Sentirse Joven De Nuevo

HeyHeyItsFei

Resumen:
Después de que su intento de espiar a las chicas mientras están en las aguas termales sale terriblemente mal, Mineta se relaja a altas horas de la noche, creyendo que nadie se atrevería a perturbar su paz y tranquilidad. Desafortunadamente, tres mujeres reprimidas sin saberlo salen a las aguas termales donde Mineta se está bañando actualmente, y no pueden resistir la tentación.


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El campamento de verano en el bosque puede ser impredecible para muchos, pero para los niños pequeños en particular, la emoción de espiar a las chicas cambiando y en las aguas termales fue una motivación más que suficiente para superar el duro día. Los adultos eran muy conscientes de esto, informando a los niños que serían severamente castigados por atreverse a intentar tal acto.

Pero para Mineta, la recompensa superó el castigo. La mera idea de ver a cualquiera de sus compañeros de clase desnudos hizo que su sangre bombeara, y cuando llegó la hora anticipada del baño, no fue una sorpresa para nadie que el ansioso pervertido fuera atrapado en el acto por su maestro de corazón frío y duro.

Al verse obligado a hacer la tarea mientras todos los demás se divirtieron en las aguas termales, Mineta sabía que esto se avecinaba, pero simplemente no podía ayudarse a sí mismo. Cualquier niño sano estaría saltando a la oportunidad de echar un vistazo a las chicas bañándose, y en lugar de recibir simpatía, fue castigado.

No fue hasta justo antes de la medianoche que Mineta terminó con toda su tarea que parecía interminable, y había sido supervisado todo el tiempo, no darle la oportunidad de escapar o aflojar. Afortunadamente, se le dio permiso para usar las aguas termales antes de acostarse, ya que a nadie le gustaría compartir una habitación con alguien que apestaba a sudar.

Las aguas termales dedicadas a los niños estaban cerradas para su limpieza, y Mineta estaba debatiendo si debía o no ingresar a las niñas vacías. Era tarde en la noche, y seguramente todos ya estaban en la cama o listos para hacerlo por lo menos. Pensando que no había daño, el niño entró en las aguas termales, se desnudó y envolvió una toalla alrededor de su cintura.

Era prácticamente idéntico al que había estado más temprano en la noche con los otros chicos, pero había un pequeño detalle que lo hacía aún más emocionante para Mineta; las chicas se habían bañado aquí. Solo sabiendo que eso lo emocionaba, y aunque le hubiera encantado tener alguna compañía femenina, incluso el niño pervertido sabía que estaba pidiendo lo imposible.

Después de todo, todos sus compañeros de clase lo detestaban.

Estableciéndose en las aguas termales, Mineta apoyó su espalda contra una roca mientras se empapaba en el agua, encontrar que es la temperatura perfecta para aliviarlo de todo su estrés que se había acumulado durante todo el día. El grupo de héroes a cargo de entrenarlos a lo largo de este campamento fue duro, pero tuvo que admitir que estaban bastante calientes.

“Gracias a Dios el día finalmente ha terminado. Lo juro, esto es lo mejor que esperar cada noche.”

Mineta se congeló en su lugar mientras miraba con asombro como no una, sino tres mujeres vestidas con toallas salieron de los cuartos de cambio. Dado su lugar en las aguas termales, estaba sentado de tal manera que estaba mirando directamente a la entrada, dándole el punto de vista perfecto para ver si alguien perturbaba o no su paz y tranquilidad.

No podía creer lo que veía; Mandalay, Pixie-Bob y Ragdoll estaban prácticamente desnudos y charlando entre ellos. Ninguno de ellos había notado su presencia, y Mineta estaba agradecido y temeroso de su situación actual. Si no fuera por su elección de entrar en las aguas termales de las niñas, entonces nunca vería un regalo para los ojos doloridos. Pero el castigo sería terrible.

Headd los estaba mirando todo el día, y ahora que no estaban vestidos con toallas, Mineta reconoció lo sexy que realmente eran. Y luego el trío arrojó a un lado lo único que cubría sus cuerpos, revelando sus enormes pechos, caderas anchas, figuras delgadas y asnos tonificados al pervertido bañador.

¿“Hmm? Ustedes dos, ¡tenemos un mirón! Pensar que un niño se abrió camino en el baño de mujeres!” La ruidosa Tsuchikawa Ryuko, más conocida por Pixie-Bob, alertó a sus dos compañeros de que no estaban solos aquí. Ella había estado examinando el agua y vio la cabeza de Minetaa sobresaliendo.

Mandalay y Ragdoll se cubrieron con las manos antes de mirar hacia donde apuntaba la rubia, listos para darle al niño atrevido un pedazo de su mente. Pero antes de que pudieran hacerlo, algo grueso, largo y veinoso se levantó de debajo de la superficie del agua, y las tres mujeres apenas podían creer lo que estaban viendo.

