cuentito corto soft

bueno esto lo escribi hace mucho en un momento en que estaba muy aburrido. como nunca habia escrito nada de este estilo probe a ver que onda.

y como nunca colabore con nada aca, este es mi humilde aporte.


Mmm que ganas de estar en otro lado. Pero bueno al menos hoy salgo temprano de clase. Lastima el feriado de hoy me hubiera gustado ver al profesor de química.

Pero bueno la casa solo para mí por toda la tarde, algo bueno saldrá.

Realmente es increíble lo aburrida que es esta vieja, jamás debe haber tenido otra alegría mas que la geografía.

Que aburrida que estoy quiero ir a mi casa, tirarme en la cama, ver tele, comer algo, y…divertirme sola un rato.

Yo aca y mi casa sola, yo aca y el baño solo por horas, yo aca y mi cama sola. La intimidad de mi pieza, eso quiero, eso necesito, no saber la profundidad aproximada del ganges, ni la cantidad de habitantes de la india. Lo único oriental que me interesa son los masajes y el tantra.

Ya solo faltan 15 minutos para mi libertad, para mi intimidad, para sacarme esta ropa que me aprisionan, y encaminarme hacia el sueño.

10 minutos, por dios 10 eternos minutos. Y el reloj va lento, demasiado lento para mi gusto. La profesora habla, pregunta, en fin molesta. Y yo sigo aca si poder irme, escuchando estupideces de un rio, y de un lugar que esta tan lejos que no logro ni imaginar.

3 minutos tan solo tres minutos.

Dos.

Uno.

Libertad!!!



Ahhhhhh.!!!! Habrá placer más grande que salir de esta prisión? . Ahora es el momento en que huyo, la ansiedad mata, las ganas de alejarme de este horrible lugar, y la necesidad de estar ya en mi casa, camino en forma automática movida solo por el deseo, cancele todo no hay amigas celular o tele. Sube mi temperatura, ya no sé si es por el paso apresurado o por mis ganas. Sea como sea mi paso es apresurado, y decidido, no veo vidrieras, veo gente, ni símbolos, cruzo la avenida, paso enfrente de la iglesia y en forma descuidada, me persigno, mi mente se desvía un segundo y pienso no esta mal lo que acabo de hacer?. Sufro un p equeño ataque de culpa, disminuyo mi paso, vuelvo a pensar.

Busco inmediato un inmediato consuelo para no sentir culpa y recuerdo al padre grassi y al padre pedro que en cada confesión, que me hace hace preguntas demasiados privadas para mi gusto, y creo ver en el un malicioso brillo en sus ojos mientras lo hace. Tal vez es el mismo brillo que tengo ahora en mis ojos, mi paso vuelve a ser veloz, ya no solo lo haré sin culpa sino que también como parte de una venganza contra ellos.

Ya no es el reloj lo que me pone ansiosa sino las cuadas que faltan. Solo faltan cuatro, me desconecto del mundo, tres, mi cerebro solo sirve para caminar, dos, imagino la privacidad, una, esto ya no es un paso apresurado y elegante, esta mas cerca de ser una carrera desesperada.

Llegue!!!, y todo mi deseo es frenado por una dulce, pero en este momento inoportuna voz que me dice: “hola hija llegaste temprano”.

Si. Respondo. Olvide que el feriado también es para quienes trabajan.

Ocultando mi cara de frustración le digo: “ vas a salir que estas tan arreglada “ esperando con toda mi esperanza un si.

Bien, mi mama se ira pero dentro de media. El tiempo y la distancia no solo matan el la pasión sino también el deseo.

Solo me queda ir a bañarme mas tranquila de lo que yo esperaba. Entro en el baño y mi cuerpo se queja y me ordena que me entregue pero mi mama esta ahí afuera. Me veo en el espejo, y no solo me gusto sino que también me deseo. mis pezones endurecidos al salir de la ducha y encontrar el frió me piden una caricia, se las doy y su respuesta es ya conocida quieren mas, pero mi mama esta afuera, no puedo. Aun mas frustrada que antes me dirijo a mi habitación, y mientras me desplomo sobre mi cama escucho que me dicen: “chau mi amor vuelvo con papa a la noche”.

Pero mi desesperación, murió en el baño. Así que aburrida me acuesto, entonces se me ocurre una travesura, es que hace tanto tiempo que no duermo desnuda.

Tirada en mi cama empiezo a girar y mirar mi habitación, la estantería a la derecha con todos mis ositos, suaves ositos de peluche, giro, mis libros de cuentos infantiles, y escondidos entre ellos mis nuevos cuentos, giro, mi armario con ropa que ya no quiero, giro, veo mi mesita de luz, mi diario, giro, y me doy cuenta que aun soy una niña pero que escondo una mujer, giro, giro y giro, dentro de mi cama. Ya no giro para ver sino para sentir el roce de las sabanas sobre mi cuerpo, es como una sola y enorme caricia a lo largo de todo mi cuerpo, empiezo a sentir esa misma sensación que cuando Salí del colegio. Ya no puedo solo girar, me requiero, me llamo y me necesito, y empiezo a quererme con mi manos.

Acaricio mis pechos en forma circular, acercándome cada vez mas hasta llegar a mis pezones. Y vuelvo a comenzar. Necesito mas, me deseo mas, llevo mis dedos a mi boca y los humedezco en mis besos para poder así besar mi senos.

Ya no giro me revuelco quiero mas, me pongo boca abajo, me detengo trato de resistirme y comienzo a apretar mis piernas una y otra y otra vez, no lo resisto necesito mas aun. De golpe veo que ya no controlo todos mis movimientos y me descubro boca arriba jadeando, y obligada por una voluntad superior a la mia me llevo una de mis manos a mi entrepierna. Primero trato de contenerme y solo acariciarme suavemente por afuera. Pero necesito mas para poder calmarme, mi mano izquierda abandona mis pechos y se dirige a aplacar mis deseos. Mientras mi mano izquierda se sumerge en las profundidades del placer, mi derecha se juega dibujando ochos sobre mi clítoris.

Ya no giro, ya no me revuelco, sino que vibro y me estremezco sobre mi cama, escucho jadeos de placer, trato de detenerme para saber quien esta cerca mío, pero descubro que esos sonidos tan ajenos a mi en realidad salen solos de mi garganta, me sorprenden me gustan y trato de provocarlos mas fuertes ayudándome de mis manos, ya no lo puedo soportar siento que algo estalla dentro de mi. Esos ruidos aumentan, yo casi salto de placer sobre mi cama.

Hasta que de pronto desvanezco de placer ya no me muevo solo siento, respiro, y voy descubriendo como lentamente mi el placer abandona el control de mi cuerpo y yo soy quien se mueve por si misma, vuelvo a ser yo quien controlo mi cuerpo, estoy agotada, me descubro toda transpirada, feliz, plena, me siento dueña de mi misma.

Soy yo quien se controla, quien se disfruta, es un placer hermosamente egoísta, un placer tan mío, que no quiero compartir.

Con un enorme cansancio, pero satisfecha de mi misma me dirijo al baño, debo volver a ser niña para cuando vuelvan mis viejos. Así ellos le podrán decir buenas noches a su hijita, y yo, una niña, dormiré para ir al cole mañana, como una niña buena.

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6 comentarios - cuentito corto soft

Ruperts
No comento por lo general, porqué no suelo loguear. pero realmente te mereces los puntos y una felicitación, muy buen relato. 😉
gatone24
bien che. muy bueno 😀
titacho
Buenisimo!, me parece medio raro que vos siendo vago te haya salido una cosa asi. En fin, te felicito y muy bueno el cuento