Laura 4

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Debido a que carezco de tiempo por facultad y trabajo, estoy publicando poco, pero hay avances de todas las historias y nuevos proyectos. También secuelas, tanto de pago como gratuitas. Voy a estar informando!


"Mi prima, Mara: El camino de la tentación". (solo en mi sitio)

INFO

. Abarca todo el segundo arco de la historia, desde el final del capítulo 28 de la primera parte.
. Cuenta con 10 capítulos extras.
. Contenido adicional en todos los capítulos, los cuales fueron re escritos al 100%
. Desenlaces re imaginados y personajes profundizados.
. Todo el arco contado como una sola historia única.
. Contenido extendido en todos los capítulos.
. 42 capítulos y 650 pags.


Contenido posterior a "repercusiones".
Con final imperdible.


Historias disponibles

- Mi prima, Mara. 28 caps. 493 pags.
- Erica, mi hermanastra. 15 caps.
- Mi joven tía. 13 caps. 182 pags.
- Mi prima, Mara: El camino de la tentación. 42 caps. 650 pags

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Laura, la mamá de mi amigo: Parte IV



¿Qué?
¿Escuché eso?
Sentí que me desvanecía en la mesa.
¿Me preguntó si sabía lo que era pajearse?
Casi escupo todo el café con leche.
Mi ritmo cardíaco cambió drásticamente. De estar al trote, tanteando, pasó a correr como Usaint Bolt en un circuito.
Lo dijo como si nada y me miraba con los bien grandes como esperando respuesta.
YO: ¿Cómo?
No caía todavía.
LAU: Según tengo entendido, tienen educación sexual en el colegio…
Cada palabra era una inyección de morbo en mi sistema nervioso.
Estaba excitado y con miedo, je.
YO: Eh… Sí…- Balbuceé…
Tenía razón Laura, teníamos educación sexual en el colegio. Con una profesora que, no siendo demasiado explícita, nos había hablado de muchos temas.
LAU: Me parece perfecto que así sea… En mi época eso no existía y a muchos les jugó en contra jaja.- Exclamó revoleando los ojos.
No sabía qué decirle.
Pero luego pensé que no podía cagarme y ser tan tierno. Obvio que me puse todo colorado y se notaba, pero aún así, no debía mostrar esa imagen.
YO: Claro…
LAU: Pero bueno, no creo que yo deba hablarte de eso jaja
YO: ¿Y entonces para qué me pregunta? jaja
Me miró de repente, como que no se esperaba esa respuesta.
LAU: Es que vos preguntaste primero…
YO: ¿Yo?
LAU: Sí, lo que pasaba en la película que miraba…- Exclamó con rostro pícaro y tomando de la taza.
Uff..
No hablaba de la película, hablaba de ella.
Entre los nervios y la calentura que sentía, vivía la mejor noche de mi vida, lejos.
La había visto desnuda, pajeandose y ahora hablando sucio.
Por supuesto que ella no estaba enterada de nada de lo que sucedía. Pero aún así, parecía excitarse de contarme verdades a medias.
YO: Ahh…
LAU: En fin…
No tuve mejor idea que seguir en esa línea. Fué automático.
Un sentimiento de perversión, emergió desde el fondo de mi alma.
¡Quería más!
YO: ¿Y cómo lo hacía?.- Le dije con vigor
Laura apoyó la taza de golpe, tentada.
LAU: ¡Neneee! jaja.- Gritó toda colorada.
YO: ¿Qué pasó? jaja
LAU: ¿Estás loco vos? ¿Cómo me vas a preguntar eso?.- Se ruborizó tanto que me puse loco.
YO: Es una pregunta nomás…
LAU: Qué desubicadito que sos… ¡Dios mío!.- No paraba de reirse. No creía lo que le había dicho.
