Confesiones


Siempre, que recuerde tuve problemas para usar el baño de otros.
Muchos me preguntan puntualmente porque sufro problemas escatológicos. Sinceramente nunca quise contar el verdadero motivo de mi pesar, pero creo que ya es momento de hacerlo.
Ahi va . . . . ( poné play plis )


link: https://youtu.be/GbS2nCX-MW4



Eran las ocho de la mañana estaba en el centro, iba caminando a los tiros (llevaba prisa).

El semáforo da verde a los autos. Espero. Miro a mi costado y me encuentro con . . . Betty . Llevaba varios años sin verla, dos precisamente. La observo y me doy cuenta que todavía está buena, conserva el físico de una piba. Mejor dicho, yo estoy hecho mierda, ella tiene el cuerpo que a los veinticuatro corresponde.

La saludo. Nos saludamos. Fingimos alegría, gusto, entusiasmo y blablá…

– ¿Desayunaste? – Le pregunto sin pensar. Como siempre, nunca pienso lo que digo por eso me cagan a palos las mujeres.

– No – me dice sonriendo. En realidad primero me sonríe y después me dice no.

– Te invito – le digo.

– Vamos a casa, es ahí enfrente , salí a comprar café justamente –me dice.

Llegamos. Abre la puerta, clavo la mirada en su cintura y se da cuenta. Vuelve a sonreír. Entramos. Tenía un pantalón negro, esos que se llaman engomados, creo. Parecía hecho a medida.

Desayuno light, café cargado en jarra. Ella, yo.

La charla como siempre: “¿Qué es de tu vida?” y otras preguntas boludas…

A medio café empezó a llorar. Algo dijo sobre el novio, que no lo aguanta, que es un boludo. Por un momento creí que el novio era yo.

Su mano derecha jugaba con el “cutucuchillo” para untar las mermeladas, la otra pretendía mantener el delineado de sus ojos.

La consuelo, lanzo dos o tres frases ensayadas para la ocasión.

Me agradece, intenta reírse y el llanto le brota aún más intenso.

– ¡La puta madre! – pensé mirándole las pestañas. No sé si me gustan más los ojos o el tremendo paragolpes que lleva atrás.

Después, boludo, como siempre, cometo la osadía de acariciar la mano que tenía sobre el “cutucuchillo”.

Con un revés de muñeca, ella da vuelta su mano, queda la mía abajo de la suya y me la aprieta como queriendo aferrarse a lo imposible.

– ¿Vos sabías que siempre me gustaste? – se confiesa y me da cagazo.

Sí, amigos, me da cagazo, porque entre mis cualidades están el cagazo y la pelotudez como cimiento. No digo nada.
En realidad me digo aguantá Almandoz , no está bien ir al baño ahora . El tema es que burbujas de estiércol estallaban en mi estómago mientras se gestaban heces de tamaño pantagruélico.
Por un instante mi esfínter casi se vio abatido de las ganas de expulsar.
_ Betty . . . Betty . . . . tenés un baño ?
_Si allá ; me dijo señalando  . . . allá .

Me dirigí derechito al baño. De pronto llegué a la puerta y vi que era una de esas puertas corredizas, no como la de mi casa. La abro pensando que luego habría otra puerta “de verdad” y nada . . . era la única puerta. Entro y la cierro… cuando de repente escucho… ¡la puta madre se escuchaba todo ! Ahí estaba la Betty con sus gemiditos y preguntándome ; " Estás bien ? " Sabía que venía ruidosa la cosa, así que pensé “que vergüenza que me escuche , me la voy a bancar”. Esperé un ratito y salí. La Betty  estaba esperándome con el pocillo de café y una mirada de mascotita meláncolica que solo ella podía tener .

Al cabo de un rato empezamos a joder, yo le dije que yo también, mintiéndole como a un niño. Entonces empezamos a reírnos, a recordar  todas esas cosas muy copadas que hacíamos de chicos, cuando de repente un pedo me hace aplaudir los cachetes del poto… fue entonces cuando comenzó la pesadilla . . . y la seguidilla de pesadillas que hasta el día de hoy me acompañan a diario.

Como una máquina que excava y encuentra un pozo de agua, mojando todo a su alrededor y a su paso, fue la sensación que en ese momento sentí en mi trasero. Sentía como una pincelada de óleo negruzco, de barro pegajoso en toda la zona aledaña al agujero de salida. Agua, humedad, resbalones de alquitrán… todo eso sentí.

Mi cara fue de terror total y procedí a correr hacia el excusado. Entré a toda velocidad, me senté en el inodoro y ahí pude ver la magnitud del desastre. No solamente había un bulto inmundo en mis boxer de Superman , sino que el mismo no había tenido la capacidad de contener y había desbordado de cochinada hacia todos lados, embarrándome desde mis inflamados hasta ese momento testículos hasta mis pequeños y lampiños gemelos. De pronto atiné a limpiar con el papel higiénico el desastre y no solo me lo terminé sin lograr nada productivo, sino que ahora tenía una montaña de papel cagado que esconder. Para colmo ¿¡con que me limpiaba el poto!?

