Mi madre soltera

Este relato es basado en la confesión anónima de un seguidor.
Mi madre soltera

Mi madre es una mujer soltera desde mi nacimiento y yo soy su único hijo, me tuvo a sus 16 años con un tipo que era de plata pero nos abandonó aunque pasaba la manutención mensual. Mamá pudo trabajar a medio tiempo pero aún así, invirtió todo su tiempo en mí. Hace unos 5 años, al yo ya ser lo suficientemente mayor, es decir, con 15 años, ella empezó a poner mas tiempo en si misma, su salud y su estética; empecé a notar el cambio más por miradas ajenas que mías, ya que al ser mi madre siempre le tuve un respeto tremendo y un amor incondicional. La miraban los tipos que iban en los autos, la calle, los ómnibus, incluso un borracho llegó a desubicarse una noche y estuve a nada de romperle la cabeza si ella no se hubiera puesto enfrente; ese día me di cuenta de que mi madre era una mujer muy atractiva solo a la vista.
Es una mujer alta, morocha, de pelo largo y ondulado, con labios gruesos y una mirada que la hace ver un poco arrogante, a pesar de ser una persona muy tierna y servicial.
Sus pechos son chicos al menos en comparación a su culo, grande y bien formado, trabajado por el gimnasio esos últimos años.
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Aparenta muchos menos años de los que tiene, en parte por su dieta y rutina, pero también gracias a la abuela y su genética.
Hace unos años empecé a sentir algunas cosas por ella, verla en shorts cortos o en maya cuando íbamos a la playa o alguna pileta. Antes de darme cuenta le estaba mirando el culo o las piernas, y cuando quería dejar de hacerlo, ya estaba ocultando una erección. Después empecé a fantasear con ella cuando me tocaba, o veía videos de "Madre e hijo" en todas las páginas que visitaba.
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Descargué una aplicación para grabar con el teléfono apagado, para dejarlo en el baño y cuando fuera a bañarse, pedírselo. Acomodé el teléfono en la pileta antes de que ella pasara, cuando pasó me quedé esperando a escuchar la ducha para que ya estuviera desnuda, y así hice, esperé bastante mientras escuchaba cómo balbuceaba; hasta que sentí la ducha y le pedí el teléfono.
Ella me lo dio sacando su mano por la puerta y me le agradecí. Fui corriendo al cuarto, bajé el volumen y me tiré en la cama a ver ese video, sentía como el corazón me latía y mi panza cosquilleaba de la adrenalina que sentía. Mi madre desnuda, tenía esa idea en la cabeza, esa mujer hermosa, que todos deseaban, y desnuda, sumado a todo eso, era mi madre, el morbo podía conmigo.
Puse el video y lo vi entero pero me llevé una gran decepción, lo puse a grabar con la cámara trasera y no se veía mas que nada salvo esa pileta y el suelo. Me puse de mal humor, pero recordé que la escuché balbucear algo y me puse los auriculares, subí el volumen al máximo y me tiré de vuelta a escuchar el video, sin dejar de verlo, como teniendo una esperanza de ver aunque sea un detalle que no había visto. Pero esos pensamientos se vieron interrumpidos por la voz de mi madre; - No, Fer, mi hijo ni siquiera lo conoce a su padre, apenas pueda te aviso, ¿sí? -
Un frío me recorrió la piel y la boca se me resecó, viendo en retrospectiva no entiendo el porqué de mis celos, nunca conocí a mi padre ni me importaba que estuviera con otros tipos, pero eso me hizo sentir de alguna manera celoso. ¿Quién era ese "Fer"? ¿Qué tenía que ver mi padre y qué tenía que avisarle?
Esas preguntas me estuvieron comiendo la cabeza unos días, tratando de dar con una respuesta que yo ya sabía. Empecé a relojear cuando dejaba su celular descuidado, hasta que en la tarde fue a bañarse y lo dejó en el living.
Apagué su Internet para que no llegaran mensajes ni apareciera que estaba en línea, y empecé a revisar sus conversaciones, parecía todo normal, su madre, una compañera del trabajo, y nuestro propio chat, cuando me pasó unas fotos que teníamos de chicos. Bajé un poco más y encontré un tipo negro y cuadrado, con su familia. Lo tenía agendado como "Profe Gym". Entré a la conversación quizás por inercia, era el único hombre que había, y parecía ser normal hasta que escuché un audio, y era el mismo que yo había escuchado.