Mineta había producido una erección, y era natural dado que tenía tres bombas frente a él. Si bien siempre se promocionaba con sus compañeras de clase, alegando que era incomparable con los otros niños de su clase, ni una sola alma creía en las afirmaciones de los pervertidos arrogantes.

Pero con tres miembros de los Wild, Wild Pussycats desnudos ante él, Mineta les estaba mostrando cuán talentoso era realmente. A pesar de sentarse en el agua que se elevaba hasta los hombros, su polla sobresalía del agua, una señal reveladora para todos los presentes de que el niño estaba colgado.

“¡Echa un vistazo a cuánto semental es! Heats tiene un honesto para dios perra breaker!” Shiretoko Tomoko, también conocida como Ragdoll, se desdibujó, sintiéndose inquieta al ver lo que era fácilmente el pene más grande en el que había visto. Su largo cabello verde esmeralda rebotó mientras temblaba de emoción, el temor de ser atrapada desnuda por un estudiante desapareciendo como si nunca hubiera existido.

Tosiéndose y aclarándose la garganta, Sosaki Shino sintió la necesidad de calmar a sus parejas. Ella era la líder del grupo, y tenía que estar al tanto de esta situación, pero ver esa enorme polla temblorosa la tenía nerviosa. ¡“Y-Ustedes dos! No deberías burlarte del niño.”

“Aww. ¿Cuál es el problema, Mandalay? Todos sabemos que no te han acostado en años,” Pixie-Bob gritó, burlándose de la mujer madura por tratar de mantener una cara seria. La rubia se moría por ver de lo que ese joven semental era capaz, y tenía la sensación de que Ragdoll se sentía de la misma manera.

En verdad, ninguno de ellos ha tenido ninguna acción en los últimos tiempos, su edad los ha alcanzado, y si alguien lo descubriera, a menudo tenían los pies fríos y se distanciaban del trío. Pero tanto Pixie-Bob como Ragdoll estaban decididos a aprovechar al máximo esta situación, agarrando a Mandalay de la mano y llevándola a las aguas termales.

¡“Es aún más grande de cerca! Qué tan grande es este monstruo?” La voz de Ragdollollar estaba llena de emoción mientras ella y sus parejas se alzaban sobre Mineta, mirándolo atentamente. Lamiendo sus labios con hambre, la mujer hiperactiva se moría por poner sus manos en esa enorme polla.

Con tres hermosas mujeres de pie delante de él, Mineta apenas podía creer que esto estaba sucediendo. Esperaba ser expulsado de las aguas termales y castigado, para no dejar que su virilidad fuera derrotada. Aún así, rápidamente superó su conmoción y recuperó la compostura, informando al trío cuán colgado estaba, “21 pulgadas. Por qué, no me digas que es demasiado para ti chicas jóvenes?”

Sonrojándose por el cumplido, Mandalay, Pixie-Bob y Ragdoll eran bastante conscientes de su edad, pero ser llamados jóvenes por Mineta hizo que sus corazones se saltasen un latido. Todos miraron con asombro mientras su polla palpitaba, y todos compartieron el sentimiento de que necesitaban ver de lo que este niño era capaz.

¡“Ahem! Sabes que no deberías estar en el baño de mujeres, ¿verdad? Voy a tener que disciplinarte, especialmente después de ver que trajiste un arma tan peligrosa,” la voz de Mandalayays temblaba mientras se inclinaba y recogía a Mineta, colocándolo en el borde de las aguas termales para que todos pudieran ver su cuerpo desnudo.

Respirando pesadamente mientras llevaba su rostro hacia la gigantesca polla de Mineta, Mandalay quedó cautivada tanto por el tamaño de la misma, como por la dulce fragancia que emanaba del grueso eje. Era casi tan grueso como su muslo, y el precum comenzaba a salir del glande, goteando lentamente hacia abajo.

¡“L-Look! Solo me aseguraré de que no dañes a ninguna chica indefensa, ¿entiendes?” Tartamudeando mientras sentía la necesidad de defender sus acciones, Mandalay se inclinó más cerca y pasó la lengua por la parte inferior del miembro palpitante, estremeciéndose mientras se frotaba los muslos.

Tanto Pixie-Bob como Ragdoll tenían amplias sonrisas en la cara mientras se arrodillaban frente al niño colgado, la pareja no pudo ayudarse a sí misma, ya que encontraron su actitud de líderes tan adorable. La rubia fue la primera en hablar juguetonamente, “Considerate afortunado, chico. Mandalayays haciendo un favor al mundo entero.”

