¡Repite conmigo!




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Compendio II


😟


Esa noche, tuvimos una discusión medio fea.

Él me decía que por qué yo me tocaba más las noches cuando estaba sin él, que cuando estábamos juntos.

Y yo le dije que era un tonto celoso, porque pensaba solamente en él.

😭

Y obvio, me acosté enojada y llorando, dándole la espalda.

Entonces él llega a mi lado, me hace cariñito en el cuello y me besa.

“Es que me cuesta entenderte, ¿Sabes? ¿Por qué lo pasas mejor cuando estás sin mí? ¿Lo sabes tú?” me preguntó, tratando de ponerse en la buena conmigo.

😕

Le dije que no lo sabía, porque me daba pena su carita.

Pero le dije que no era que la pasara mejor sin él.

Lo amo. Es mi mejor amigo y el sexo es súper recontra rico…

Pero eso de imaginarme qué cosas le estará haciendo a otras, me hace hervir en calentura.

😆

“Entonces, repite conmigo…” me dice, un poquito más calmado.

“¿Qué?”

“Que repitas conmigo. Que te imagines que en estos momentos, estoy con otra…”

😅

“¿Pero cómo voy a hacer eso, si tú estás aquí?” le pregunté, sin entenderle mucho.

“Es que tienes que ponerte en mi lugar, Marisol. Casi siempre me dejas caliente y quiero disfrutarte un poco más, y debo reconocer que me da celos que te diviertas más tiempo a solas.”

😓

Yo cada vez, entendía menos…

“No, no, mejor dejémoslo así, ¿Quieres? No quiero que pienses que soy más rara todavía…”

Y él me hace un cariñito rico y me da un beso suavecito…

😚

“No pienso que seas rara. Piensa que es como un juego. Imagínate  por ejemplo…¡Ahh, ya sé! ¡Estamos viviendo en la casa de tu mamá y te digo que me voy con tu hermana por el fin de semana, a la casa en la playa de mis padres!”

😳

¡Me toco justo mi punto débil!

Mi hermana del medio tiene también 22 años (nos llevamos 7 meses y medio de diferencia).

Pero yo encuentro que si ella hubiese tenido más personalidad, sería ella la esposa de mi marido y no yo.

😆

Tiene ojitos verdes y es blanquita de piel, igual que yo; una naricita chiquitita y tierna, con labios gruesos y súper cariñosos; pelito negro, bien largo (porque tampoco se olvida cómo le gustan las mujeres a mi marido) y una cola redondita e impresionante, con unas feroces y duritas piernas (porque le gusta mucho salir a correr).

Pero por lo que me habría podido ganar es por sus tremendos pechos que ella tiene…

😮

O sea, yo ya fui mamá y todavía, no me crecen tanto como los tiene ella.

Y lo otro, que parece una niñita buena y súper inocente.

“Pero… pero… ¿Qué le vas a hacer?...¿Para qué te la llevas ahí?” le pregunté, empezando a sentir el volcán entre mis piernas.

“¡Oh, tú lo sabes bien!” me respondió, con esa mirada astuta.

😰

“¿Pero… de verdad, no me vas a decir nada más?” le pregunté, sintiendo ya esa enorme ansiedad.

“No, nada.” Me respondió él…

Y no sé…

Empecé a pensar en mi hermana.

😅

O sea, obvio que conversamos bastante de nuestras vidas, de sus estudios y de mi trabajo…

Pero al final, siempre sale el tema del hombre que nos desvirgó a las 2.

😆

Y es que ella, que ha tenido más pololos ahora, igual me dice que no se puede olvidar del primer pene que le hizo gozar bien.

Que, o sea, incluso ahora que está pololeando más serio con Ramiro (y por suerte, se deshizo de los otros 2 que la acosaban… XD), igual se queja que le falta la resistencia de mi marido.

Porque obvio, Ramiro no aguanta más de 3 minutos con una mamada de mi hermana y se corre en su boca.

😞

No así mi marido.

Porque, por ejemplo, yo me lo desayuno cada mañana, obvio…

XD

Pero también, por ejemplo, los martes,cuando vemos pelis, yo me pongo a chuparle su pene un rato, porque encuentro que tiene un rico sabor y porque me hace sentir tranquila y siento que me relaja.

