Les cuento de Armando, parte 2

Hola, les traigo un relato reciente, espero les guste, es sobre Armando, mi nuevo ... amigo hasta antes de esto.


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Apenas entramos por la puerta sacaste tu pene y me lo pegaste a las piernas, en cuanto me di cuenta lo tome entre mis manos y empece a toquetearlo mientras te besaba y tus manos ya estaban en mis nalgas, se puso duro y yo caliente. Nos seguimos besando y yo te acariciaba de una forma tierna, Suave y con ganas de tenerte dentro de mi.


Me agache frente a ti, tome tu pene y empece a besarlo solo de la punta, se ponia mas duro y me encantaba, se sentia duro y caliente… Luego lo meti un poco a mi boca para jugar con tu glande, pasaba mi lengua alrededor y luego lo metía un poco mas a mi boca, lo sacaba y lo voalvia a meter. Tu me veías como te lo estaba chupando pero no me importó, creo que hasta me gusto que me vieras.


Apenas lo sacaba de mi boca y luego luego lo volvía meter, me encanta tu pene todo duro, te lo chuparia por siempre. Te seguí chupando por un buen rato y luego me pediste que me levantara. 


Me condujiste a la sala y ahi te sentaste y me iba a sentar junto a ti, pero me tomaste de las caderas y me volteaste, entonces empece a moverme lentamente mientras me manoseabas por todas partes, me metias la mano por debajo de la falda en mis nalguitas y luego recorrías mis piernas.


De pronto me alzabas la falda y me dabas besos en mis nalgas, me pasabas la lengua, y yo me volvia loca. No pude aguantar mas y me voltee, me arrodille frente a ti, tome tu pene y te lo estaba chupando, estaba vuelta loca de excitación. Lo metía hasta donde ya no podía mas, lo sacaba y luego me lo volvía a meter, mi saliva lubricaba tu hermoso pene y sentir cada vena y me encantaba.


Luego te levantaste y te pegaste a la pared así que yo te seguí, me tomaste de las nalgas y me besaste en la boca, me estabas bajando la tanga, luego me volteaste y me pegaste tu pene a mis nalgas, en ese momento senti palpitar mas rápido mi corazón, sentía unas ansias por tenerte dentro. Me pusiste un poco de lubricante y empezaste a penetrarme.


Me penetraste y yo suspiré, fue una sensacion espectacular, sentí tu cuerpo contra el mío y tu hacías presión tomándome de las caderas hacia ti, yo no podía hacer mucho porque me tenias contra la pared, me entro todo y termine de suspirar, era muy rico tener tu pene dentro de mi, caliente y palpitando dentro de mis nalguitas, apenas me liberabas cuando ya me ensartabas otra vez todo tu pene, así me tuviste no se cuanto tiempo porque me perdía en lo rico que me estaba haciendo, luego me aceraste al sillón, te sentaste y yo me abri de piernas para sentarme en tu pene, me apretujabas las nalgas, y empece a moverme poco a poco, pero rápidamente empece a moverme mas y mas fuerte, todas esas sensaciones me ponían loca, y gemía de lo rico que estaba sintiendo. Me lo metas y me lo metas, y me lo volvías a meter, yo estaba gimiendo de placer.


Tu movimientos empezaron a ser un poco mas fuertes y yo seguía gimiendo, no parabas tus movimientos con nada y me respirabas en la nuca, lo que me calentaba aun mas. Empece a gemir y a decirte lo mucho que me estaba gustando la cogida que me estabas dando. De 
- Armando … Armando …
- que!. Contestaste con tu respiración agitada.
- Me encanta esta gustando mucho la cogida que me estas dando …
- si.
- Ayyy… Armando, mas por favor.
- Te gusta?
- Si Armando, que rico me haces… Hazme mas …
- …
- Hazme tuya, si …?
- Te voy a hacer mi putita
-  Si? 
- Si, vas a ser mi putita ahora.
- De verdad quieres que sea tuya?
- Si, te voy a hacer toda mía … te voy a reventar la cola y me voy a venir dentro de ti, hasta adentro y así ya vas a ser mía.
- Si, si … Vente dentro de mi, quiero ser tuya…ahhh


Seguiste tus movimientos y yo sentía tanto placer que no tuve idea de cuanto tiempo duro, solo se que estuvimos así mucho rato,  mis piernas ya me estaban temblando y no podía mas, pero me seguía moviendo porque me encantaba la sensación de tenerte dentro de mi, de como me recorrías por dentro y me llenabas la cola con tu pene … 


Me apretaste de las caderas y me empezaste a mover mas rápido.


- Ya me vengo Ani …
- Si Armando, dentro de mi …
- Si.
- Ya hazme tuya, ya quiero ser tuya 
- Ya …
- Quiero tener tu semen dentro de mi, lléname de semen.


Entonces hiciste mas rápido tus movimientos y sentí una sensación muy caliente dentro de mi, te estabas viniendo dentro de mi. Tu semen caliente me estaba llenando la cola y eso me encanto, me encanto que hayas terminado dentro. Poco a poco hiciste mas lentos tus movimientos y te recuperabas de lo agitado que estabas. Aun tenia dentro de mi tu pene con mucho semen, me lo sacaste lentamente y me dijiste que no dejara que se saliera tu flechita, entonces apreté mi colita , lo que pude por que ya me la habías hecho grande. Trate de que no se me saliera y me dijiste que ahora ya era tuya, solo tuya. Me voltee y te di un beso, me sentí