“Hah sí, ¡verdad! Más como su puta interior ha despertado después de todos estos años!” Ragdoll se echó a reír, encontrando demasiado que Pixie-Bob estaba tratando de acompañar la estratagema de Mandalayays. Ella era todo por jugar junto con su pequeño juego de los líderes, pero esto no tenía precio.

Mineta estaba confundida en cuanto a lo que estas mujeres estaban pasando, pero escuchar que Mandalay era una puta lo llenó rápidamente. Corriendo una mano a través de su cabello rojo parduzco, el pervertido bien dotado aprovechó al máximo la situación estimulándola, “Bueno, no lo lamas. Y aquí pensé que ibas a cuidar mi arma peligrosa, ¿eh?”

Mandalay frunció el ceño mientras se sonrojaba, sintiéndose avergonzada de que alguien mucho más joven que ella la ridiculizara junto a Pixie-Bob y Ragdoll. No queriendo ser engañada, trazó su lengua hasta la punta de la enorme polla de Mineta antes de abrir la boca lo más ancha que podía.

Decidida a demostrar a todos los presentes que no le gustaba ser burlada, Mandalay lentamente envolvió sus labios alrededor de la espesa virilidad, bajando la cabeza mientras luchaba por tomar pulgada tras pulgada de carne de Minetaats. Era demasiado para cualquiera intentar hacer una mamada, pero el héroe reprimido no estaba arriba para rendirse.

“¡Mírala! Shears en realidad tratando de llevar a ese monstruo dentro de su boca!” Ragdoll se estremeció de emoción ya que apenas podía creer que el líder de su grupo estaba tratando de tener sexo oral con una polla que era casi tan gruesa como sus muslos. No era una tarea imposible, pero sin duda sería una que llevó a Mandalay a sus límites.

Lamentando un poco su decisión ya que su mandíbula se extendía más allá de lo creíble, Mandalay no estaba a punto de retroceder ahora. No había estado con un hombre en tanto tiempo que necesitaba hacer esto, aunque solo fuera para demostrar a todos los presentes que era capaz de dejar a un niño pidiendo su misericordia.

A medida que varias pulgadas más de carne espesa se hundieron más profundamente en su boca, Mandalay se alarmó cuando chocó contra la parte posterior de su garganta. Mirando con incredulidad la gran cantidad de polla que quedaba por recorrer, sabía que no debería haber apresurado esta decisión. Sin embargo, era demasiado tarde para volver ahora.

“¿Es eso? Vamos, esperaba algo mejor del reconocido líder de los Wild, Wild Pussycats. No me digas que esto es todo de lo que eres capaz?” Mientras el abrazo apretado de la garganta de su compañero soplaba, Mineta sintió la necesidad de burlarse de Mandalay, encontrando que su entusiasmo de antes había desaparecido en el aire, que se estaba tomando su dulce tiempo.

Pixie-Bob y Ragdoll se miraron el uno al otro antes de asentir de acuerdo, ni una palabra pronunciada entre ellos mientras colocaban sus manos en la parte posterior de la cabeza de Mandalayay. Al unísono, empujaron hacia abajo, forzando a su compañero reprimido a la enorme polla de Mineta, ya que se deslizó más profundamente dentro a un ritmo alarmante.

Mineta gimió y arrojó la cabeza hacia atrás mientras sentía las 21 pulgadas de su virilidad ahora envueltas dentro de la boca y la garganta de Mandalayay. Era tan grande que su polla estaba siendo apretada por todos lados, con poco espacio para que la mujer respirara. Superó con creces las expectativas de los pervertidos colgados, y estaba ansioso por experimentar más.

Para Mandalay, esto era demasiado para soportar. Estaba siendo empujada más allá de sus límites, y su boca estaba llena de tanta polla que podía sentirla palpitando dentro de su garganta. Fue una lucha para respirar, y ella carecía de la energía para alejarse de Mineta, la intensa mezcla de dolor y placer que la hacía impotente.

“Vete loco, chico. Ya la has roto con ese gigante tuyo, así que deberías enseñarle al jefe de Mandalay,” Pixie-Bob estaba satisfecha después de ver el increíble bulto en la garganta de su amiga, sintiendo su propia feminidad temblando de emoción mientras quería entrar en la acción.

Con ambas manos a los lados de la cabeza de Mandalayay, Mineta empujó al héroe mientras tiraba de sus caderas hacia atrás, su enorme polla se deslizaba lentamente de su boca. Al ver que estaba cubierto de saliva que brillaba en la luz, estrelló su entrepierna contra su rostro, enterrándose en la base sin dudarlo.

“¡Supongo que realmente todos están hablando! Solo admítelo, ¡querías probar mi polla!” Llena de confianza mientras Mandalay, mineta, se follaba con la cara, podía sentir sus labios chupándolo con fuerza mientras empujaba su boca repetidamente, sus bolas del tamaño de una toronja le golpean la garganta y dejan una marca roja.