O los domingos, cuando dormimos la siesta, para mí es infaltable chupársela y quedarme dormida con su pene en mi boca.

O sino, cuando estoy con mucho estrés o no se me ocurre cómo resolver un problema, le aviso a mi marido y me pongo de rodillas a chuparle, hasta que se me ocurra algo.

😅

Entonces, se me ocurrió que si iban en el auto, ella se la iba a chupar por todo el camino hasta la playa, así que eso hice yo también…

😩😫

Pero lo rico, eso sí, es que mi hermana y yo sabemos cómo chuparle, para que no se corra tan, pero tan rápido.

A mí me encanta chuparle la cabecita, porque se ve rosadita y parece un dulce y lo vuelvo loquito pasándole la lengua.

Pero no pasa mucho tiempo a mi hermana y a mí que nos baja esa como sensación de hambre, que queremos meterla enterita en la boca y de ojalá, hasta tragarla.

😵  😲

Y claro, mi marido lo disfruta un montón.

Pero para mí, lo más entretenido es cómo se va haciendo más y más grande y poniéndose más dura y caliente, dentro de mi boca.

Esa sensación riquísima, como que me estira los labios de lo gordita que se le pone, me encanta bastante.

Y como cuando me ahoga y se me empieza a meter en la garganta, es de lo mejor.

Porque, o sea, me queda toda la nariz a la altura de sus bolitas y aunque mi esposo es súper limpio, igual le queda un olorcito fuerte que me encanta.

😲 😲

Y claro, lo otro que tiene es lo que me dice mi hermana.

Que el pene de Ramiro es más delgadito y que por eso, cuando se lo come, se lo come tremendamente ansiosa, haciéndole gritar.

Y como les conté, como él todavía no se controla, no pasan ni 3 minutos, cuando le bota los juguitos en la boca. Y claro, ella se los traga, pero le deja con ganas de más.

Así que por eso, yo se la chupaba más que ansiosa, porque sé que mi hermana también necesita el pene de mi marido con una tremenda desesperación y la sentía en la garganta y en los pulmones.

Y bueno, él se quejaba de lo rico que lo hacía y me sujetaba la cabecita, como si se me fuera a escapar de su pene.

Hasta que llega un punto, donde casi, casi le hago darme el juguito más rico que he probado en mi vida y me dice:

“¡Espera! ¡No puedes chuparme todo el camino! ¡También tengo que pagar el peaje!”

😍

¡Lo encontré tan lindo!

Es que es eso.

¡Él me conoce tanto, que hasta me sigue bien el juego!

Así que lo besé, lo recontra besé y le seguí besando, pero siempre masajeando su palito de carne, para que no le bajara.

Y yo, obvio que ya estaba jugosa…

Así que con una vocecita sexy, le dije…

“¡Ya, mi amor, ahora dame por atrás!”

😩😫

Y me apoyé en el ropero y le entregué ansiosa mi colita.

Sentía cómo me bajaban las cascadas de juguitos desde mi entrepierna.

Pero le necesitaba.

Tenía que romperme la cola…

😣

“¿La quieres en tu conchita?” me pregunta mi mejor amigo forever, aunque la tenga súper dura y venosa, besándome los codos y los brazos.

“¡No, mi amor, la quiero en mi culito!” le respondí, dejando soltar mi lengua.

😩  😖

¡Y qué placer más maravilloso!

Es que también es algo que conversamos mucho con mi hermana…

😕

Porque, o sea, Ramiro es un caballero y no se atreve a romperle por atrás…

Y bueno, aunque lo hiciera, todavía la tiene más flaca que mi marido, así que ella no quedaría tan rellena, rellena como me deja a mí...

XD

Pero a pesar que otros le han roto también la cola, dice que el que mejor lo ha hecho es el padre de mis niñitas.

😵  😲

Y es que me dice que se le pone tan gorda, tan caliente y le da y le da, con tanta, tanta fuerza…

Que ya no le importa lo que mi marido diga.

