Con otra pareja delante de mi novio

En este relato pensamos contarles lo que nos pasó hace un par de meses aquí en Madrid con una brasilera que conocimos por Tinder. Este va a ser el primer relato que vamos a escribir en conjunto con Ceci, nos vamos a repartir los momentos, enfocándose cada uno en lo que más disfrutó de esa noche. Espero que la animen con sus comentarios y puntos ya que es su primera vez…


Desde hace ya unos meses estamos viviendo en Madrid por estudios, la verdad que la ciudad se presta para cumplir muchas fantasías y atreverse a vivir experiencias nuevas. Hace unos meses conocimos a Alicia una brasilera de 36 años divina, quien nos confesó que nunca había tenido ninguna experiencia con otra mujer ni con tríos, pero que quería empezar a experimentar.

Luego de una primera salida tranquila para solamente tomamos algo y en donde Alicia nos preguntó cada detalle de nuestras experiencias anteriores, quedamos en coordinar una segunda cita un poco más fuerte je.

Era un miércoles y decidimos ir a un Spa liberal para acortar la semana ya que veníamos muy estresados. Invitamos a Alicia para que venga con nosotros, pensando que nos iba a rechazar ya que era su primera experiencia y estos lugares pueden ser algo fuertes para aquellos que no están acostumbrados. Pero para nuestra sorpresa nos dijo que si, que estaba encantada de ir con nosotros, así que nos preparamos y la esperamos en la puerta del Spa.

Ya a Ceci la conocen por los anteriores relatos y por las fotos, preciosa de cara, unas tetas divinas y un culo que es de otro planeta. Yo me considero normal castaño no muy alto y un cuerpo cuidado debido al ejercicio y al deporte (no me siento cómodo halagándome así que lo dejaré para que lo cuente Ceci en otra historia). Alicia es rubia, muy linda de cara también y su fuerte es un muy buen culo como podrán ver en esta fotito que robamos en el sitio…


Con otra pareja delante de mi novio


Superados los nervios iniciales del desnudo en los vestuarios, nos colocamos las toallas para cubrirnos mínimamente y comenzamos un breve recorrido por el local. Si bien nosotros ya conocíamos el sitio, para Alicia era su primera vez y tenía mucha curiosidad. Nos enfocamos en el primer piso que es donde se encuentran las instalaciones típicas de un spa, piscinas, hidromasajes, duchas varias, saunas y también algunas habitaciones donde poder realizar masajes y algo más. En el segundo piso se encuentran habitaciones de todo tipo en donde las parejas pueden dar vida a sus fantasías más jugadas, pero en esta primera parte del relato todo ocurrió en la planta baja.
Era temprano y en el sitio no había casi gente, algunas parejas y hombres solos nos seguían con la mirada mientras recorríamos pero al ser tres no le estábamos prestando demasiada atención al resto de las personas.

Decidimos disfrutar un poco de las piscinas de agua caliente con hidromasaje ya que había una de ella que estaba completamente vacía. Colgamos nuestras toallas y al ir detrás de ellas pude apreciar esos culos divinos en todo su esplendor mientras se iban introduciendo lentamente en la piscina. En el vestuario no había querido mirar a Alicia para no ponerla nerviosa pero aquí era inevitable, caderas anchas, culo grande, piernas fuertes, pechos medianos y ese andar sexi típico de la mujer brasilera.
Quedamos recostados en una esquina de la piscina en donde no había mucha luz y los chorros eran muy fuertes generando una sensación muy relajante. Estuvimos hablando y riéndonos un buen rato mientras nuestros cuerpos se rozaban por debajo del agua continuamente. Alicia estaba en el medio de ambos pero no se la notaba nerviosa para nada, estaba llevando la situación como si tuviera años de experiencia.

En un momento, mitad sin querer y mitad queriendo, apoyé mi mano sobre su pierna, muy cerca de su ingle, notando un sobresalto de su parte ya que no lo esperaba y calentándome un montón por su reacción. Ella en ese momento estaba contando que una vez le había dado un beso a una chica pero que había sido algo muy rápido y solo como un juego. Aproveché el momento para decirle que si quería podía sacarse las ganas ahora con Ceci a lo que aceptó sin dudarlo. Muy lentamente fueron acercando sus bocas, Ceci la tenía sujeta por el cuello guiándola suavemente hasta que comenzaron a besarse muy despacio, probando cada parte de sus labios mientras que por debajo del agua Alicia ya había comenzado a tocarla. Era una escena espectacular, ellas desnudas y empapadas, con la mayor parte de su cuerpo bajo el agua, dándose un beso mientras se acariciaban todo el cuerpo.

Yo estaba disfrutando cuando me di cuenta que había otra pareja en la piscina y dos hombres solos que nos miraban con un morbo tremendo. Por lo que pude ver más adelante no es tan común ver tríos de dos mujeres y un hombre en este sector del spa, así que seguramente me estaban envidiando con todas sus ganas. En ese momento no queríamos incorporar a nadie más, era un momento nuestro y también queríamos “proteger” a nuestra invitada, así que dejé de mirarlos para no darles pie a acercarse.

Ya enfocado nuevamente comencé a tocarle la pierna mientras se besaban, cuando decidí pasar a apretarle directamente el culo pude notar como el beso de parte de Alicia se volvía más intenso, evidentemente la calentaba que la manoseara mientras se besaban.

Unos minutos después detuvieron el beso y Ceci se alejó unos metros con la excusa de aprovechar un chorro de agua que estaba allí. Era una clara señal de que ahora me tocaba a mi y no la podía desaprovechar, con una mano le moví el cabello del rostro y con la otra la traje hacia mi para que nuestros cuerpos quedaran en contacto completamente. En esta posición ella ya podía notar mi verga completamente parada contra su cuerpo y eso me encantaba. El hecho de estar bajo el agua y que nadie supiera lo que pasaba abajo me calentaba muchísimo y por lo que pude saber luego a Alicia le calentaba aún más.

Para marcar una diferencia con el beso anterior, intenté ser mucho más pasional y digamos que le partí la boca. Por suerte este tipo de beso también le gustó ya que al cabo de unos segundos me estaba haciendo una paja divina por abajo del agua. De reojo podía ver como Ceci se estaba tocando mientras nos miraba con ganas de participar. SI bien al principio yo tenía miedo que la situación me cohibiera un poco, la verdad era que tenía la verga más grande que nunca y Alicia me pajeaba de maravilla.

Ceci decidió sumarse y comenzamos a alternar besos mientras nos tocábamos todo el cuerpo, era espectacular y el resto de los huéspedes nos lo estaban agradeciendo. Ya podía notar, aún abajo del agua, lo mojada que estaba Alicia, ella tocaba a Ceci con una mano y con la otra no se desprendía de mi pija. La tenía apretada contra su estómago, completamente parada, era cuestión de apuntar un poquito más abajo y ya la cabeza le estaría pasando por toda su conchita.

Cuando pude besar a Ceci nos comimos la boca y le dije al oído que me estaban pajeando desde hacía rato. Esto la puso a mil y acercó su mano también a mi pija encontrándose con la mano de Alicia. Esta amagó con retirarla pero Ceci se lo impidió comenzando a pajearme las dos a la vez.

Yo: Me están matando hijas de puta
Ceci (en mi oído): no sabés las ganas que tengo de que te la garches toda.
Yo (también al oído): ah si? Y qué más?
Ceci: y que se acabe toda con tu pija.
Alicia: no vale hablar en secreto! Quiero saber que están diciendo jaja
Yo: que te voy a coger toda delante de Ceci.

Nos quedamos unos breves minutos más riéndonos de la situación pero ya se notaba que había que pasar al siguiente nivel. Como en la piscina no estaba permitido coger decidimos subir con la excusa de mostrarle el resto del local pero la realidad era que a la primera oportunidad íbamos a violarla hasta cansarnos.

En el piso superior había cuatro habitaciones; la primera era un cuarto enorme que tenía una cortina en lugar de puerta y en su interior no había ninguna luz, por lo que al cerrar la cortina no se podía ver absolutamente nada. La segunda era una habitación sin puerta pero con una cama muy grande seguramente para hacer tríos u orgías. Las otras dos eran habitaciones en donde se podía cerrar la puerta pero que tenían un detalle, estaban conectadas por pequeñas ventanas que permitían ver lo que estaban haciendo en la habitación de al lado. En fin, todo contribuía a generar un ambiente muy caliente y repleto de morbo.

Las dos habitaciones privadas estaban cerradas por lo que no podíamos entrar ahí y tampoco mirar lo que estaba pasando. La habitación de la cama enorme estaba ocupada por una pareja y no nos pintaba mucho meternos con ellos. Por lo tanto, por descarte, solo podíamos entrar a la habitación a oscuras.

Entramos los tres muy despacio ya que ni siquiera veíamos si había alguien en la habitación, al no sentir ningún ruido nos relajamos y comenzamos a besarnos nuevamente los tres. Había una especie de banco en uno de los laterales, al acercarnos decidí sentarme y dejarlas a ellas paradas besándose mientras yo metía mano por debajo de las toallas. Sus besos continuaban siendo muy delicados y cargados de sensualidad, esto a mí me encantaba y se podía notar claramente por la erección que tenía bajo la toalla.

Comencé a tocar el culo de Alicia y a bajar despacio la mano hasta llegar a su concha, la cual estaba empapada, era tanto el flujo que pude notar como le corrían las gotas por las piernas. Yo ya no podía más, necesitaba metérsela cuanto antes pero como no habíamos subido los preservativos, por el momento me iba a tener que conformar con los preliminares.

Ahora fue Ceci quien hizo que Alicia se sentara y le retiró su toalla para poder besarle las tetas mientras yo me arrodillaba quedando mi boca a la altura de su concha. Era imposible resistirse, comencé una comida de concha memorable, alternando entre mi lengua y mis dedos. Con mi dedicación, más el trabajo de Ceci con sus tetas y la calentura que llevábamos, Alicia se corrió en 5 minutos. Podía sentir el chapoteo de mis dedos y los gemidos reprimidos mientras su cuerpo se tensaba completamente.

Mientras Alicia se reponía del orgasmo, Cecilia decidió salir un momento a buscar los forros que habían quedado en los vestuarios. Apenas salió de la habitación nos empezamos a comer la boca con desesperación, el hecho de estar solos unos minutos nos generaba un morbo terrible y ella quería devolverme el favor. Se arrodilló y aunque no podía verle la cara ya que estaba todo oscuro, pude sentir esa boquita divina envolviéndome la verga. Sin lugar a dudas uno de los mejores talentos de Alicia es que es una experta en el sexo oral, una bestia (mientras lo recuerdo estoy teniendo una erección jaja). En 30 segundos me tenía a full, no podía tener la verga más dura. En eso llegó Cecilia;

Ceci: ah bueno, veo que no están perdiendo el tiempo.
Yo: no sabés como la chupa, increíble.
Alicia: es que me encanta la polla de Pablo (aunque es brasilera hace 10 años que vive en Madrid y habla como una española más).

Cecilia me dio el forro mientras Alicia intentaba tragársela toda sin conseguirlo pero matándome de placer. Cuando se dio cuenta de que ya estaba listo se sentó arriba mio y comenzó a pajearme bien pegado a su concha, me estaba empapando la verga y a ambos nos encantaba. Ceci se limitaba a besarle el cuello y la espalda pero se notaba que estaba deseando vernos coger. Fue ponerme el forro y en 5 segundos la tenía toda adentro, estaba tan mojada que aún con pija al mango le entró como por un tubo.

Alicia: ahhhh joder, como me gusta tu polla
Yo: estás divina, te voy a partir al medio
Alicia: si dame bien duro que me encanta

Mientras ella cabalgaba arriba mio yo le apretaba el orto y cada tanto me cruzaba con la mano de Ceci que intentaba meterle algún dedito en la cola. A la brasilera no parecía molestarle ya que cada vez gemía más y más. Para no acabarme decidí cambiar de posición y la acosté en el banco boca arriba, levanté sus piernas hasta mis hombros y se la fui metiendo centímetro a centímetro hasta sentir como mis huevos chocaban contra su cola. La cara de ella era un poema, ojitos cerrados, boca semi abierta y lo único que decía era “joder, joder joder”. No estábamos acostumbrados a la expresión esa por lo que nos encantaba y nos causaba gracias por partes iguales.

Ver a Ceci comiéndole las tetas y frotándole el clítoris mientras yo me la garchaba era demasiado, así que después de unos 10 minutos de bombeo comencé a acelerar las embestidas para intentar hacerla acabar antes de correrme. La abrí bien de piernas para que la sintiera toda y comencé a sacarla casi toda para después enterrársela hasta el fondo. En cada metida Alicia pegaba un grito mitad de dolor y mitad de placer, ya no aguantaba mi verga pero estaba a punto de correrse.

Alicia: ahhhhh ahhhhhh ahhhhh no pares no pares
Ceci: te vas a acabar toda con la verga de Pablo
Alicia: ahhhhhhhhhhhhhhhhhh me corro jodeeeeeeeeeeeeeeeer

Creo que estuve largando leche como por 20 segundos del orgasmo que tuve, fue tremendo. Me separé y ellas quedaron besándose un rato mientras Ceci acariciaba todo su cuerpo.

A partir de este momento toma la posta Cecilia ya que es la gran protagonista de lo que viene a continuación.


Luego del memorable polvo en el cuarto oscuro decidimos volver a las zonas de aguas calientes para relajarnos de nuevo, ya con otra complicidad entre los tres que se nos veía en la cara. Alicia estaba hecha una seda, si no se veía con nervios cuando entramos al spa ahora menos, eso fue lo que realmente me sorprendió de ella.

Nos metimos en una de las piscinas más grandes ya que las demás estaban con gente y pudimos disfrutar de un rato de privacidad entre los tres. Como el juego anterior este empezó igual, caricias por debajo del agua, risas y besos. Pablo estaba sentado contra la pared y Alicia recostado sobre el mirándome a mí, fue la posición perfecta para empezar a tocarla bajo el agua. Empecé comiéndole la boca a Alicia, me encantaban su forma de besar, la manera como me mordía y acariciaba me estaban volviendo loca, yo había quedado muy caliente de ver a Pablo cogérsela, escucharla gemir de esa forma y verlos como acababan adelante mío me dejaron al palo. Por lo que le agarre la mano de Alicia y se la llevé a mi concha para que empezara a masturbarme y que sintiera como me estaba mojando toda solo con sus besos.

Pablo también estaba muy entretenido detrás de Alicia, veía como le corría el pelo y le daba besos en todo el cuello, se notaba que le encantaba a ella ya que sus besos eran cada vez más intensos. El la abrazaba por detrás y le agarraba esas tetas divinas que tenía y yo no podía sacar mi mano de su concha, era una adicción. Se me dio por empezar a tocar a Pablo, no lo íbamos a dejar fuera del juego, pero para mi sorpresa no necesitaba mi ayuda para nada, tenía la pija más dura que nunca, se veía como le calentaba lo que estábamos haciendo y con la pija al mango se la pasaba por la cola de Alicia, estoy segura que se la metió un par de veces a pelo porque ella saltó de placer y me gemía en la boca.

He estado con varias mujeres antes, pero con Alicia sentí una conexión especial en ese cuarto oscuro, había mucha química entre nosotras, no podía dejar de besarla y tocarla, estaba tan entretenida con ella que me olvidé de Pablo en varios momentos. Para Alicia era la primera vez que estaba con una chica, por lo que me había decidido hacer de esa noche la mejor de todas para ella. A pesar de que estuve un buen rato mimándola, no había tenido la oportunidad de sentirla en mi boca y que me mojara toda la cara, por lo que ese fue mi objetivo de la noche y no me iba a ir de ese Spa sin lograrlo.

La poca privacidad que tuvimos la supimos aprovechar, tanto que no nos dimos cuenta que la piscina se había llenado de parejas y hombres solos disfrutando del nuevo show que teníamos para mostrar. Al ver toda esa gente mirándonos me puse más al palo ya que tengo un morbo bastante grande con que me miren. En la calentura del momento no pude dejar de mirar a una pareja que estaban al otro lado de la piscina. El agua no me dejaba apreciarlos bien, pero lo poco que pude ver de los dos me encantó, jóvenes, atractivos y con unos cuerpos espectaculares me devolvieron la mirada enseguida, sabía que Alicia no se iba a sentir cómoda si los invitaba y ella era lo más importante de la noche, por lo que dejé de provocarlos quedándome solo con la fantasía de cómo hubiera sido si me los cogía ahí mismo.

Alicia pidió para irnos a otro lado, por lo que buscamos un lugar más privado en el primer piso y encontramos una habitación libre. La misma estaba dividida en dos pequeñas habitaciones, tenían una cama grande cada una y se comunicaba con una puerta y una ventana a la altura de los colchones ideal para observar que estaba pasando adentro. Entramos a la habitación y Pablo cerró la puerta, pero no la trancó. Una vez dentro nos acostamos con Alicia y se me dio por abrir la ventana que comunicaba a la otra habitación, para el que quisiera pudiera observar que estaba pasando ahí dentro, mi morbo es más fuerte que yo jeje y no demoraron en llegar los observadores.

El primero que llegó se acostó en la cama bien cerca de la ventana que comunicaba a nuestra habitación, lo tenía tan cerca que podría sentir como respiraba, pero yo empecé a besar a Alicia sin darle bola al extraño que tenía al lado mío.

En la habitación empezamos a entrar en calor en seguida, yo estaba acostada boca arriba en la cama, Alicia arriba mío besándome y Pablo parado en el borde de la cama rozándole la cola con la pija. Alicia me estaba besando y me amasaba las tetas cuando me di cuenta que había una mano más acariciándome. El extraño de la ventana no se había conformado solo con mirar y empezó, muy despacio a tocarme. Alicia no podía creer lo que estaba pasando y me miraba para ver si yo entendía que esa mano no era de ella. Me incorporé un poco para besarla y no rechacé al extraño, pero tampoco lo miré, al final de todo me estaba calentando mucho la situación.

Acosté a Alicia del otro lado, lejos del extraño para que no la tocara, ya que veía como se sentía incómoda ante ese nuevo participante, dejando mi espalda hacia el para que pueda tocarla a gusto. Con Alicia boca arriba pude aprovechar para mimarla un poco más, empecé jugando con mi lengua acercándome a sus labios pero apenas tocándolos, vi cómo le estaba excitando el juego porque empezó a levantar la cabeza en busca de que le comiera la boca, sin darle ese beso que buscaba seguí jugando, pero ahora con sus pezones apenas tocándolos con la punta de mi lengua, podría ver que estaba cada vez más caliente, pidiéndome por favor que le comiera las tetas, pero no le hice caso.

Pablo empezó a masturbarla y Alicia empezó a desesperarse, me agarró la cabeza con todas sus fuerzas me dirigió la boca hacia sus tetas y me la apretó contra su pezón, yo que ya no podría más le regalé una muy buena comida de tetas mordiéndole los pezones y apretándole las gomas mientras sentía como gemía cada vez más alto.

Estábamos tan metidos en nuestro juego que no nos dimos cuenta que la puerta de la habitación estaba abierta y se habían metido varias personas a mirar la escena que estábamos dando. Ninguno de los tres podíamos creer lo que estaba pasando, pero estábamos tan calientes que no pudimos parar. lo que estábamos haciendo.

Alicia ya no podía más y le pidió a Pablo que se la cogiera bien duro, Pablo obedeciendo se puso el forro, se acostó en la cama y Alicia se subió arriba de él. Era una posición espectacular tanto para ellos como para mí, me estaba mojando solo de ver como la pija de mi novio entraba y salía de la concha de Alicia, estaba muy caliente con esa escena, la gente de la habitación mirando y el extraño de la ventana que no dejaba de tocarme me generaba un morbo que no hay había experimentado antes.

Con Pablo y Alicia entretenidos, empecé mirar con más detalle a las personas que entraron a esa habitación sin invitación y me di cuenta que era una pareja, la misma pareja con la que había fantaseado en la piscina, a pesar de que estaban con una toalla tapando sus cuerpos podía verlos mejor. Los dos eran espectaculares, él era alto, musculoso y sospechaba que tener una pija grande ya que marcaba la toalla, ella morocha y flaquita, pero con un cuerpo bien marcado, sus tetas eran medianas pero bien paradas, eran una belleza los dos.

Me estaba preguntando que estaba buscando en esa habitación cuando empezaron a tocar a Alicia y ahí me di cuenta, no querían a una pareja, ellos estaban buscando a una chica sola. Cuando Alicia se dio cuenta de que esta pareja la estaba tocando, muy tímidamente les dijo que no quería nada, ellos entendieron enseguida y como no buscaban una pareja se fueron de la habitación. Vi cómo se estaban yendo de la habitación y como un rayo me levanté de la cama lo más rápido que pude y la agarre la mano a ella invitándolos a quedarse, sorprendidos por mi propuesta sonrieron y aceptaron sin dudarlo.

Al instante me di cuenta lo que había hecho, era la perfecta oportunidad para estar con ellos, mi calentura pudo más que mi razón pero también era verdad que no había hablado con mi novio y no tenía su consentimiento. A pesar de su cara de sorpresa cuando salí corriendo a buscarlos, su sonrisa cómplice fue suficiente para mí para poder cogérmelos en ese momento.

Senté a la chica en el borde de la cama, agarré su cara con una mano y empecé a besarla mientras que le desprendía la toalla del cuerpo con la otra mano. Besaba bien pero yo me había endulzado con los besos de Alicia y la hacían imbatible, la tenía en frente mío mirando con Pablo lo que estaba a punto de pasar y eso fue todo lo que necesitaba para dejarme más caliente. El chico de la pareja también estaba mirando, pero no se animaba a tocarme, por lo que lo sujeté y le coloque su mano en mi culo y entendió perfectamente que era lo que quería.

Empezó a masajearme y sujetarme el culo, pasaba su mano por mi concha y la sacaba toda mojada por lo caliente que estaba. La chica se paró, me sentó en su lugar y se apartó de nosotros para convertirse en una nueva espectadora. Él se acercó a mí, tenía su pija a la altura de mi cara, pero no podía verla porque él seguí con la toalla puesta. No dudé un segundo y le agarré la toalla tirándola al suelo y pude comprobar mi sospecha, tenía una pija divina, larga, ancha y bien dura. No pude controlarme y me metí su pija en la boca y empecé a comérsela toda, casi que no me entraba de lo grande que la tenía. Sujetó mí pelo y seguía el movimiento de mi cabeza con su mano, sentía como me estaba mojando la boca y la lengua de lo caliente que estaba él.

Le pedí por favor que me cogiera porque estaba a punto de explotar de la calentura, se colocó el forro, me dio vuelta en la cama dejándome en cuatro, arqueé mi espalda para dejar mi culo más parado y me la clavó hasta el fondo, no pude contener el placer que sentí en ese momento y se me escapó un gemido tan fuerte que todo el spa lo escuchó. Empezó a cogerme despacio pero bien profundo, podía sentir como su pija entraba todo en mi concha y salía toda mojada por mis jugos.

La chica seguía mirándonos, pero ahora había empezado a masturbarse, él se colocaba en posiciones para que ella pudiera ver bien, entendí en ese momento porque estaban buscando a una tercera, no era en busca de una experiencia lésbica, era porque a ella le excitaba mucho ver como su novio se cogía a otra mina, como daba placer a otra persona y yo lo estaba disfrutando al máximo.

La escena y mis gemidos fueron un motivador para Pablo, que ya tenía la pija al mango de nuevo con solo ver lo que me estaba haciendo el flaco. Alicia no demoró en darse cuenta que le excitaba mucho lo que estaba viendo y empezó a comerle la pija a mi novio mientras me cogían a mí por detrás.

No supe que pasó luego con ellos porque el tipo me cambió de posición, acostándome boca arriba en la cama para que su novia pudiera ver mejor como su pija entraba hasta el fondo de mi concha. Ella seguía masturbándose frente a nosotros y se podía escuchar como sus dedos estaba chapoteando de lo mojada que estaba, él me estaba dando muy duro y eso me encantaba, empecé a masturbarme el clítoris porque ya no aguantaba más, venia caliente de hace rato y quería acabarme en ese momento, y así fue.