Pixie-Bob y Ragdoll observaron con asombro, sorprendidos al ver que el lado dominante de los jóvenes muchachos salía tan repentinamente. Sabían que a Mandalay le encantaba cada segundo de esto, ya que no se rascaba los muslos de Minetaa para dejarla ir, y la pareja solo podía esperar que pudieran obtener su turno.

El sonido de las fuertes bolas de Minetaa agitando sorprendió a todas las mujeres, ninguna de ellas capaz de creer que fuera capaz de hacer tales ruidos simplemente produciendo semen. Sus empujes se volvieron más ásperos cuando se estrelló contra la boca de Mandalayay, sin descanso, y su polla se estaba hinchando, una señal reveladora de que estaba listo para soplar.

“¡No te atrevas a desperdiciar una sola gota!” Mineta rugió cuando comenzó a eyacular, disparando docenas y docenas de chorros de semen espeso directamente por la garganta de Mandalayays y hacia su estómago, dándole poca opción al respecto. Sus bolas continuaban trabajando horas extras, produciendo esperma en masa mientras estallaba durante casi varios minutos seguidos.

Por un lado, Pixie-Bob y Ragdoll luchaban por creer lo que veían. El esbelto estómago de Mandalayayay estaba hinchándose gradualmente hacia afuera a lo largo de todo esto, los sonidos deslumbrantes de semen girando dentro de ella cada vez más fuerte y más dominante a medida que pasaba el tiempo. Viendo cómo Mineta liberaba su polla entre los labios de la heroína, la pareja tragó con fuerza.

Todavía estaba perfectamente erecto a pesar de haber volado un volumen increíble directamente en las tripas de Mandalayia, y su estómago sobresalía de su cuerpo como resultado. Parecía que estaba embarazada, sin embargo, los sonidos de sloshing que venían del interior de ella le dijeron a Pixie-Bob y Ragdoll que esto era de hecho las secuelas de una sola eyaculación de Mineta.

La pareja se miró el uno al otro y regresó a la enorme polla antes de correr, empujando al delirante Mandalay a un lado mientras presionaban sus rostros contra él. Pixie-Bob colocó besos descuidados a lo largo del eje pegajoso mientras Ragdoll trabajaba en la limpieza del glande, con la lengua girando mientras ella soltaba los restos de semen.

“Señoras, hay suficiente de mí para compartir, ¿de acuerdo? Cada uno tendrá su turno, ninfas,” Mineta tenía una sonrisa arrogante en su rostro mientras trataba de calmar un poco a la pareja enloquecida. Se complació al ver que tanto Pixie-Bob como Ragdoll adoraban su polla como si fuera la cosa más deliciosa del mundo, y estaba ansioso por llenar sus entrañas con su semilla.

Ragdoll estaba demasiado preparada para controlarse, estirando sus labios tan anchos como lo harían cuando comenzó a bajar la cabeza sobre el pene masivo de Mineta, logrando tomarlo más fácil de lo que Mandalay podría. Era hiperactiva y muy experimental, y aunque este era, con mucho, el miembro más grande que había tenido en sus manos, el segundo lugar estaba a solo medio pie de distancia.

Al darse cuenta de que su pareja la había golpeado hasta el golpe, Pixie-Bob renunció a adorar las bolas redondas de los Minetaars, sintiéndolas palpitar mientras deslizaba su lengua sobre ambos. Había un sabor dulce llenando su boca, uno que la estimuló a tratar de tomar uno de los testículos del tamaño de una toronja entre sus labios.

La combinación de una mamada y la succión de sus bolas hizo que Mineta se estremeciera, los gemidos escaparon de sus labios informando a las mujeres mayores que estaban haciendo un trabajo maravilloso. Para su sorpresa, ni siquiera necesitaba darle una mano amiga a Ragdoll, ya que de alguna manera logró alojar la mitad de su polla de 21 pulgadas dentro de su boca.

Follando a Ragdoll y llenando sus entrañas con grandes cantidades de su semen de degustación de uva, Mineta ni siquiera necesitaba un descanso, ya que hizo lo mismo con Pixie-Bob, dejando a la rubia hasta el final mientras la trataba bastante áspera. Le encantaba lo delicada que había sido durante todo el día, y así es como tenía la intención de devolverle su amabilidad.

Gimiendo mientras se hundía debajo del agua, Mineta acababa de eyacular varios galones de semen dentro de tres mujeres mayores. Cualquier niño estaría exhausto, pero no se inmutó, su resistencia incomprensible le permitió disfrutar de sus deseos lujuriosos durante horas y horas.

