentro... Me dolió y grité, pero estaba sometido y él ya no iba a parar. Cada que me la metía, yo lanzaba un gemido ¡ZAS! ¡MHH! ¡ZAS! ¡MHH! ¡ZAS! ¡MHH! ¡ZAS! ¡MHH! y de ahí no se movió, hasta que sus movimientos se volvieron rápidos y violentos, lanzó unos gemidos en mi oído, sentí mi culo más resbaloso por el semen derramado en mi culo y se detuvo sin moverse de encima de mí. Así nos quedamos un rato...
0 comentarios - Un enorme miembro dentro de mi culo