Que ella se puede casar y volver mamá y todo, pero que igual, igual, me lo va a pedir un poco para que le rompa la cola y a lo mejor, en una de esas, que le dé un hijo…

XD

😅

Pero me estoy yendo por las ramas.

Me imaginaba que mi marido paraba el auto, por uno de esos caminos secundarios y mi hermana le ofrecía la cola, apoyándose en el capó.

O sea, yo me imaginaba el sol quemante en los brazos de mi hermana, mientras mi marido la clavaba y la clavaba sin parar, agarrándole sus enormes pechos de esa forma que me hace babear de gusto y pellizcándolos y tirándolos, con cada estocada monumental.

😫 😖

Y ese sentimiento tan rico, de dolor y de placer, del chico que más te gusta y que te clava y te clava, sin parar,era una delicia maravillosa.

Y eso de decirme a mí misma “¡Me está culeando! ¡Me está culeando!”, me hacía acabar más y más.

Y lo más rico de todo, es que la metía hasta el fondo, el fondo, con sus bolitas rozando mi colita y lo único que pensaba que me iba a morir de placer…

😵  😲

¡Era indescriptible!

💦💦 💦

Y ya, yo recuperaba las fuerzas,mientras mi marido todavía tenía su miembro agarrotado en mi trasero y cuando lo pude sacar, me di vuelta y le di un beso.

“Marisol, ¿Qué te pasa?” preguntó mi mejor amigo.

😠

Pero eso me enojó.

Porque en esos momentos, yo era mi hermana.

Y era ahora, que mi conchita lo deseaba desesperada.

😩  😲

Nos volvimos a acostar en la cama, conmigo dominando siempre el balón…

Y creo que lo acorralé, porque todavía me acuerdo de sus lindos ojitos confundidos.

😆

Y es que en esos momentos, yo pensaba en la cama matrimonial de mis suegros y lo excitante que era que mi marido se hubiese llevado a mi hermana para cogérsela sin descanso.

Y me calentaba más y más, pensando en todos esos momentos tiernos que debieron pasar ahí, de desayunos familiares y felicitaciones por días de las madres…

Y ahí estaba mi hermana, cabalgando el maravilloso pene del benjamín de la familia, mientras que su esposa estaba lejos, sin saber nada de ellos.

😵  😲

Y es que eso también lo conversamos con mi hermana.

Porque, o sea, para ella, el primer pene que la desfloró, no lo olvida.

Y obvio, que se ha metido penes más gordos y largos también.

Pero ella cree que el que la encaja más, más rico, es el de mi esposo.

Que sus corridas son las más jugosas, cuantiosas y refrescantes…

Y que el ritmo que lleva es perfecto.

😂

Y por eso me dice que cuando lo ve, no se aguanta las ganas y me lo tiene que robar sí o sí.

Que no le importa estar pololeando, estar casada o tener hasta la pareja al lado.

Para ella, comerse a mi marido es un deleite.

Y lo mismo pasa con mi mamá.

XD

Así que cuando él me reclama cuando vamos de visita que ellas no lo dejan tranquilo, yo me río y le digo que nadie le obliga a hacerles gozar tan recontra bien.

😂

Pero continuando con los que le cuento, esa noche sentía como que yo me estaba violando a mi marido.

Lo que de verdad, no era nada mal, porque mi lindo esposito lo estaba recontra disfrutando.

Y es que yo sentía esa ansiedad tremenda que tiene la conchita de mi hermana de sentir el pene que más te gusta y del chico que más quieres, descargándose dentro de ti.

De estrujarle fuerte con las caderas y con todo tu cuerpo sus bolitas, para que te dé esa corrida calientita y maravillosa, que te termina relajando ene.

Y lo que lo hacía más, pero más recontra rico, era que mi marido me apretujaba los pechos y que con lo fuerte que me movía, igual se sacudían heavy, como le debe pasar a mi hermana.

😩  😲

Yo meneaba mis caderas ansiosas, galopándolo con la satisfacción de finalmente tenerlo entre sus piernas, tras un año de sexo regular…

(Porque eso es lo otro: mi hermana quiere mucho a Ramiro, pero en el catre, le deja mucho que desear… XD)

Y eso, de agarrarme de la cintura y de sobarme los pechos, me hacía sentir la mujer más bonita y sensual del planeta.