Las cosas empezaron a encajar, seguí subiendo y él le decía que puede usar un mantenimiento en el gym como excusa e ir a verla, que le gustaba mucho y que estaba deseando verla. Ella parecía divertirse con esa charla y él no le insistía tanto a decirle cosas pajeras, quizás esa charla le gustaba a mi madre. Seguí subiendo y encontré unas fotos que el tipo le pasó y ella a él.
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Ella parecía encantarle su verga y a él el tremendo orto y las tetas de mi madre, que a pesar de ser no ser blanquita, sus pezones eran rosados y no muy grandes, justo cómo a mí me gustaban. 
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Ella le decía que nunca había cogido una pija tan grande, que estaba deseando que yo me fuera para poder invitarlo. A mi madre no le importaba que el tipo tuviera una familia, la verga de ese tipo la volvía loca, ya no le importaba si quedaba como una puta, una fácil o si rompía una familia, quería la pija de ese tipo sí o sí.
Cerré la aplicación y prendí el Internet nuevamente cuando la ducha se detuvo, ese miércoles tuve la idea de avisarle que el viernes me iba a ir a la casa de un amigo y venía cerca del mediodía. Apenas se lo dije se le iluminaron los ojos, nunca había visto que fuera así. A la noche mientras ella dormía entré a su cuarto muy silenciosamente y tomé su teléfono, salí al baño y empecé a ver su conversación con Fer. - Mi hijo se va el viernes a lo de un amigo y viene al otro día, estás libre?? - le preguntó ella, noté que fue apenas unos minutos después de que yo le avisara; estaba desesperada - Obvio mi amor, vos me avisás cuando se va y yo salgo para ahí, mi mujer no sospecha nada - le dijo él - Mejor, no quiero perderme esto - le contestó ella, yo sin poder terminar de creerlo. Empecé a buscar mas fotos en su chat.
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Encontré fotos de mi madre que ni creía que existieran, o quizás sí podía llegar a suponer, pero verla ahora como la puta que era fue golpe de morbo para mí.
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Y también de Fernando, tanto solo como con su mujer.
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Estuve viendo las fotos de mi madre un buen rato e imaginando como sería cogerla y ver ese culo rebotar contra mí hasta que acabé a chorros, en mi pecho, mi panza, y mi mano, incluso escurrió en mis huevos. Nunca había acabado tanto en mi vida como ahora viendo las fotos de mi propia madre; y aunque luego me recorrió un sentimiento de culpa, la excitación pudo conmigo. Guardé su teléfono y fui a acostarme, se pasó todo el día en el baño, supongo aprontándose para la Fernando, no me la imaginaba haciendo todo eso por un hombre como si fuera una quinceañera caliente con su primer novio.
Ese día no pasó mucho más, no quise alertarla.
Sin embargo, al otro día me levanté temprano y puse un poco de ropa en mi mochila mientas ella hacíamos los quehaceres de la casa, ella me miraba disimuladamente como relojeando cuánto me faltaba para irme. Después de estos quehaceres, tendí la cama de modo que la sábana colgara y no se viera lo había debajo y puse a lavar la cortina de la puerta para que no me estuvieras en la lavadora y no me tapara la vista(ya que no tenía una puerta como tal en mi cuarto). Después de eso fui a bañarme y al terminar, agarré mi celular hablando como si estuviera mandando un audio - Avisame y salgo, si no tengo que esperarte y caminás como una vieja - dije en un supuesto audio. 
Esperé hasta que ella fuera a bañarse y le dije que me iba, fui a mi cuarto y dejé la ventana sin trancar, apagué las luces, e hice ruido con la puerta de la entrada y el portón. Entonces, me metí bajo la cama, tuve que levantarla ya que es un somier y puse el celular en silencio.
Unos minutos después escuché la puerta del baño, me dio una descarga de adrenalina tremenda, y la vi salir con un Baby Doll negro, que dejaba sus piernas descubiertas.
