Vecino amante

Ya que el relato con mis primos gusto, voy a contar como un vecino se convirtio en mi amante, y uso mi culo a su gusto muchas veces.
Estaba caliente. El culo me pedí­a pija y nadie podí­a penetrarme. Estaba regalada. Abrí­ una app para encuentros con vecinos, y tire msjs ofreciendo mi cola. El que no de vueltas me la poní­a, seguro. Me contesta un gordo, me encantan. Linda panza, buena verga. Pero un vueltero más. Ya son las 0010, me llega un msj. Está a 4 cuadras. Pija gorda como pocas. Ya está, me puse mi tanga de hilo roja, arriba un short de futbol y salí­. Me recibe en el portón y solo me dice "no hagas ruido, están durmiendo arriba". El atrevido me iba a dar pija con la familia ahí­. Entro, veo el colchón en el comedor, quedó en tanga y el desnudo. Me arrodillo y comienzo a petearlo. Chupaba como si mi vida dependiera de esa verga. El aguantaba los gemidos. Se sentó en un sillón cercano, sacándome la pija de la boca. Gateando fui a mamarlo. Ahora estaba en 4, parando la cola así­ me tiraba la tanga, casi para partirme el culo. Chupaba esa verga y miraba la escalera, el morbo de que alguien me vea así­ era grande y la imagen no iba a dejar nada a dudas, el sentado en el sillon, yo chupando su miembro con la cola en pompa. No aguanté más. Me di vuelta y le pedí­ que me la ponga. Corrió mi tanga, me mandó lengua diciendo lo lindo de mi cola y yo bien puta pidiendo por favor que me coja. Sentí­ su cabeza en la puerta, y tire violentamente la cola para atrás. Yo misma me rompí­ el ogt, esa verga era muy gruesa. Comenzó el vaivén, al fin era tratada como puta. Me subió al sillón, en 4 sobre el borde y ahí­ siguió la faena. Mi culo y su verga eran uno. Me bombeó hasta abrirlo bien. Ya estaba gimiendo, sus huevos hací­an tope y se lo pedí­. "Preñamelo". Acelero el ritmo y me lleno. Me hizo suya. Yo feliz me acomode la tanga, subí­ el short y me despedí­. A dormir con la cola llena de leche. Pronto se iba a convertir en rutina.

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