YO: No, perdoneme… Tiene razón…
LAU: Jajaja no me tutees… Pero no te puedo responder una cosa así, nene.- Se agarraba la cabeza, con gracia.
No parecía haberle molestado y eso me gustaba muchísimo.
YO: No le vayas a contar a nadie
LAU: Jajaja te prometo que no… ¡Qué pibito confianzudo que resultaste, eh!
YO: No, nada que ver… Es que usted… ¡Vos sos muy copada!
LAU: ¿Ah sí?
YO: Sí, de una… Se puede hablar de cualquier cosa, jeje
LAU: Este chico… De cualquier cosa no, porque sos un nene de 15 años… Tal vez cuando seas mayor…-
En ese momento sentí algo muy especial.
No solo por la buena onda de Laura. Si no por la forma en que dijo esa última frase.
Algo en la mirada me decía que era verdad.
Sentí una complicidad única.
YO: ¡16! jaja.- Le contesté en broma.
LAU: Menor al fin…
YO: Bueno ¿en dos años le puedo volver a preguntar?
Mientras tenía tomada la taza con las dos manos, emitió una sonrisita de costado que me enamoró.
Creo que en el fondo, le gustaba hablar de estas cosas.
LAU: Puede ser…- Exclamó de una forma tan hermosa que jamás olvidaré.
Qué noche más caliente…
No tenía que dejar pasar el hecho de que debajo de esa bata, estaba en bolas. O tal vez, solo en tanga. Esa misma que había en su mano mientras caminó desnuda hacia el baño.
Obvio que esa noche me iba a costar muchísimo poder dormir.
Dudaba que pudiera hacerlo.
Se hizo un pequeño silencio hermoso. Pero antes de que pudiera decir algo más, Laura se levantó de la mesa.
LAU: Bueno… Ya es un poco tarde… Vos tenes que irte a dormir
Había terminado su café.
YO: Ufa jaja
LAU: Demasiado por hoy jmm…- Expresó con rostro de “te pasaste”, pero tentada.
YO: Jaja
LAU: ¿Terminaste?
Qué pregunta… Para mí, recién empezaba, pero claro que ella se refería al café.
YO: Sí, sí…
LAU: Bueno… ¡Andá, dale!
Había terminado el show, al menos por ahora. Pero tenía suficiente como que mi imaginación volara por mucho tiempo.
Me dispuse a lavar la taza y Laura me dijo que la dejara ahí, que ella lo hacía.
YO: Hasta mañana, Lau…- Le dije como con confianza. Ya no la trataba más de usted.
Pero cuando me estaba por dar vuelta para irme, ella me respondió “hasta mañana, nene” y me dio un beso en el cachete.
Dios mío… Era todo un degenerado.
Fue un beso normal, de saludo. Como tantas veces me había dado cuando llegaba o me iba de su casa.
Pero yo lo tomé de otra manera.
Sobre todo, después de la conversación que habíamos tenido.
Además, me gustó. Hizo el “muack” y todo.
Yo en ese momento era un pendejo bastante pajero y, claro, era la edad. Y Laura, más allá de esa sorpresiva pregunta, no había hecho nada inapropiado conmigo. Pero ella desconocía lo que había visto y escuchado. Que la vi completamente desnuda, tocándose… Y esas referencias que ella hacía sobre “la película” me generaron un placer tremendo porque hablaba del momento guarro que me tocó presenciar. Claro que lo hizo sin saber lo que realmente ocurría.
Entonces, de esa manera, la circunstancia tenía un sabor especial.
¿Me gustaba la mamá de mi amigo?
Por supuesto que sí.
Y no voy a mencionar lo que hice más tarde, esa misma noche, cuando todos dormían en silencio. Era inevitable que no sucediera y el broche de oro para cerrar una noche que perduraría en mi mente para siempre.
