La madre de una chica con la que estuve saliendo defendía que las mujeres debían racionar el sexo que le daban a sus hombres. El principal motivo por el que un hombre corteja a una mujer es el sexo, y si esta le da sexo todos los días, a la larga, el hombre dejará de cortejarla, y para esta señora cortejar significaba darle la razón aunque no la tuviera, ayudarla cada vez que lo necesitara y hacerla sentir especial... El sexo debía de ser "un premio", una recompensa por "haberse portado bien". Usarlo como moneda de cambio. Tú haces algo por mí, yo te doy sexo.
Lógicamente al poco lo dejé con esa chica... Una suegra así es un peligro! Pero no dejaba de tener su parte de razón. Cuando algo acaba siendo cotidiano, deja en cierto modo de valorarse. Uno no se esfuerza por conseguirlo. Creo que nos está pasando con el sexo en Internet. Tenemos tanto sexo que no lo valoramos... Por ejemplo: Entrar en un probador con una chica que está muy buena. Vale, sí, vemos el vídeo y pasamos a otro... Consumimos este material como el que come pipas... y eso no está bien... ¡¡Estás entrando en un probador con una buenorra y esta te deja verle las tetas!!!... En que momento hemos dejado de darle valor a esto??... Nuestros bisabuelos nos acollejearían si pudieran.
No sé, quizá deberíamos dejar de consumir tanto porno, tanto erotismo, y de ese modo apreciar mejor lo poco que viéramos... Nos resultaría más gratificante. Seguro que sí.
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