Estuvo caminando por toda la habitación unos quince minutos, mientras yo sentía cómo mi verga latía y mis manos temblaban de los nervios hasta que una moto frenó en nuestra vereda y escuché el portón abrirse. Noté como las piernas de mi madre temblaban, quizás de los nervios o emoción, respiraba por la boca de manera fuerte. Aunque cuando la puerta se abrió, todo esos nervios parecieron desvanecerse. Un tipo negro, alto y con manos grandes entró en la casa, tenía una barba de candado y una campera de cuero con coderas, un pantalón vaquero negro y unas botas. Esa mujer que estaba en casa no parecía ser mi madre.
Él se acercó a ella para darle un beso y ella lo empujó contra la puerta haciendo que la misma se cierre con el golpe, se arrodilló con fuerza haciendo que sus rodillas suenen contra el piso y lo miraba a los ojos mientras le desprendía el cierre del pantalón.
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- No me hagas esperar papi, hace mucho quiero tener esa pija conmigo, no seas malo. - Fernando la dejó hacer y cuando mamá estaba por meterse su pija negra en la boca, él la empujó al piso, se sacó su campera, la soltó en el suelo y se dejó caer encima de ella. - Ni se te ocurra volver a empujarme putita, vas a hacer todo lo que yo te diga y solo si te lo permito vas a hablar, ¿estamos claros? - Ella solo respondió con un gemido mientras él le comía la boca, sus caras quedaban quietas por momentos, se estaban mandando lengua hasta el fondo. Fer agarraba a mamá de sus mejillas para que ella abriera la boca, ella se negaba pero él la apretaba mas fuerte o le daba cachetadas hasta que lo hacía, cuando mamá lo hacía él escupía dentro de ella, mamá abría aún más y sacaba su lengua para que volviera a escupirla. Mamá tocaba sus hombros, sus brazos, y espalda y sus manos, le encantaba la dureza y y forma de su cuerpo. La voz grave de Fer retumbó en la habitación, - Sacame la remera, putita - le dijo él - Como digas, papi - respondió mi madre. Era toda una puta sumisa que le gustaba ser maltratada. Fer la agarró del cuello para hacer que se pare y sacarle su Babydoll, mamá quedó desnuda, estaba a disposición de lo que Fernando dijera.
Él le dijo que se arrodillara y le chupara la pija, ella se quedó besádole el cuello y tocando su espalda hasta que él la agarró del pelo y le dio una cachetada, - Te dije que me chupes la pija. -. Una vez hizo eso mi madre lo miró complacida y tras una sonrisa traviesa se arrodilló para desnudarlo y luego y muy despacio a sentir su miembro.
Abrió grande la boca y se metió la cabeza. Le pasaba la lengua a la punta y lo miraba a los ojos. - Tenés la pija muy caliente papi, no puedo esperar a tenerla en mi conchita. - Fer solo la miraba mientras ella le lamía los huevos y lo pajeaba con las dos manos a la vez, mamá gemía como si fuera ella quien estaba recibiendo ese sexo oral. Se metió su verga entera en la boca mientras abrazaba a Fernando por la cintura, como si no quisiera que esa verga se le escapase, tardó un par de arcadas en separarse de la pija, con algunos hilos gruesos de saliva sostenidos por la pija de Fer y la lengua de mamá, y otros cayendo se su mandíbula, mamá dio un largo gemido, realmente estaba disfrutando chuparle la pija. Tomó aire y empezó a meterse la pija entera en la boca, cabeceaba con velocidad y violencia mientras miraba a Fer a los ojos; él la tomó del pelo y empezó a cojerle la boca como si fuera su culo en cuatro. Sonaba cuando llegaba la pija de Fer a la garganta de mamá, y cuando no estaba en el fondo, mamá estaba tomando aire o gimiendo. Yo estaba transpirando y con las manos temblando, mi pija me dolía de lo dura que estaba, me recorrían escalofríos constantes y sentía como si pudiera acabar en cualquier momento. Fer agarró a mamá del brazo y la tiró hacia el sillón, mamá ni siquiera quería que él se la chupara, quería su pija adentro. Se dejó hacer por Fer, así como la tiró se quedó en el sillón, él le chupó el culo y ella agarraba su cabeza para hundirla entre sus hermosas nalgas, le metía la lengua y gemía cada vez mas fuerte, hasta que puso su pija en su conchita. Mamá gimió de manera entrecortada y Fer empezó a masajearle su orto, ella sola se movía para que la pija le entrara cada vez más, estaba boca abajo con Fer arriba de ella, pegándole en las nalgas y haciendo que mi madre le pidiera cada vez más. Él se lo concedió, empezó a cogerse a mi madre hasta que sus huevos sonaban en su concha, mamá gemía como toda una puta. - Estaba deseando esa pija - gritaba la muy puta. Fernando gemía junto con ella. Mamá empezó a abrirse el orto y él le metía un dedo, debía sentirse en el cielo coger una mujer así de puta.
