Se llamaba Soledad y la conocí en 4to año del secundario en el Normal 1. Ella iba a otro curso y me la presentó un amigo en común. Yo la venía mirando hace tiempo, y cuando empezamos a hablar la onda surgió de forma inmediata. Escuchábamos la misma música, nos gustaban las mismas pelis y libros, así que no tardamos en hacernos muy amigos.
Ella era preciosa y super seductora, y yo estaba completamente enamorado, el único problema es que ella estaba de novia con un chico más grande. Sin embargo, yo notaba que ella el interés no era solo mío, sino que ella también me buscaba. De a poco nos fuimos haciendo cada vez más amigos, hasta que un día ella me invitó a su casa. Ella puso un disco de Pearl Jam, apagó la luz y me invitó a que nos acostemos uno al lado del otro en su cama. Los temas fueron pasando, los dos boca arriba, comentando la música, traduciendo las letras en inglés, y cada vez nuestros cuerpos estaban más cerca. Hasta que un momento nos tomamos de la mano y nuestros dedos comenzaron a jugar entre sí. Luego ella me dijo si quería que nos abracemos, y ambos nos pusimos de lados y nos abrazamos, y estuvimos así un buen rato, apenas rozando nuestros labios en el cuello del otro, o las mejillas, los labios, hasta que nuestras bocas se cruzaron y empezamos a besarnos como locos. Creo que estuvimos una hora solo chapando. Luego llegó la madre y prendimos la luz e hicimos de cuenta que no pasó nada, y al rato yo volví a mi casa. Mi calzoncillo estaba todo mojado con líquido preseminal, parecía que hubiese acabado.
En nuestro siguiente encuentro yo le confesé que estaba enamorado, y que quería que fuera mi novia, a lo cual ella me respondió que también me amaba, pero también lo quería a su novio, Diego, y que no podía dejarlo. Además me dijo que ella como novia no me convenía, que no era una persona fácil de amar, pero que por nada del mundo quería que dejemos de vernos. Me dijo que yo era especial y quería que fuera parte de su vida.
Yo para aquél entonces era aún virgen, a diferencia de ella que ya había cogido con al menos su novio y el anterior. De todas formas conmigo pareciera que ella también fuese virgen, ya que nunca me presiona ni me apurabapara tener sexo. Nos besábamos por mucho tiempo, a veces jugábamos a que el otro no podía moverse, tenía que hacerse el muerto, y el que estaba vivo lo comía a besos o hacía lo que quería, aunque siempre con ropa. Yo le tocaba las tetas, el culo, la concha, pero siempre por encima de la ropa, ella hacía lo mismo conmigo, pero a veces metía la mano dentro de mi pantalón y me pajeaba un poco, hasta que casi siempre acababa relativamente rápido.
El hecho de que aún ambos viviésemos con nuestros padres (ella sola con su madre) hacía también que no fuera fácil pasar a cosas mayores.
En la escuela solo éramos amigos, pero cuando estábamos solos en nuestras habitaciones, o el hall de su edificio, o el pasillo de mi casa, nos matábamos a besos y caricias.
También parte de que no pasaramos a más tenía que ver con que yo tenía miedo de desnudarme ante ella, ya que si bien tengo muy buen físico, mi pene no cuenta con el mejor tamaño. Apenas 13cm en erección, aunque sí un poco gorda, lo cual, ya que de penes si sabía mucho, en general era debajo del promedio.
3 comentarios - Mi primera novia 1 (Inicio como cornudo)