También, quiero destacar que luego de ese día, Laura comenzó a tener más confianza conmigo. Su trato hacia mí dejó de ser como si fuera un nene, aunque tampoco se tornó inadecuado. Jamás.
Pero de todos los amigos de Mauro, estaba completamente seguro que a mí, era al que más quería.
Si bien, nunca volvimos a hablar del tema, ni yo volví a presenciar algún acto como ese, muchas noches en las que me quedaba a dormir en la casa de Mauro, me escabullía por entre las penumbras, para ver si podía verla otra vez.
En algunas ocasiones, ni lo intentaba, ya que el papá estaba en casa y me daba cagazo de que me pescara.
Yo nunca le conté a nadie lo de esa noche. Me lo guardé para mí. Y conforme pasaba el tiempo, comencé a sentir algo más por Laura, que esa clase de amor platónico o admiración que en un momento pude experimentar.
Ya no la veía como un “pajero” en general. Posta, me gustaba.
Recuerdo lo primero que pensé cuando en mi cumpleaños número dieciocho, me hicieron soplar las velitas.
Cualquiera estaría contento por ser legal para entrar a los boliches, tomar alcohol, conducir, etc…
Mientras cantaba el feliz cumple, yo tenía una sola imagen grabada en mi mente y era la de Laura, en tetas envuelta entre las sábanas.
“Mirá, no puede creer que ya sea mayor” dijo un tío mío por mi dispersión.
Podría ser en parte, eso. Pero la realidad era un poco más fuerte. Ahora podía hacer cualquier cosa que se me ocurriera.
Claro que había crecido y… en varios aspectos. Por lo que era más difícil que pudiera prestarse otra situación como la de aquella vez.
Ya era más grande, no era un nene y no me había quedado a dormir en la casa de Mauro en mucho tiempo.
Nos juntábamos, jodíamos y, después, cada uno se iba a su casa.
Laura seguía igual que siempre. No noté ningún cambio en los últimos dos años. Incluso, parecía que había tomado el hábito de cuidarse y nunca más lo había dejado.
Tenía un brillo especial en el rostro que hacía más bello todo lo que uno pudiera imaginarse con ella.
Una sola vez ocurrió algo que podría llegar a compararse con la conversación de aquella madrugada.
Un sábado, algunas semanas después de mi festejo, fui a buscar a Mauro para ir a jugar un torneo de fútbol.
La casa estaba completamente en silencio.
Entré y él se fue a preparar para ir, ya que lo saqué de la cama.
Por dentro pensaba “vago de mierda son las 11 de la mañana”.
Me preguntaba donde estaban los demás, ya que me parecía raro que no hubiera nadie.
Mientras él se bañaba, yo estaba en su habitación, pero comencé a deambular por la vivienda.
Tardaba mucho en el baño y me aburría, je.
Miraba mi teléfono cuando oí ruido desde el fondo.
Yo, que estaba en el pasillo que conectaba el living con la cocina, me extrañé.
Ellos no tenían perro o algún otro tipo de mascota.
Fue entonces que me salió el investigador de adentro y fui hasta la puerta del fondo.
A través del vidrio, observé una imagen muy hermosa.
La casa no estaba vacía, Laura, estaba disfrutando un rato de la pileta.
Podía deleitarme con su cuerpo, mientras se movía por el agua.
Tenía una bikini blanca con estrellitas y debajo un short.
En realidad no sé si era un conunto o qué, pero me quedé estupefacto.
Claro, estaba el hijo en su casa, no podía vestir de otra manera. Pero aún así, era imposible que alguien no se calentara viendo esos pechos preciosos apretados por el corpiño.