Me pasé al bidet, lo encendí y vi como la incolora agua se transforma en un líquido horroroso, como de pantano antiguo. Vi como sobrantes de materia se desplazan a diestra y siniestra con el poderoso chorrito, cuando me levanté observé todo tapado… ¿¡con que me seco el ortoooo !? Pensé.

De repente esperé un poco sentado y cuando terminó de caer el grueso del agua pude ver que había una toalla de manos . . . blanca. La patinada que le dejé fue como la frenada de una Kawasaki Ninja de ruedas marrones en la nieve. Incluso tenía textura y viscosidad, obviamente olor. En bolas intenté limpiar la blanca toalla en el lavamanos, esparciendo la suciedad y dejando una mancha tamaño culo de viejo en la misma… ¡y aún tenía en culo mojado!

Entonces me saqué la remera de Megadeth y me sequé de a golpecitos, pretendiendo no mojarla. Rápidamente miré la remera y vi como efectivamente me terminé de limpiar todo, ya que los últimos restos de caca quedaron en ella. ¡Pobre Megadeth ! Y  si a lo malo, le sumamos lo peor, se acercó la Betty a la puerta para preguntarme si estaba bien ¡¿había escuchado los ruidos ?!

– Almandoz ¿estas bien?

– Si Betty . . . me duele un poquito la panza nomás.

– ¿Necesitas algo? ¿Papel, toalla, algo?

– No Betty, acá hay, ya salgo.

– Si, no te hagas drama, hace tranquilo. Avisame cualquier cosa.

Yo estaba desesperado, Superman estaba marrón, mis pantalones de yogin completamente embarrados, la remera de Megadeth tenía espolvoreadas de caca y la toalla de la Betty parecía un dálmata, había una montaña de papel cagado al lado del inodoro y el bidet aún tenía una “piletita” de agua, ya que mis restos obstruían el drenaje . . . ¡Dios matame por el amor del Diablo!

Y de pronto… sentí la voz de ella . . . esa vocecita que tanto me calentaba, esa que extrañaba en mis tardes fantasiosas. Esa que me hacía sentir el hijo de puta más groso del mundo . . . . la voz de Betty .

– Almandoz ¿estas bien? ¿ Seguro ? ¿Qué pasa negri ?

– Nada bichu . . . estemmm.
Betty no era boluda. De pronto abrió la puerta y vio el desastre. En mi descuido, además, había dejado caca en el inodoro, caca en el piso, la toalla apoyada en el lavamanos, ensuciando todo. Estaba todo mojado, cagado, oloroso y espantoso. Entonces  me dijo . . .

– ¡Hijo de puta ! ¡Mirá el desastre que has hecho!…

Y apareció la Betty. Me hice para atrás y agarré la cortina del baño, tapando mis partes y de paso . . . ensuciándola con un poquitito de caca que me quedaba en la gamba. Entre gritos, cagadas a pedos  y una incertidumbre mía que no sabía si llorar, si reírme, si ayudar, si enojarme, si seguirme cagando (aún tenía ganas), si patalear . . . en fin. Pescó el duchador y depués de surtirme a manguerazos abrió la canilla y empezó a manguerearme ! Entonces, mis gritos, entremezclados con risas, llamaron la atención de todos los vecinos de la Betty , los cuales desfilaron uno a uno por el pasillo de atrás de la puerta para observar el espectáculo. Apenas se dio cuenta la Betty, cerro la puerta corrediza del orto y yo me rajé saltándo por la ventana del baño enfundado en una salida de baño que se salvó del desastre corriendo por la calle.

Y así fue, colorín colorado , que entra llantos, risas y vergüenza, nunca más puede ir a cagar en baño ajeno tranquilo por el resto de mi vida.
[/b][/align][/size]

GRACIAS POR COMPARTIR[/COLOR][/size]


Confesiones

7 comentarios - Confesiones

Pervberto +1
A veces, hay cosas aún más urgentes que el sexo...
elledany +1
Cuado madre naturaleza llama . . . llama 😁
OnerlaJ +1
Me hiciste recontracagar de risa....
elledany
Me alegro capo 👍
grancucon +1
¡¡¡ Pura mierada su relato....Me hizo cagar de risa, ya hay varias historias, respecto a esas cagaderas indiscretas ....Me alegró la tarde capo...Gracias por compartir...!!!!...Interesante la Venegas...
elledany +1
A la mierda ! Que comentario el suyo . . . .jajajajaaaaaa !
Los uruguayos de No te va a Gustar ya se habían anotado un golazo con el tema y con Julieta, a la que parece no le afecta el tema del tiempo , se mejoró lo imposible.
Saludos . . . .
Heychimbon2 +1
Muy bueno man
elledany +1
Se agradece capo . . . .
Lady_GodivaII +1
ah ajjajajajja
elledany +1
Ojo . . . .no haga fuerza, sé lo que le digo . . . .