Mandalay, Pixie-Bob y Ragdoll se pusieron de pie en las aguas termales, lamiendo sus labios y acariciando sus estómagos hinchados mientras podían sentir las copiosas cantidades de semen girando dentro de ellos. Todos ellos se estaban volviendo adictos al dulce sabor de las uvas, y se sorprendieron al ver que Mineta todavía estaba buscando más acción.

“Say, ¿qué tal si tomamos este lugar un poco más cómodo?”

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A sugerencia de Mandalayays, trasladaron ubicaciones a una de sus habitaciones, debatiendo sobre de quién elegir. Fue una discusión corta, pero las mujeres decidieron usar la sala de Ragdollol, dado que no era un desastre completo como Pixie-Bobocs, tampoco tenía un invitado joven que pudiera entrar en cualquier momento como los líderes.

Descuidadosamente besándose con el Pixie-Bob mientras sus lenguas bailaban juntas, Mineta empujó hacia adelante, enterrando las 21 pulgadas de su gruesa polla dentro de Mandalayays esperando ansiosamente el coño. Todo el tiempo, Ragdoll estaba acostada boca arriba en el suelo, con la cara entre las patas de los tachuelas mientras adoraba sus bolas que se lanzaban hacia adelante con cada movimiento duro de sus caderas.

¡“Ustedes tres realmente son ninfos! ¿No me dices que todos ustedes han estado luchando para echar un polvo? Quiero decir, ¡vamos! ¡Todos ustedes son bombas!” Alejándose de los labios rubios por un momento, Mineta se divirtió al ver que todas las mujeres mayores estaban locas por el sexo, que todas se morían por reorganizar sus entrañas.

Agarrando una de las manos de Minetaa y colocándola en sus pechos de tamaño modesto, Pixie-Bob humilló al niño, encontrándolo demasiado irresistible para dejarlo pasar. “Nadie se acerca a un semental como tú. Si le mostraras este monstruo a las chicas de tu clase, probablemente serías bastante popular, ¿sabes?”

¡“M-Mmmn! ¡D-Dondant ir asumiendo que son todas las zorras ahora! Están a una edad delicada!” Mandalay levantó la voz mientras gemía en voz alta, manteniéndose a cuatro patas mientras Mineta la golpeaba por detrás sin piedad. Ella no aprobó la idea de Pixie-Bobols de tratar de corromper a los jóvenes y convertirlos en ninfómanos mientras todavía estaban en la escuela secundaria.

El interior del coño de Mandalayays estaba apretado, y sus paredes se aferraban a la enorme polla de Minetaa con entusiasmo, como si tuviera miedo de ser separada del semental por un segundo. Se había estrellado contra su cuello uterino en un solo empuje antes, y su delicado útero ahora no era más que una manga de polla, siendo golpeado sin descanso.

“¿Quién necesita a esas perras cuando tengo tres que han estado peleando por mí por un buen tiempo ahora?” Mineta escupió con una sonrisa en su rostro, sintiendo ya la necesidad de conformarse con sus compañeros de clase que lo detestaban. Ahora que tenía en sus manos al trío de mujeres mayores, tenía la sensación de que no querrían dejarlo ir tan fácilmente.

Engullendo una de las enormes bolas dentro de su boca y chupándola con fuerza, Ragdoll gimió de acuerdo con Mineta, encontrándose cabeza sobre tacones para el niño. Parecía no tener límites, y la mujer de pelo verde estaba decidida a obtener su parte justa de la acción durante toda la noche.

Con toda la atención prestada a sus testículos, junto con el apretado coño que lo sujetaba con fuerza, los movimientos de Minetaa se hicieron más pesados mientras se sentía listo para estallar en cualquier momento. Golpeando con fuerza contra el techo del útero de Mandalayays, dejó escapar un gemido dominante mientras estallaba dentro de ella.

El esperma caliente fundido inundó la cámara de su bebé de repente, y Mandalay perdió toda la fuerza en sus brazos cuando se estrelló contra el suelo, gritando y pronunciando palabras ininteligibles mientras venía duro. Podía sentir que su útero se extendía para acomodar la gran cantidad de spunk, y la polla de Minetaa estaba actuando como un tapón, asegurando que ni una sola gota escapara sin su permiso.

Después de aferrarse a la retaguardia de Mandalayays durante varios minutos, Mineta retrocedió, liberándose cuando su semen salió de su enorme coño como un río alborotado. Su estómago era aún más grande de lo que era antes, ahora descansando contra el suelo y haciendo que el héroe pareciera que se tragó una pelota de playa.

“Ahora entonces, ¿quién sigue?” Mineta se limpió una cuenta de sudor de la frente, habiéndose acostumbrado a los movimientos de tener relaciones sexuales. Su enorme polla estaba empapada en una mezcla de su propio spunk y fluidos lascivos de Mandalayays, y estaba ansioso por follar a alguien más en un estupor.