¿Cómo podía ser que tuviera esa piel tan linda?
Dios…
La cabellera larga y rubia no se quedaba atrás. Con el efecto mojado del agua, daba calambres.
Recordé enseguida esas épocas de antaño.
Y miembro también, que se me endureció bajo la bermuda.
Pensé en salir a saludarla, pero era demasiado. Iba a quedar muy caradura.
La miré unos segundos más, completamente embelesado y me di vuelta para volver por donde había venido.
Me detuve en la zona media del pasillo.
Eran demasiadas las ganas que tenía de verla, saludarla.
¿Y si me mando? pensé.
¿Qué es lo peor que puede pasar?
Ya no era ese nene “inocente” de hacía unos años. No era lo mismo y no sabía cómo podría llegar a tomarlo.
Decidí desistir y dejarme de hinchar. Pero justo en ese momento, la puerta del fondo se abrió.
“¿Joaquín?” dijo una voz algo sorprendida.
Al oírla sentí un calor hermoso que me recorrió entero.
Que lindo tono…
En realidad, me gustaba todo de ella, al parecer.
“Ya me vio” pensé.
Y me di vuelta sin saber que cuando la viera, iba a sentir el impacto de una flecha en mi cuerpo.
LAU: ¿Cómo andas tanto tiempo, nene?.- Expresó alegre.
Que hermosa que lucía así…
Posta que me re quedé.
YO: Bien, Laura ¿Cómo andas, vos?
La saludé con un beso, mientras miraba cada centímetro de piel que exhibía.
Lo que eran esas gomas.
LAU: Bien ¿viniste a buscar a Mauri?
YO: Sí, se está bañando.- Le contesté aún perdido por su belleza.
LAU: Ahh, bueno, espera sentado entonces jaja.- Dando a entender que iba a tardar mucho.
YO: Jajaja
LAU: ¿Te llegaron mis saludos por tu cumpleaños?
YO: Jaja ¡no!
LAU: Y eso que le dije… Bueno ¡Felíz cumpleaños entonces!.- Expresó con una sonrisa que me encantó.
Cuánta luz…
YO: Jaja gracias…
Amaba esos momentos…
Por supuesto que continué la conversación. Una vez que la veía…
YO: ¿Disfrutando la pile?
LAU: ¡Sí! Jaja. Justo entraba para agarrar el equipo de música…
Había un minicomponente sobre la mesa.
YO: ¡La vas a pasar bomba!
Hizo gesto de “me descubrieron”
LAU: ¡Sí, tengo la tarde sola!.- E hizo un movimiento medio bailoteando.
YO: Jajaja
LAU: Vos que estás calzado y seco ¿me lo conectarías?
YO: Sí, obvio.- Le contesté enseguida. Todo lo que fuera para complacerla, por mí estaba genial.
LAU: Ya veo que me quedo pegada.
Dio media vuelta y salió por donde entró. Yo caminé unos cuantos metros por detrás de ella, admirando su figura.
Por debajo del short, se le transparentaba la tanga.
Cerré los ojos por el impacto que me generó.
¡No podía estar tan perra!
Conecté el equipo y comenzó a sonar la música que tenía cargada.
“You give love a bad name” de Bon Jovi.
YO: Listo…- Dije y me giré hacia ella.
Casi me desmayo en forma instantánea.
Se estaba bajando el short.
La temperatura de mi cuerpo inerte, se incrementó de forma salvaje.
No lo hizo en forma provocativa, pero aún así me rompió la cabeza.
Lo tiró por ahí mientras escuchaba la canción, que al parecer, era de sus favoritas, ya que a la vez que me agradecía, efectuaba unos sexies movimientos de danza que me dejaron pasmado, acompañados de una sonrisa para nada terrenal.
Amor a primera vista, sin dudas que era la descripción para lo que en ese momento, me generaba en los más interno de mi ser.