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De golpe la levantó del sillón y se pararon los dos, ella se dio vuelta rápido para acomodar esa pija dentro de ella y que la siguiera cogiendo, pero él la agarró de la nuca y la hizo darse vuelta, cuando lo hizo la subió en sus brazos y ella acomodó su pija adentro; él empezó a bajarla con sus brazos mientras a mamá se le daban vuelta los ojos cuando sentía como su verga entraba. Él empezó a moverla cada vez mas rápido y sus pelvis empezaron a chocar cada vez con mas fuerza, se besaban a la vez que gemían, mamá le besaba el cuello o los oídos y él le chupaba las tetas. El cuerpo de Fer empezó a transpirar pero no frenó de ninguna manera, mamá se calentó al ver eso y empezó a pasarle la lengua por el cuello de Fer, el pecho y los hombros, no sabía sí quería complacerlo o era toda una puta que disfrutaba de el cuerpo del hombre que tuviera. Pero él siguió cogiéndola hasta que se arrodilló y los pies de mamá llegaron al piso, empezó a moverse arriba de el mientras se tocaba las tetas y el clítoris. Fer le chupaba las tetas y gemía casi tan fuerte como ella, sus voces inundaban la casa. Empezaron a besarse mientras gemían, por momentos solo abrían sus bocas y gemían a la vez, sintiendo las exhalaciones calientes del otro. - Haceme acabar Fer, quiero llenarte la pija de mis flujos. - gritó ella desesperada. - ¿Querés acabar? Pedilo, puta- le respondió Fer a su oído entre gemidos.
- Quiero que tu pija tenga mis flujos papi, que tu saliva esté en mi conchita, o que la mía esté en tu pija, me encanta eso papi. Haceme acabar. - Dijo mi madre a duras penas ya que estaba a punto de acabar. - Papi, quiero que te mojes mucho un dedo y me lo metas en la colita, quiero tu saliva ahí. - Agregó ella. Fer no dudó y metió su dedo mayor en su boca hasta sacarlo muy mojado y acto seguido lo puso muy despacio en el culo de mamá, ella gimió como toda una puta y hundió su cara entre sus tetas. - Estoy cerca Fer, acabame adentro que no pasa nada. - Le pidió mamá.
Fer empezó a chuparle las tetas y meterle el dedo en el culo desesperado mientras mamá saltaba y se tocaba cada vez mas rápido. En un momento Fer le dijo - Estoy muy cerca, decime cuándo. - Mamá solo le tapó la boca y empezó a moverse mas fuerte, ya no se tocaba, besaba a Fer mientras pegaba un estridente grito y sus piernas empezaron a temblar muy agitadas, Fer la siguió a los segundos, empezaron a gemir juntos uno en la boca del otro casi gritando, las piernas de Fer se estiraron de un espasmo tan fuerte que podían diferenciarse todos los músculos de sus piernas, y las de mamá temblaban mientras ella gemía de manera que casi parecía un sollozo. Después de ese violento orgasmo mamá siguió moviéndose un poco más, muy despacio, y estuvieron así hasta que mamá de paró; cuando lo hizo, la pija de ya había perdido su erección. Después de eso fueron a bañarse juntos, y si bien se escuchó como cogían, no pude ver mas de eso.
Los siguientes días estuve volviendo a revisar su teléfono y según le dijo a Fer, fue su mejor experiencia, y quería repetirla, con el tiempo y otras veces que no quise espiar para no arriesgarme, terminé enterándome de que a mamá le interesaba la idea de un trío. 

Gracias por leer.

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