Ruth, Una Mujer sin Tabúes

Ella es Ruth, la chica joven que antes de que un alienígena le transmitiera su conocimiento, era una solterona sumisa a su padre y su fanatismo religioso evangélico, una chica caucásica linda de 36 años que su ojo malo le opacaba la belleza de su rostro, delgada, un poco alta para su raza, alta para las demás castas, sus 1.65 metros hacían que casi todo le quedara pequeño, para una chica de su altura tenía que pasar un poco de trabajo para encontrar algo de su talla y algo aprobado por su santurrón padre, pero ahora no era así, habían pasado dos años desde que descubrió toda la verdad y fue iluminada con el vasto conocimiento del divertido alien.

Su nerd marido no le tomaba tanta importancia, pero había logrado al menos hacerle dos hijos, un niño y una niña, habían logrado saciar sus fantasías en común, y tal parece que las de su marido ya no se concentraban en ella, ya que como muchos hombres, el se había cansado de ella, y casi la tenía abandonada sexualmente, que claro, nunca fue tan viril, ni siquiera cuando el era soltero, ella por el contrario, si había logrado estar embarazada por segunda vez, pero eso no le había quitado las ganas de experimentar al menos cada semana el sexo a como ella le gustaba, o al menos, a como lo tenía con su fanático marido, se había librado de su fanático padre y ahora estaba en manos de otro fanático, al menos este era fanático de la ciencia ficción, pero lo malo era que le atraían mas las chicas del anime, de los cómics y de las novelas épicas fantásticas, y ella con tres meses de embarazo, ya no podía disfrazarse de alguna de ellas y no podía asistir a las convenciones y demás eventos que al menos tenían lugar cada 3 meses. En esas convenciones ella aprovechaba para disfrazarse de cualquier personaje de fantasía que implicara casi no portar ropa, no sin antes modelarle el outfit o cosplay a su marido, que se la cogía levemente, y no aguantaba ni dos minutos con ella vestida así, personajes como Mai Shiranui de The King Of Fighters, de la Chica Invisible de Los Increibles, de La Mujer Invisible de Los Cuatro Fantasticos, Emma Frost de X-Men, Tsunade de Naruto, 18 de Dragon Ball Z, Misa Amane de Death Note y por supuesto, Harley Quinn de DC Comics.

Sacaba buena pasta de las donaciones que los nerds pervertidos le daban, incluso de eso estaba ahorrando para ponerse más pecho del que tenía, ya que si bien, sus peras que le habían resultado de amamantar a su primer hijo eran unas tetas decentes, y con el que estaba por llegar le crecerían un poco más, a toronjas, pero ella no quería toronjas, ella quería melones, para proporcionarlos con las anchas caderas que ahora tenía de haber subido diez kg de peso, caderas de comer todo lo que antes para ella era impuro, caderas resultantes de un embarazo anterior, hasta de coger, porque una mujer en su plenitud sexual tiende a verse mejor en todos los sentidos.

Total que, los pervertidos nerds se despachaban con la cuchara grande cada que le pedían fotos subidas de tono, la magreaban, la arrimaban, llegando incluso a pellizcarle las tetas, meterle dedos a través de sus escasas ropas, la hacían ponerse en posiciones sugestivas, todo esto claro sin que su marido se diera cuenta, que si bien se dio cuenta de algo, nunca le llegó a decir nada más que no dejara que la convencieran de ir a follar o hacer mamadas, ya que ella no creía ya en la fidelidad dejaba que la arrimaran y le metieran manos y dedos, y ella también llegó a sobarles el bulto, tampoco creía ya en la monogamia, pero su marido si, el decía que el era como los pingüinos que eligen una pareja para toda la vida, por más que ella le insistía, el no la compartiría con nadie excepto con mujeres bellas, y ya lo había hecho, varias veces, ella disfrutaba las mamadas de ellas, que se pusieran el pito cinturón y le dieran por el culo y el coño, dos y mientras mamar la pequeña polla de su marido, que si, era pequeña, de 10 centímetros, algo gorda, pero corta, y a ella le gustaba que le llegaran al fondo, aunque fuera solo con una pija de plástico, aguantaba hasta 22 cm y más de una pulgada de ancho en sus agujeros, claro más por el conejito que por la puerta trasera, pero tras varias sesiones de estas, ella habría preferido unas pollas de esos calibres, pero de carne y hueso, cosa que su marido le negaba y también porque no le gustaba el sabor a vagina, ella hubiese preferido esos trios y mini gangs con hombres, con su marido o sin su marido presente, ella solo podía imaginar mientras era embestida por vergas de plástico.

Como ella no creía en la fidelidad, trató de serle infiel a su marido, pero tras varios intentos frustrados, se dio por vencida y lo mas que logró fueron esos cachondos tocamientos de los pervertidos nerds. Y su marido creía en la fidelidad, pero a su conveniencia, tan hipócrita como la religión a la que era devota ella antes del alien. Con cuatro meses de embarazo y un bebé en casa, a ella no le quedaba mas que quedarse en casa, ya que a sus 38 años el embarazo era de riesgo, y aún tenía que cuidar a su primer hijo, que aún amamantaba, aunque ya no tanto, a lo único que podía recurrir era a una niñera lesbi, claro que le pagaba, por cuidar a su bebé y por hacerle un buen trabajo en sus agujeros inferiores, aunque estaba algo cansada de las féminas.

Ella quería una nueva verga, trató de buscar a un transexual con una buena polla, larga y gruesa, pero varias cosas la delatarían, principalmente las cámaras que su marido había puesto secretamente, que claro, ella fácilmente se dio cuenta que algo había cambiado en casa, descubriendo que había puesto cámaras hasta en la bodega, si, como se darán cuenta, ella vivía en una casa bien, no en una casa rodante, su primer bebé necesitaba un hogar estable, no ese pequeño camión que ni para follar bien servía, casi vivía con su padre, casi, porque tiempo después de que el alien se fue, regresó unos meses y esta vez le pasó todo el conocimiento a el, y su papá ahora se había vuelto un pervertido y alcohólico putero, que hasta había pescado una enfermedad venérea con sus putas y en poco tiempo se le desarrollo el alcoholismo, con los pretextos de que tanto que había hecho por su religión y ella no había dado mucho por el, se descaró y ahora se estaba yendo a la mierda. Ruth lo culpaba aún por no dejarla ser libre desde joven, pero también lo compadecía porque si, el era un fanático religioso, pero también lo eran sus padres y los padres de ellos, así que le dejaba hacer lo que quería, pero también prefería alejarse de el cuándo andaba el en sus farras, ya que vivir con un borracho no era lo aconsejable para el bebé, en ciertas ocasiones solía tomar el con hombres atractivos, lo que a ella le atraía y con el pretexto de visitarlo iba a su casa y coqueteaba con los ebrios cachondos, e incluso llegó a bailar con ellos, lo hizo unas cuatro veces, y cuando ella creía que ya se había armado algo bueno con alguno de ellos, el la increpó antes de la peda, para que ni se apareciera cerca de el, de su casa y de sus amigos.

Padre: No creas que soy tonto, y no veo cómo te agasajas con ellos, y eso no lo voy a permitir, una cosa es que nos hayamos liberado, y otra es que de plano te descares en mis narices, ya tienes un hijo y un “marido”, así que o te comportas, o le digo a tu nerd marido.

Ruth: Ustedes los hombres son unos hipócritas, ustedes si pueden, pero nosotros no, solo cuando les conviene nos apoyan y buscan nuestro apoyo, son todos iguales.

Se tragó el coraje, se dedicó a detestar mas a su padre, a su marido y al sistema que la tenía atrapada, libre de religión, pero sumida en la monogamia.

Pasaban los meses, y ella extrañaba esos momentos con otros hombres, leves momentos, ya que nunca se había dado al menos una mamada, ella ya tenía 7 meses de embarazo, y sucedió de repente, le avisó su niñera que su padre estaba tieso, frio y pálido en su sillón, con botellas alrededor, que ya no se movía, y que se había ahogado en su vómito, su padre había muerto.

Ella sintió que se moría de tristeza, que se le salía la niña que estaba esperando, porque eso esperaba ahora, una niña, pidió con lágrimas en los ojos que llamaran a su esposo, y así fue, él llegó esa misma noche, consoló a su bella esposa, al día siguiente lo velaron, acudieron muchas personas entre parientes, vecinos y amigos de ellos, también estuvo el alien, claro que él lo más oculto que se podía de las personas. La mayoría de las personas eran habituales en la iglesia, iglesia a la cual ella tenía años que no acudía, y mas de un año que el no acudía, sin embargo aunque pasó sus ultimo meses de borracho y putero, tenía algunas viejas amistades que aunque hipócritamente religiosas, seguían siendo sus amigos, porque llevaban una doble vida. La mayoría de las personas que acudió a su velación y su sepultura, nunca mas se les volvió a ver por su casa, muy pocas le acompañaron en el luto a Ruth, solo los amigos más cercanos, de el y de ella, su marido no la dejó mucho, se iba casi una semana, mas ya no por meses.

Llegó el dia de nacimiento de su hija y el seguía ahí, cumplió un mes su hija y el se fue a viajar por el mundo, dejándola con los niños, discutieron y finalmente ella lo mandó a la mierda, le dijo que si regresaba muchas cosas iban a ser diferentes, que se atuviera a las consecuencias, aun así el se fue, la tomó por loca, esa noche a penas y consumó el sueño, pero cuando lo consumó, soñó que la quinta vez que llegó a visitar a su padre, su padre la dejó tomar, la dejó bailar con sus amigos, se fue a dormir el dejándola con sus amigos, la mayoría se pusieron ebrios, y se fueron a sus casas, se quedó ella con los mas jóvenes, bailando cachondamente con ellos, sobándoles el pito, y siendo sobada por las tetas, el culo y las piernas, al final solo quedaba ella y el mas guapo, o bueno que le gustaba mas a ella, vieron al otro amigo dormido, se voltearon a ver y se besaron, se metieron mano por todas partes, ella lo aventó al sillón, le desabrochó el pantalón y se lo mamó un ratito, una polla muy parecida su dildo rosado, con una cabezota, de una pulgada y de 18 cm, cansada de mamar, extrañamente sabía un poco a plástico su miembro, prefirió tenerlo en su coñazo, se acostó ella boca arriba, abrió las piernas, lo jaló de la pija, extrañamente no había fuerza o peso en el, aun así se lo llevó a su coño, no aguantó ni una metida ella con esa polla de carne y hueso en su coño, gritó tan fuerte de placer, se llevó la mano a su chochito tomó la polla y se despertó, era la polla que ella usaba como dildo, y lo que la despertó fue su niña, que se despertó por los gemidos de ella.

Volvió a dormir a la beba, y esta vez ella también quedó completamente dormida, ya no hubo sueños, pero al otro día ella se puso a pensar y reflexionar, necesito a alguien que me cuide el jardín y las cosas de la casa, y también necesito un amante, mulato, pitudo y fuerte, como Shakur, el chico con el que soñé ayer, necesito hacer realidad mi sueño.

Continuará...

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