Laura 4


No tenía nada de malo que estuviera en malla.
Pero ¿el bailecito?
Dios…
También estaba el hecho que siempre fue una mujer muy alegre. No debía hacerme tanto la cabeza ¿O sí?
La cuestión es que permanecí estupidizado, admirando su belleza. Y sus hermosas tetas pulposas retenidas por el corpiño.
LAU: ¿Qué te pasa? jaja.- Soltó risueña ante mi cara de imbécil.
YO: No, nada…- Contesté nublado.
Me gustaba demasiado. Era muy hermosa.
No veía la parte de atrás de la tanga, pero suponía que era muy fina.
YO: ¡Estás muy linda!.- Dije sin querer.
Enseguida me di cuenta de mi yerro.
Se va todo al carajo, pensé.
¿Cómo puedo ser tan boludo?
No podía decirle eso. Pero era tanto el nivel de nebulosa en el que me había dejado, que actué por instinto, sin pensar.
LAU: ¡Bueno, gracias! jaja.- Me contestó sorprendida pero sonriente.
¿No se calentó?
Esos gestos divinos que hacía…
YO: No, de nada.- Le respondí haciéndome el boludo, como si hubiera sido un simple cumplido y miré para otro lado.
Como si nada, ella se metió nuevamente en la pileta.
LAU: ¿A qué hora me devolves a mi hijo?
YO: Mmm no sé, supongo que para las 4 o 5 estará de vuelta ¿por?
LAU: No, no… Para saber.
Me preguntaba por qué le interesaba eso.
Respiré aliviado al notar que no se enojó por mi comentario. Siempre tenía buena onda, la verdad.
Pero que un pibe amigo de tu hijo te diga “linda” mientras bailas por ahí en bikini… No sé… A mi me hizo delirar.
Aún así, actuó como si nada hubiera sucedido. Conversamos unos minutos más mientras ella estaba en el agua.
A veces, se tapaba con la mano por el reflejo del sol. Yo aprovechaba para mirar toda esa deliciosa carne que tenía de delantera.
Obvio que estaba con la pija re dura bajo la ropa.
Se sintió genial decirle lo que pensaba.
La cara que puso….
Se me hizo muy familiar. Muy parecida a la de aquella vez, sorprendida de lo caradura que fui.
¿Qué habrá pensado al oirme?
Mi cerebro trabajó a mil por un rato.
Cuando Mauro terminó, la saludé de lejos, con la mano.
LAU: ¡Chau, Joa!.- Dijo mirándome cariñosamente.
Raro que me dijera “Joa”… Pero aún así, me gustó.
Me daba esa sensación de complicidad de la que daba mucho gusto gozar.
Luego, nos fuimos.
Creo que mi cabeza no dejó de pensar en ella en todo el día.
Esa sonrisa…
¡Qué locura!
Hacía mucho tiempo que no dominaba mis pensamientos. Fue como si volviera el tiempo atrás, a aquella noche.
Pasaron los días.
Yo no dejaba de verla en mi mente.
Por dentro, me reía, porque tenía que buscar la forma, la excusa perfecta para ir a la casa de Mauro, je.
Quizá sonaba descabellado, lo sé.
No sé a cuántas personas les pasó en la vida enamorarse de la madre de un amigo…
Porque si eso no era amor…
En definitiva, por más que pensé y pensé, no se me ocurría qué decirle a Mauro. Ya no era tan habitual en nosotros juntarnos a jugar a la play o que se yo.
No al menos con tanta regularidad ni tampoco en su casa.
Así que me frustré bastante y creí que ya era todo.
No había nada qué hacer.
Fue tan solo unos días después que Mauro me llamó para bajarse de un partido que íbamos a jugar porque se iba de vacaciones con los padres.
YO: ¡Qué cagada boludo! Nos van a cagar a goles ahora jaja.- Lo jodí.
MAU: Jajaja igual te llamaba por otra cosa
YO: ¿Sí no? Me lo podrías decir por texto jaja
MAU: Es que te vas a caer de culo…
Me quedé.
¿A qué se refería?
Yo sabía que andaba con una chica.
“Este se puso de novio” me dije.
YO: ¿No me digas que te pus…?
MAU: ¿Ehh? No, nada que ver…
YO: ¿Y entonces?
Y soltó la lengua.
Nunca en la vida me hubiera esperado una respuesta como esa.
MAU: Estaba hablando con mi vieja viste… Y me propuso para que no me embole tantos días solo, que te diga a vos, si queres venir de vacas con nosotros...

10 comentarios - Laura 4

diegoprey
Excelente...como siempre...van 10pts y a esperar la continuación..abrazo.
masada8641
Y de mara nada ?
Asdran
Compra en su página ahí está hasta el final de la historia... No te arrepentirás....
Y sólo me resta decir.... Espero q haya un capítulo de q sucedió después de ese final con los personajes.... No me podes dejar así con esa intriga
masada8641
@Asdran
Ya compre todo
Todo muy bueno
Solo queda esperar
ruso201784
Este promete como todos tus relatos !! Sos un genio
Labandadedani51
Buenísimo como siempre espero la parte 5 pronto!
GabrielBerisero
seeee q siga q sigaaa!! dibuje maestro!
pd: no te olvides de mara 🥺 jaja
RRRFTR
Cuando sale la parte V....? Imagino que ya la tienes escrita!
Eres un Grande amigo!!
mariano101010
Amigo mandas otro capítulo d este plis !?
agucho23
Otro capítulo de esta historia amigo?