Dado que Ragdoll tenía la boca llena con los dos testículos del tamaño de una toronja, era bastante fácil para Pixie-Bob aprovechar la oportunidad. Acostada de lado y estirando la pierna hacia arriba, la rubia invitó a Mineta a llevarla aquí y ahora, “Venga, semental. No me dejes colgando ahora.”

“Heh. Iirll asegúrese de que eres tan sexy como Mandalay por allí,” Mineta se lamió los labios cuando se acercó al atractivo héroe, liberando sus bolas de la boca de Ragdollol con facilidad mientras bajaba su cuerpo y se aferraba a las piernas de Pixie-Boboks. Usando una mano para dirigir su polla, el joven empujó hacia adelante.

Gritando mientras su interior se extendía más ancho que nunca antes, Pixie-Bob apenas podía creer que era capaz de tomar una polla que era casi tan gruesa como su muslo dentro de su dolorido coño. Sintiéndolo golpear contra su cuello uterino, los ojos rubios volvieron a caer en su cabeza cuando Mineta se estrelló contra su útero.

Debería estar gritando de dolor por tener algo tan absurdamente grande insertado en su delicada feminidad, pero Pixie-Bob estaba fuera de sí misma en placer cuando comenzó a babear. Antes de que le dieran tiempo para adaptarse al tamaño de Minetaa, el semental tiró de sus caderas hacia atrás antes de hundirse hacia adelante sin piedad.

¡“Eso no es justo! Ugh lo que sea. Weiremos ahorrando lo mejor para el final ¡entonces!” Haciendo pucheros mientras ella hacía su disgusto fuerte y claro, Ragdoll presionó su cuerpo contra Minetaa, aplastando sus pechos contra él. Ella había estado disfrutando chupando sus bolas, pero descubrir que se había perdido arruinar su interior la hizo verde de envidia.

Martillando agresivamente a Pixie-Bob, a Mineta le encantaba que tuviera tantas mujeres compitiendo por su atención. Si solo recibiera este mismo tratamiento en la escuela, pero eso era pedir lo imposible. Sin embargo, el joven pervertido quería dejar perfectamente claro que era dueño de estos tres, que eran sus vertederos personales.

Mientras gritos delirantes llenaban la habitación junto al golpe de piel contra piel, Mineta descubrió que Ragdoll se aferraba a su cuerpo así, haciendo las cosas más difíciles de lo que necesitaban ser, y estaba decidido a enseñarle una lección al héroe hiperactivo cuando llegara el momento, pero hasta entonces, tenía que dedicar todos sus esfuerzos a hacer de Pixie-Bob su propiedad.

“¡Bájala bien, chico! Ahogue sus ovarios con su spunk!” Empezando al niño, Ragdoll se estaba impacientando, queriendo que su propio vientre fuera golpeado con esa enorme polla que parecía no conocer límites. Su propia emoción estaba goteando por sus piernas, y sentía que había estado esperando una eternidad para que Mineta le prestara atención.

Gruñendo mientras sus movimientos se ralentizaban, Mineta avanzó una última vez antes de descargar el contenido de sus fuertes bolas dentro de Pixie-Bob, inflándola con su semen como lo era Mandalay actualmente. Su polla era como un géiser en erupción, convirtiendo el rubio en el interior en un mar de grueso y blanco goo.

Pixie-Bob no podía contener todo el placer enloquecedor que estaba friendo su cerebro, y su visión se volvió blanca mientras balneaba, la sensación de esperma hirviendo caliente obligándola al orgasmo innumerables veces de atrás hacia atrás. Su útero estaba siendo inundado con grandes cantidades de potente masa para bebés, y no se permitió escapar ni una sola gota.

Sacando su polla mientras los últimos chorros de esperma salpicaban contra la cara de las rubias, Mineta se volvió y empujó a Ragdoll hacia su espalda, agarrando sus piernas y empujándolas hacia arriba junto a su cabeza. Se enfureció porque ella le estaba negando la satisfacción de bañarse en el after glory, y estaba decidido a vengarse de la mujer mayor.

¡“Eres perra impaciente! Qué, no podía esperar a que terminara de divertirme, ¿verdad?” Mineta estaba lívido cuando se subió a la cima de Ragdoll, hundiendo su polla en su coño de espera mientras se abría paso fácilmente en su vientre. Había estado queriendo aparearse para presionar a alguien desde que dejó las aguas termales, y esta fue la mejor oportunidad para hacerlo.

