Mi historia de amor con mi Madre 4

Hola nuevamente

Me gustaría expresar mi forma de ver las cosas con la relación con mi madre en ese entonces, cómo ya relate anteriormente, algunas veces la calentura nos ganaba y terminábamos teniendo intimidad aún con mi padre en casa, aunque al final quedaba con un cargo de conciencia por mi padre, pero normalmente desaparecía cuando escuchaba que se cogía a mi madre, que era solo en ocasiones importantes como cumpleaños, aniversario, día de la madre o del padre, ocasionalmente seguían teniendo relaciones, lo cual en lugar de molestarme me podía algo caliente, no se porque ya que nunca he pensado en compartir a mi madre con alguien más o verla coger con otro hombre a excepción de mi padre.

Pero bueno hoy me gustaría empezar contando algo de contexto que ayudará a comprender una experiencia que después compartiré.

Una noche en la que nos encontrábamos solo en casa, tenía a mi madre en 4 dándole unas estocadas, de repente lentas otras rápidas, ella apretaba la sabana con las manos y me decía.

Madre: así hijo cógeme, que rico pito tienes.

Se escuchaba el plaf plaf plaf del choque de su culo con mi vientre. Algo que me calienta mucho es cuando mi madre me habla sucio y me pide más, creo que me excita mucho que reconozca mi hombría.

Entonces de un momento a otro, mi pene se salió, en ese momento mi madre aprovecho para girarse y poner acostado en la cama, se subió un comenzó a cabalgarme, tomo mis manos y las puso sobre sus nalgas, entendí la señal y le apretaba el culo con ambas manos, sentí como mi madre se empezó a mojar un poco más de lo usual, entonces en eso que pasaba mis manos por su culo pude sentir sus fluidos que escurrían en mi pene y no sé póquer lo hice pero con mi dedo medio tome los fluidos y se los pasaba por el ano, al ver que no había resistencia de mi madre, empecé a lubricar más mi dedo con sus fluidos y se lo empecé a meter poco a poco en el ano, así fue dilatando hasta que le metí casi todo el dedo ella seguía cabalgando cada vez más fuerte, no decía nada solo escuchaba sus gemidos mmmmmm, mmmm mmmmm hasta que terminamos, ella cayó sobre mi, pero yo quería más así que saque mi pene y lo puse sobre la entrada de su ano, ella en ese momento brinco y se aparto.

Madre: oye que te pasa por hay no.

Yo: pero porque no si ya te metí el dedo.

Madre: eso fue solo porque estaba muy excitada, pero nunca lo he hecho por atrás, ni con tu padre.

Yo: ¿entonces eres virgen del culo?

Madre: si a nadie se lo he dado.

Yo: pero yo te di mi primera vez, no crees que es justo que tú también me des tu primera vez (tratando de chantajearla)

Madre: no, me va a doler mucho.

Yo: no, si quieres investigo como hacerlo para que no te duela mucho.

Madre: No, no es tán fácil, mira primero termina la universidad y después hablamos.

Yo: pero todavía me faltan 3 semestres.

Madre: si quieres, esa es la condición además no hay prisa.

Yo: ok, pero es una promesa.

Madre: tráeme el título y hablamos.

Cabe mencionar que eso fue algo que me motivo más para terminar la carrera y ser el primero de mi generación en titularse. Pero antes de seguir con esa experiencia me gustaría contarles otras experiencias, para que puedan entender como fue el crecimiento de la relación con mi madre, que fue algo que se fue dando y que poco a poco íbamos experimentando cosas nuevas y agregando a nuestro repertorio.

Otra experiencia que me gustaría contar fue cuando recibí por primera vez sexo oral o mamada de mi madre.

Un día nos encontrábamos comiendo y no sé porque salió en la conversación, el tema de los hoteles de paso.

Madre: hoy en día están de moda esos hoteles a dónde van las parejitas.

Yo: Pues no se nunca he ido a uno.

Madre: unas amigas me contaron que hasta tienen jacuzzi.

Yo: bueno si quieres podemos ir a unos.

Madre: no estaría mal.

Así que planeamos que otro día, saliendo de la universidad nos encontraríamos en un punto medio mara buscar el más cercanos, y así fue nos encontramos y entramos al primero que encontramos, era un hotel bastante sencillo, la habitación sencilla, mía madre se arregló muy bien ese día llevaba unos jeans que le quedaban muy apretados, haciendo lucir muy bien su lindo culo con una rica tanguita de hilo blanca.






Apenas entramos nos comenzamos a besar tranquilamente por unos minutos, nos desnudamos, ella traía una tanga blanca que se le veía muy rica. En las relaciones con mi madre ocasionalmente me gustaba chuparle la vagina, es día así fue chupe los labios, el clítoris, hasta que mi madre dijo alto.

Hasta el momento no había atrevido a pedirle que me diera sexo oral, creo que me quedé con la idea de la vez que la escuché dándole una mamada a mi padre de que no le gustaba el sexo oral.

Me recosté en la cama con mi pene erecto y sin pedirlo metió de golpe mi pene en su boca, un poco brusca ya que sentó el roce de sus dientes con mi pene.

Yo: espera mamita no tienes que hacerlo.

