Mi esposita y el dolor de cabeza

9:00 pm... repica el teléfono, a esa hora es casi imposible que sea otra persona, saluda con tono de cansancio y me dice que el dolor de cabeza es insoportable, ya no hay nada que pueda decirle que la alivie salvo que busque algo en la clínica y lo tome para que aguante las horas que le quedan de guardia, se despide sin mucha emoción y me quedo pensativo, conociendo la única cura para sus migrañas, sexo...
10:06, estoy a punto de apagar las luces y irme a dormir cuando suena de nuevo el teléfono, es ella ahora con otro tono de voz, me dice que ya se le empieza a aliviar su cabeza... que pidió un café y está esperando que que lo suban, de inmediato, sin darme tiempo a preguntar me dice que me quede tranquilo que su amigo de la cafetería es muy saludable, limpio y además no puede quedarse mucho rato para no dejar el cafetín solo.
Se le nota la emoción, esta excitada. Termina diciéndome: "tengo unas ganas horribles de comérselo, se me hace agua la boca de pensarlo, solo quiero su lechita para quitarme este malestar... pero no te pongas bravo solo te quiero a ti, tu eres mi rey"
De inmediato se despide, me lanza un beso y tranca. Es de imaginar que ocurrió esa noche, pero se los contaré luego.