Chillando de deleite mientras envolvía sus piernas alrededor de la cintura de Minetaa, Ragdoll había estado anticipando esto, para que el semental corto la devastara incontrolablemente así. Le encantaba el sexo duro más que nada, descubriendo que era suficiente para satisfacer sus deseos enloquecedores, y esperaba que esto fuera solo el comienzo de que el niño se volviera dominante.

“¿No hay respuesta? ¿Eres el peor del grupo, lo sabes!? ¡Esperadamente chupando mis bolas durante tanto tiempo, negándose a soltar, sin mencionar cómo me deepthroated con facilidad! No eres más que una puta!” Mineta se estaba poniendo nervioso mientras balanceaba las caderas hacia arriba y hacia abajo, golpeando el útero de su compañero sin piedad.

Al encontrarse con ruidos más placenteros de Ragdoll solo confirmó sus sospechas, y Mineta continuó golpeando su cuerpo contra el de ella repetidamente, sabiendo que definitivamente era una para buscar las pollas más grandes y mejores imaginables, que de hecho era una reina de tamaño insaciable.

Raspando contra las paredes de su coño, Mineta descubrió que ella era, con mucho, la más suelta de los Wild, Wild Pussycats. Mandalay y Pixie-Bob eran mucho más apretados, pero Ragdoll claramente tenía mucha experiencia con pollas grandes. Divertido por esto, el pervertido se alejó más rápido que antes, decidido a romperla.

Después de haber eyaculado innumerables veces a lo largo de la noche, Mineta comenzaba a desgastarse, y sus movimientos se estaban volviendo rígidos a pesar de lo mal que quería arruinar a Ragdoll. No iba a durar mucho más sin descanso, pero quería hacer que esta última carga fuera espectacular, una que seguramente haría que esta reina de tamaño se sometiera.

¡“G-Get embarazada, perra! ¡Quizás esto te enseñe algo de moderación! O mejor aún, tal vez te establecerás después de convertirte en madre!” Rugiendo mientras se alejaba implacablemente por un momento antes de estrellarse con fuerza, Mineta no podía contenerse más, descargando el contenido de sus bolas dentro del útero de Ragdoll.

Chillando como un cerdo mientras se llenaba como un globo de las copiosas cantidades de semen que inundaban dentro de ella, Ragdoll apenas podía creer lo fácil que esta niña la había dominado. No importa cuánto lo intentara, no podía reunir la energía para voltearlos, así que estaba en la cima, y la sensación de que su estómago se hizo más grande por el segundo la hizo estremecerse de emoción.

Si bien puede haber sido su 6a eyaculación de la noche, el volumen era igual de abundante, con millones y millones de espermatozoides ansiosos nadando dentro del útero inflado de Ragdollóns, buscando desesperadamente un óvulo para fertilizar. Mineta se gastó mientras se alejaba lentamente de ella, pero su polla permaneció tan dura como siempre.

El sexo era un entrenamiento al que definitivamente necesitaría acostumbrarse.

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Habían pasado varios meses desde el campo de entrenamiento de Clase 1-Aia, y las noticias de las actividades de Wild, Wild Pussycats’ en espera habían llegado a los estudiantes que habían cuidado. Muchos se sorprendieron al escuchar que Mandalay, Pixie-Bob y Ragdoll estaban tomando licencia de maternidad, ya que nadie esperaba que ninguno de ellos quedara embarazada de la nada de esta manera.

Nadie excepto Mineta, por supuesto.

Después de haber pasado todas las noches de ese campamento criando a las tres mujeres, no fue una sorpresa para ninguna de ellas que las hubiera golpeado a todas, especialmente dado cuántos galones de cum heatd los bombearon cada uno lleno de. Mineta se complació al escuchar que se habían tomado un descanso, y estuvo inquieto durante toda la escuela, esperando ansiosamente que sonara la campana final.

Se mantuvo en contacto con el trío, a menudo enviándose selfies desnudos entre sí, ya que no podían reunirse exactamente en tan poco tiempo. Pero hoy fue diferente. Mineta y sus amantes habían estado planeando esto con anticipación durante semanas, y finalmente fue el día para que el pervertido colgado se reuniera con ellos.

Agarrando una muda de ropa y algunas otras necesidades, Mineta dejó su escuela sin pensarlo dos veces, tomando varios trenes antes de que finalmente llegara a su destino. La noche ya había caído cuando llegó, pero estaba lleno de emoción por lo que le esperaba.

Golpeando la puerta del apartamento al que se le daría la dirección, Mineta se estaba volviendo inquieta, inquieta en el acto a medida que sus pantalones se ponían más y más apretados por el segundo. Tenía una buena idea de lo que le esperaba del otro lado, pero sus expectativas se habían desvanecido cuando la puerta se abrió.