Madre: que tiene de malo, eres mi hombre y quiero hacerlo. O no te gusta?

Yo: no, claro que si es un sueño cumplido.

Madre: entonces tú tranquilo y disfruta.

Comenzó a meter y sacar mi pene de su boca, aunque algo torpe, ya que rosaba sus dientes con mi pene, lo mordía un poco, en ese momento no lo estaba disfrutando y se me salió un leve “ahí, ahí”.

Madre: que pasa mi vida, te lastime?

Yo: perdón ma, si un poco con tus dientes y duele cuando muerdes.

Madre: hay perdón mi niño, estoy muy excitada discúlpame.

Se metió mi pene en su boca, está vez más despacio y usaba más su lengua.

Madre: así mi amor, así te gusta?

Yo: si mami, así que rico.

Mi madre seguía metiendo mi pene en su boca, lamía la punta, se metía todo el pene hasta la garganta, era una sensación nueva para mí, no encontraba de dónde agarrarme apretaba las sábanas fuertemente.

Yo: aaaa mamita que rico la mamás.

No aguante más le pedí que parará.

Madre: que pasa papito, no te gusta…

Yo: si, claro que me gusta demasiado tanto que no aguanto.

La bese, sabía un poco salado, pero no me importo, enseguida la puse en la cama me coloque entre sus piernas y la cogí con todas mis fuerzas, la mamada previa de mi madre me dejó muy sensible y solo bastaron unas cuantas metidas y terminé en mi madre. Al recuperarme lo hicimos 2 veces más, cuando terminamos le preste a mi madre:

Yo: mami, que rico me la chupaste, nunca te lo había pedido porque pensé que no te gustaba.

Madre: la verdad no es algo que me guste en particular, pero no se me excitaste mucho y me nació hacerlo.

Yo: entonces no se lo haces a mi padre.

Madre: solo lo he hecho un par de veces y solo después de rogarme mucho, pero está vez me nació hacerlo por mi hombre.

Yo: gracias mamita nunca había sentido tan rico.

Así fue como mi madre me dio mi primera mamada, después se volvió algo normal, claro no siempre lo hacia algunas veces ella tomaba la iniciativa otras yo se lo pedía. Pero la idea que me excita mucho era venirme en su boca y que ella se tragara mi semen.

Así que un día faltaba una semana para mí cumpleaños, ella me dijo:

Madre: dime hijo, la próxima semana es tu cumpleaños, hay algo que te gustaría que te regalará, dime y si es algo que pueda darte lo hare.

Yo: de hecho, si hay algo que me gustaría, quisiera que en la noche te pusieras algo sexy y me dirás una mamada hasta venirme en tu boca.

Afortunadamente ese día caería entre semana por lo que podíamos estar solos.

Madre: hay hijo que cosas pides, pero no si pueda, hacerlo hasta que te vengas, pero lo intentaré.
Ese día no fui a la escuela, mi madre me llevo a una tienda de lencería, me pidió escoger un conjunto para ella, elegí con conjuntito de calzoncito con ligero y medias negras, en la tarde hubo un pastel fueron algunos familiares, pero lo que en verdad quería era que se fueran para pagar poder recibir mi regalo. Cuando se fueron levantamos las cosas para dejar limpio.

Madre: bueno hijo, me adelanto, dame unos 10 minutos y subes para que te dé tu regalo.






Estaba algo nervioso cuando subí, toque la puerta pero no me contestó, así que abrí la puerta y entre pero no vi a nadie, entonces siento como alguien me abraza por la espalda, era mi madre que se había escondido detrás de la puerta, llevaba puesto el conjunto que había escogido para ella, el cual se le veía muy sexy, nos abrazamos, nos besamos, me senté en la orilla de la cama, ella se arrodilló entre mis piernas y comenzó a darme una mamada, primero besaba y lamía la puntita, después se la metía toda, con las manos hacia su cabello hacia atrás para que no estorbara y pudiera ver la escena completa de como mi madre chupaba mi pene.

Mi madre seguí chupando, lo sacaba y pasaba si lengua desde mis testículos hasta la punta, hasta que se canso.

Madre: perdón hijo, ya me cansé y no te vienes,

Yo: mami, si te cansas también puedes hacerlo con tu mano.

Tomo mi pene creo su mano, subiendo y bajando, pensé que sería más rápido, pero pese a que estaba sintiendo muy rico dure más de lo espere.

Mi madre volvía me meter mi pene en su boca con la lengua daba vueltas alrededor de la punta, entonces sentí un escalofrío, tomé la cabeza de mi madre con la otra mano suavemente, fue hay cuando me vine en su boca, una pequeña gota escurrió por su boca, pero ella la volvía a meter a su boca con un dedo y trago mi semen.

No esperaba que lo tragara, no se lo había pedido, pero lo hizo.

Yo: ¿te gusta mami, a qué sabe?

Madre: bueno fue mucho, me costó trabajo tragarlo todo, pero no sabe a nada, pensé que tendría un mal sabor.

En se momento mi madre me beso en la boca y aunque me dio un poco de desconfianza al principio.
Yo: bueno es cierto ma, no sabe a nada.

Al final terminamos haciendo el amor muy despacio, pero con mucha pasión.

Gracias por sus cometarios, seguiremos contando mas experiencias.