Malena Morgan nos hace reir... Primer Post

Una sexy chica llega al aeropuerto a recoger a su tia que es una monja.





En el camino la monja menciona el increible vehiculo en el que su sobrina viajaba.

Por lo cual le pregunta ¿Que o como hizo para obtener tan grandioso vehiculo? La chica, no deseando mentir a la religiosa le confiesa: Tia, no voy a mentirte, hace un año tuve un amante al que le gustaba meterme todo tipo de cosas por mi trasero-






- Y como lo complaci tan bien, en gesto de gratitud me regalo este vehiculo. La monja, hace una mueca de reprobacion y comienza a ponerse un poco enojada.

Enseguida, la monja, nota que su sobrina portaba un reloj lleno de diamantes, unos aretes relucientes y un hermoso collar de oro, y temerosa de preguntar y sin embargo curiosa pregunta: ¿Que o como hizo para obtener tan hermosas joyas? Su sobrina, ya un poco apenada responde: Tia, realmente no deseo mentirte, hace un par de meses tuve un amante que gustaba de colocarme en las mas extrañas y exquisitas posiciones, ademas de hacerme el amor por toda la casa;






-Y como resulte ser una gran amante y realmete complaciente en gratitud me regalo las joyas. La monja, aun mas molesta y enojada decide ahorrar sus comentarios.

Finalmente al ver el asiento trasero, la monja descubre un suave y bello abrigo de piel, de un corte esplendido y bellisimo, luce realmente grandioso; y llegada la conversacion al punto donde estaba, decide no quedarse con la duda y a expensas de conocer la respuesta decide preguntar: ¿Que o como hizo para obtener tan fino abrigo? Su sobrina, ya sin temor confiesa que hace menos de una semana estuvo con una mujer con quien paso una de las mejores tardes de su vida;










-Y ella complacida por la gran noche que pasamos juntas, me regalo este abrigo.

La monja, ya no podia ocultar mas el desconteto que esto le causaba, y al llegar a la iglesia del pueblo, se baja del vehiculo bastante molesta. Su sobrina baja del vehiculo intentando disculpandose por sus actos;

Pero la monja dice que ya no tiene nada que explicar, se da media vuelta y se retira.

Esa noche, la monja oraba y pedia perdon a nombre de su sobrina;

Ya pasada la media noche, se oye que tocan a la puerta de su habitacion,; la monja aun indiganda por los sucedido ese dia, pregunta en un tono claramente molesto: ¿Quien toca a esta hora?
- Yo, soy el padre Juan...

- A la chingada padre Juan, usted y sus chocolatitos

No volveran a obtener nada de mi...