Mandalay, Pixie-Bob y Ragdoll estaban desnudos con amplias sonrisas en sus rostros mientras arrastraban al niño adentro antes de cerrar la puerta detrás de ellos. Todos lucían vientres masivos, el producto de su amor, y cada uno de ellos había estado esperando ansiosamente que llegara este día por demasiado tiempo.

Cada mujer intercambió un beso descuidado y húmedo con Mineta, al no haberse reunido con el niño desde que su clase realizó sus sesiones de entrenamiento, y se habían estado muriendo por tener en sus manos al padre de sus hijos, especialmente ahora que oficialmente se habían ido por maternidad y ya no les molestaba el trabajo.

“Mineta, ¡te extrañamos mucho! Me alegro de que hayas encontrado el lugar bien,” Mandalay ronroneó mientras le daba un rápido picoteo en la mejilla a su amante, extasiada de finalmente reunirse con el chico que le recordaba los placeres de ser mujer, e incluso la había ahogado en euforia por sensaciones que no sabía que existían.

Agarrando una de las manos de Minetaa y guiándola a sus pechos, Pixie-Bob era tan delicada como siempre, su otra mano corriendo por el cuerpo de los jóvenes, centrándose principalmente en su bulto que milagrosamente no se rasgaba los pantalones. Ella sonrió antes de desdibujarse, “¡No sabes cuánto tiempo hemos estado esperando este día, chico!”

¡“Para real! ¡Nuestros gatitos han estado realmente inquietos últimamente! Apuesto a que quieren conocer a su semental de un padre!” La voz de Ragdollollar rebotó en las paredes mientras se estremecía de emoción, inclinándose y desabrochándose los pantalones de Minetaa mientras su enorme polla salía libre. Fue tan increíble como recordaba, y no pudo evitar lamerse los labios con anticipación.

Riendo de lo pegajosos y atentos que eran sus amantes, Mineta estaba agradecida de que todos lo aceptaran como su pareja. Sin embargo, era natural, dado que headd golpeó a cada uno de ellos con una camada de gatitos. Aún así, el joven estaba feliz de ver que a todos les iba bien, incluso si sabía que lo llamarían por algo más que esto.

“Espero que la espera no haya sido insufrible para ustedes tres. La escuela es un lastre, y el viaje hasta aquí lleva demasiado tiempo, pero sólo tendremos que aprovechar al máximo nuestro tiempo juntos, ¿no?” Sonriendo mientras su polla se retorcía, Mineta estaba ansiosa por dar a todos sus amantes lo que anhelaban.

Todos le enviaron un mensaje innumerables veces en las últimas semanas, rogando por su leche, y se divirtió de que estuvieran empezando a usar toda esta jerga de gatos con él. Si querían actuar como felinos, entonces estaba más que feliz de darles el alimento que todos pedían desesperadamente.

“Andress me and Iialll dar a cada uno de ustedes su porción de leche. O tal vez eso ya no sea suficiente para satisfacer a tus ninfas?” Mineta ordenó al trío mientras se burlaba de ellos, sabiendo que aprovecharían la oportunidad de tener relaciones sexuales con él si estuvieran en sus períodos estables. Sin embargo, fue solo mucho antes de que eso sucediera.

Obedeciendo a sus amantes cada comando sin pensarlo dos veces, las mujeres mayores desnudaron a Mineta con facilidad, tirando su ropa a un lado sin preocuparse de si se ensuciaban o no. Después de todo, tenían asuntos más apremiantes que atender, y con una polla de 21 pulgadas temblando frente a ellos, el trío se abalanzó.

Mineta gimió de aprobación cuando Mandalay, Pixie-Bob y Ragdoll comenzaron a correr sus lenguas a lo largo de su polla, sofocando cada centímetro con su amoroso afecto. Cuando comenzaron a sorberlo por todas partes, fue solo cuestión de segundos antes de que todo el eje brillara en su saliva y estuviera listo para alguna acción.

“Mandalay, chupa mis nueces por mí, ¿quieres? Pixie-Bob, pon esa boca tuya a buen uso. Y Ragdoll, ve a buscar unos cuencos para mí. Ahora,” escupiendo órdenes como si fuera la cosa más natural del mundo, Mineta se complació de que todos siguieran instrucciones sin dudarlo, especialmente Ragdoll, dado lo incontrolable que solía ser.

Con Pixie-Bob profundizando fácilmente su polla mientras Mandalay adoraba sus bolas, Mineta casi se echó a reír cuando Ragdoll vino tropezando con las manos llenas de lo que parecía ser cada tazón en el apartamento. Es probable que los necesiten a todos con lo que el joven pervertido tenía en mente.

“A-Bien, ¡eso es suficiente! Aquí, vamos a servir un poco de leche para tres de mis mujeres favoritas,” ladrando una orden mientras se acercaba a un orgasmo bastante rápido, