Continuación de http://www.poringa.net/posts/relatos/3493094/Mi-Putita-Culona-Parte-I.html , para comprender de mejor manera el siguiente relato, los invito a leer y disfrutar el post del link.
Las fotos desde la ducha que quedaron pendientes del post anterior...
Con la última imagen que me había enviado desde el baño dándome vueltas en la cabeza, llegué al hotel.
Eran las 20:00, entré al lobby, y sin dudarlo fui al ascensor, el recepcionista me frenó, me pidió nombre y habitación a la que iba. Me puse nervioso, aun así, respondí y me dijo: usted es “el pendejito"?, yo quedé sorprendido y solo atiné a asentir, me pasó una tarjeta, me dijo que era la llave de la habitación y que la señorita me estaba esperando.
¡Ella tenía todo preparado! Mi putita culona, me estaba esperando.
Subí corriendo por las escaleras, estaba en el décimo piso, pero no tenía tiempo para esperar el ascensor. Busqué la habitación, “1012” era el número. Al encontrarla, entré sin tocar, como me habían dicho. Al entrar la encontré con la colita empinada en la cama, luciendo mi color preferido. Además, había una bandeja con espumante en hielo y una tabla de cosas para comer.
Me dijo: “Por fin llegaste “pendejito”, ¿te gusta cómo te estoy esperando?”
Respondí: ““Putita Culona” me matas en esa pose” mientras mi miembro volvía a la erección, le dije “te traje unos regalitos”.
Ella se dio vuelta, se puso de pie y comenzó a besarme, un largo, mojado y apretado beso, nuestras lenguas entraron a fondo en nuestras bocas, yo la acaricié, pero ella me frenó y recibió sus regalos.
Me dijo “ponte cómodo , me voy a cambiar”.
Necesitaba contemplarla un rato más, le pedí que se quedara un tiempo más, asique sentado en la cama la miré, tratando de grabar esa imagen en mi mente. La retuve un par de minutos y la dejé ir...
Se fue a cambiar.
Yo me saqué la ropa y quedé en boxers.
Al salir del baño, estaba usando la lencería blanca que le había comprado. No podía verse más exquisita, al segundo mi erección no perdonaba.
Ella se acercó lentamente, como en un baile, una danza de la máxima sensualidad, yo estaba sentado en un sillón y ella se sentó en mis faldas, dio vuelta su cabeza y mientras movía su cola entangada sobre mi boxer, me besaba.
Estaba en el cielo, el placer era único.
La tomé en mis brazos y la llevé hacia la cama, le abrí las piernas, le dije: “¡Que ganas tenía de estar contigo, de hacerte mía, todo lo que me decías, me enviabas, no podía aguantar!”
Me sumergí en ella. Deslizar mi lengua por ahí era una delicia, introduciendo mis dedos con suavidad y luego con fiereza, era una locura, estaba dejando la ropa interior nueva empapada y gemía de tal manera que yo no podía parar, me empujaba la cabeza, para que ejerciera más presión con mi lengua y yo le daba gustoso.
Me decía: “métemela Pendejito ¡quiero sentirte dentro de mi!”
Yo le pedí que me chupara primero, a lo cual ella asintió con la mirada. Me paré, ella se agachó y comenzó.... Me amagó, me empezó a dar besos en las piernas, un beso acá, otro allá... Me pasó un rápido lengüetazo por abajo, otro por el lateral y me volvió a amagar con que se la metía en la boca... me suspiró sobre él y sentí aire caliente, no podía más, necesitaba que se la meta...
De repente, con la boca super húmeda, la metió hasta el fondo, se quedó quieta, y empiezo a sentir su lengua de un lado para el otro, estaba loca...
Comencé a decirle que siguiera y a gemir, era delicioso…
Luego de unos minutos, no aguantábamos más, me dijo que pasásemos a lo siguiente, que ya no podía más, se humedecía cada vez más, se puso de rodillas y sus manos sobre sus nalgas y así las separó para mi facilidad, pasé mi lengua por ahi para sentir su sabor y humedad, le saqué el sostén y sus pechos fueron libres, la desaté de su ropa interior, observé su bello ano y lo lamí también, me preparé e introduje mi miembro, estaba tan mojada que se desplazaba sin control, hasta el fondo. Era increíble, exquisito. Comencé a bombear con más velocidad y fuerza, mientras mis manos figuraban una en un pecho y la otra agarrando una nalga. Repito, estaba en el paraíso.
Seguí así por largos minutos, ella gemía ahogada, sentía cada milímetro. Al menos tres veces, se puso a gritar desesperada, con su entrepierna humedecida en exceso, para luego caer en un relajo total, pero yo seguía ahí, hasta que cuando ya no pude más, salí de su interior, me quité el condón y mientras yo hacía eso, en cosa de segundos ella se bajaba de la cama y se agachaba. Así desbordé de placer en su rostro, boca y un poco sobre sus tetas. Tomó lo que tenía en el rostro y se lo metió en la boca.
Fue hermoso. Después de eso, nos acostamos sobre la cama. Y conversamos de lo rico que fue, de cuanto nos deseábamos, para luego dormirnos abrazados.
Nosotros queremos volver a juntarnos, ustedes querrán más?
Las gracias nuevamente a @Parejita1880 !!
Su ultimo post para que la pasen a ver... http://www.poringa.net/posts/imagenes/3501427/Ella-rebelde-YO-comparto.html
Como saben, los puntos y comentarios son muy bien recibidos y se agradecen!
Las fotos desde la ducha que quedaron pendientes del post anterior...
Con la última imagen que me había enviado desde el baño dándome vueltas en la cabeza, llegué al hotel.
Eran las 20:00, entré al lobby, y sin dudarlo fui al ascensor, el recepcionista me frenó, me pidió nombre y habitación a la que iba. Me puse nervioso, aun así, respondí y me dijo: usted es “el pendejito"?, yo quedé sorprendido y solo atiné a asentir, me pasó una tarjeta, me dijo que era la llave de la habitación y que la señorita me estaba esperando.
¡Ella tenía todo preparado! Mi putita culona, me estaba esperando.
Subí corriendo por las escaleras, estaba en el décimo piso, pero no tenía tiempo para esperar el ascensor. Busqué la habitación, “1012” era el número. Al encontrarla, entré sin tocar, como me habían dicho. Al entrar la encontré con la colita empinada en la cama, luciendo mi color preferido. Además, había una bandeja con espumante en hielo y una tabla de cosas para comer.
Me dijo: “Por fin llegaste “pendejito”, ¿te gusta cómo te estoy esperando?”
Respondí: ““Putita Culona” me matas en esa pose” mientras mi miembro volvía a la erección, le dije “te traje unos regalitos”.
Ella se dio vuelta, se puso de pie y comenzó a besarme, un largo, mojado y apretado beso, nuestras lenguas entraron a fondo en nuestras bocas, yo la acaricié, pero ella me frenó y recibió sus regalos.
Me dijo “ponte cómodo , me voy a cambiar”.
Necesitaba contemplarla un rato más, le pedí que se quedara un tiempo más, asique sentado en la cama la miré, tratando de grabar esa imagen en mi mente. La retuve un par de minutos y la dejé ir...
Se fue a cambiar.
Yo me saqué la ropa y quedé en boxers.
Al salir del baño, estaba usando la lencería blanca que le había comprado. No podía verse más exquisita, al segundo mi erección no perdonaba.
Ella se acercó lentamente, como en un baile, una danza de la máxima sensualidad, yo estaba sentado en un sillón y ella se sentó en mis faldas, dio vuelta su cabeza y mientras movía su cola entangada sobre mi boxer, me besaba.
Estaba en el cielo, el placer era único.
La tomé en mis brazos y la llevé hacia la cama, le abrí las piernas, le dije: “¡Que ganas tenía de estar contigo, de hacerte mía, todo lo que me decías, me enviabas, no podía aguantar!”
Me sumergí en ella. Deslizar mi lengua por ahí era una delicia, introduciendo mis dedos con suavidad y luego con fiereza, era una locura, estaba dejando la ropa interior nueva empapada y gemía de tal manera que yo no podía parar, me empujaba la cabeza, para que ejerciera más presión con mi lengua y yo le daba gustoso.
Me decía: “métemela Pendejito ¡quiero sentirte dentro de mi!”
Yo le pedí que me chupara primero, a lo cual ella asintió con la mirada. Me paré, ella se agachó y comenzó.... Me amagó, me empezó a dar besos en las piernas, un beso acá, otro allá... Me pasó un rápido lengüetazo por abajo, otro por el lateral y me volvió a amagar con que se la metía en la boca... me suspiró sobre él y sentí aire caliente, no podía más, necesitaba que se la meta...
De repente, con la boca super húmeda, la metió hasta el fondo, se quedó quieta, y empiezo a sentir su lengua de un lado para el otro, estaba loca...
Comencé a decirle que siguiera y a gemir, era delicioso…
Luego de unos minutos, no aguantábamos más, me dijo que pasásemos a lo siguiente, que ya no podía más, se humedecía cada vez más, se puso de rodillas y sus manos sobre sus nalgas y así las separó para mi facilidad, pasé mi lengua por ahi para sentir su sabor y humedad, le saqué el sostén y sus pechos fueron libres, la desaté de su ropa interior, observé su bello ano y lo lamí también, me preparé e introduje mi miembro, estaba tan mojada que se desplazaba sin control, hasta el fondo. Era increíble, exquisito. Comencé a bombear con más velocidad y fuerza, mientras mis manos figuraban una en un pecho y la otra agarrando una nalga. Repito, estaba en el paraíso.
Seguí así por largos minutos, ella gemía ahogada, sentía cada milímetro. Al menos tres veces, se puso a gritar desesperada, con su entrepierna humedecida en exceso, para luego caer en un relajo total, pero yo seguía ahí, hasta que cuando ya no pude más, salí de su interior, me quité el condón y mientras yo hacía eso, en cosa de segundos ella se bajaba de la cama y se agachaba. Así desbordé de placer en su rostro, boca y un poco sobre sus tetas. Tomó lo que tenía en el rostro y se lo metió en la boca.
Fue hermoso. Después de eso, nos acostamos sobre la cama. Y conversamos de lo rico que fue, de cuanto nos deseábamos, para luego dormirnos abrazados.
Nosotros queremos volver a juntarnos, ustedes querrán más?
Las gracias nuevamente a @Parejita1880 !!
Su ultimo post para que la pasen a ver... http://www.poringa.net/posts/imagenes/3501427/Ella-rebelde-YO-comparto.html
Como saben, los puntos y comentarios son muy bien recibidos y se agradecen!
11 comentarios - Mi Putita Culona (Parte II)
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