💦 💦 💦 💦

Me sentía rica.

Me sentía llena.

Pero mis ganas no bajaban para nada.

“¡Hazme la colita!” le ordené.

“¿Otra vez?”

😠

¡Si no le han hecho la cola decente en casi un año a mi hermana!

¿Creía que con una vez le bastaba?

😩  😲

Y ahí, era violento…

Era animal.

Ella lo necesitaba duro.

Se lo pedía con más fuerza.

Que valiera la pena que se lo rompiera bien, bien roto.

😩  😖

“¡Culéame! ¡Culéame más fuerte!” le ordenaba.

Me sentía tan ansiosa, tan contenta, tan poderosa y tan caliente, que me masturbaba la conchita sin parar.

Él quería ayudarme, pero yo no lo dejaba, porque quería que se afirmara bien, bien a mi cintura y la metiera entera…

😵  😲

Y cuando entró toda, yo estaba en el más completo Nirvana…

Meneándome con fuerza, para adelante y para atrás, acomodando mi colita al pene más rico y que mejor me calza…

Y cuando sentía sus estocadas rapidísimas y mortales, haciéndome llorar de dolor y de placer, estalla deliciosamente, llenándome la colita de riquísimo juguito tibio…

💦💦 💦

¡Primera vez que me siento recontra cogida por el culo!

Y me siento exhausta, satisfecha… y puta…

😆

La saca de mi colita y sale todavía hinchada…

Imparable…

😵  😲

“¡Ay,Marisol! ¡Eso fue increíble, mi vida! ¡Me sacaste mis fuerzas!” me dice el amor de mi vida, mientras le chupo más tranquila su palito de carne.

Y me mira con esos ojitos tan lindos, tan tiernos, que amo, amo y recontra amo…

😍

“¿Podríamos hacerlo así, al menos una vez al mes? ¡Me encantaste, tesoro! ¡Estuviste estupenda!”

Y yo, bueno, roja, orgullosa, contenta y con la colita bien partida, por unos 3 días…

XD

¡Claro que no le pude decir que no!

😉


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2 comentarios - ¡Repite conmigo!

pepeluchelopez +1
Sobre el sexo oral Nolo se, pero no ha habido la mujer que me haga terminar rápido, pero en penetración si, hay ejercicios para contener la eyaculación y tu hermana podría aplicarse los a Ramiro para que le dure un poco más la fiesta. Es apretar fuerte la base del pene donde se incha el conducto. Punto de eyacular. Y eso relaja la situación un par de minutos y así puede ir haciendo más tiempo. Quizá el libro la cama celestial le dé una idea. Saludos
metalchono
😅Bueno... es que mi hermana y yo somos como tontas para el palito de carne... y mi hermana, a lo mejor, no tiene mi técnica especial de modo aspiradora.... pero menea su cabeza como máquina de coser.😂 Y ya sabe lo que le espera si se la chupa súper, súper, súper rico. 😂Lo que más risa me da es que el pobre Riro no aguanta que se lo haga 2 veces seguidas y a veces, mi hermana queda con un pésimo genio después.😉
metalchono
😅¡Y se me olvidaba! ¿Te leíste el relato que se llama "Carolina"? 😕 Porque yo sigo creyendo que no me dio un ataque de celos. Lo que me enojó fue que me dejara solita e indefensa y que él se tuviera que quedar conversando con esa tonta pesada y trepadora. 😞
pepeluchelopez
@metalchono jajaja que locura con tu hermana, es difícil aveces encontrar buen amante. Si leí Carolina la chavita que se sentía el centro de atención hasta que se encontró que el no la tomaba en cuenta jeje por ahí va la cosa
ChupaloBien
Eres una mujer maravillosa, que le gusta el pico, más que el pan con chancho.
Es mi deseo encontrar alguien así, porque las chilenas son bien cartuchas para sus cosas, deseo profundamente que sean como tú y den la posibilidad de saciar la calentura con otras y que disfruten tan libre y apasioandamente como tú lo haces.