Mis gemidos cada vez eran más fuertes y profundos, él se dio cuenta que estaba por venirme y aumentó la frecuencia de sus embustidas. Logré alcanzar un orgasmo que me dejo sin respiración por un momento, me contrajo todo el cuerpo y podía sentir como mi concha le apretaba toda la pija al él y su cara le delataba que le estaba gustando mucho. Cuando volví a respirar pude gritar, un grito de placer que me relajó todo el cuerpo dejándome con espasmos tirada en la cama. La chica se había acabado también con mi orgasmo, había mojado toda la cama en donde estaba y tenía las piernas temblando que delataban el placer que acababa de tener.

A pesar de que las dos habíamos acabado, el seguía con la pija dura y re caliente, me la saco de mi concha húmeda y me preguntó:

Él: ¿Dónde querés que te de toda la lechita?
Yo: mmmm que rico, quiero ver como la llenas de leche a ella que me calienta mucho.
Él: Uy me encanta, amor acóstate al lado mío.

Ella se acostó al lado de nosotros, le saqué el forro a él y empecé a comerle toda la pija dejándosela bien mojada, el me agarraba la cabeza y esta vez no seguía mi movimiento, él me dirigía la cabeza clavándose la pija bien adentro de mi boca sin dejarme respirar y gimiendo cada vez más fuerte.

Empecé a sentir como me estaba mojando la boca y volvió a clavarse la pija bien adentro de mi boca un par de veces más, su cuerpo empezó a temblar y me apartó porque estaba a punto de explotar. Al instante empezó a eyacular, y sus gemidos se convirtieron en gritos y su novia debajo esperando toda la leche fue una escena divina.

Empezamos a reírnos y comencé a darme cuenta todo lo que había pasado, pude ver a Pablo y Alicia riéndose también con nosotros, hasta el extraño de la ventana que nunca se había ido. Me levanté a buscar un pañuelo para ella por estaba literalmente bañada en leche, los saludé a ambos y nos fuimos los tres riéndonos a las duchas del spa todavía sin creer lo que había pasado.
Se nos había hecho super tarde y Alicia se tenía que ir, así que fuimos a cambiarnos a los vestuarios.

Yo: Bueno Alicia como pasaste en tu primera experiencia?
Alicia: Woow no puedo creerlo todavía, pase espectacular, un poco nerviosa al principio, pero me encantó. No entiendo cómo te animaste a hacer eso todavía jee
Yo: Si, yo no entiendo tampoco jaja
Pablo: Si te gusto tanto tenemos que volver a repetirlo
Alicia: Claro!! Ahora mi vida sexual va a hacer muy aburrida comparado con esto jajaja

Nos despedimos en la puerta del Spa y cada uno se fue por su camino. En ese momento me di cuenta que no pude lograr el objetivo que me había propuesto con Alicia, que lo logré hacer pero eso quedará para otra historia.

10 comentarios - Con otra pareja delante de mi novio

cappos
buena experiencia amigo, y que lindas mujeres, muy bueno el relato +10
diente2011
Muy bueno chicos!!!! Muy excitante. Felicitaciones, gracias por compartir y espero más relatos. Besos
Ricardohot43
Esta bueno el relato pero a mi gusto es demasiado largo. Igualmente me gustó. Saludos
Pervberto
Como mi María, ¡no me quejo de que algo sea muy largo si es bueno! Muy caliente cuento, gracias por compartir esa rica experiencia.
elquebuca
Excelente, al re-palo otra vez....+10
dantraloco
No me creo que en Madrid haya más "posibilidades" que en Montevideo. ¿O quizás estoy equivocado?
Buen relato
madmen86
Vivimos en Alemania y vamos a MAD y BCN muy seguido porque nos encanta.
Me gustaría mucho empezar a tener un contacto con ustedes su es que aún están en Europa porque tenemos la misma mente podrida y morbosa que ustedes.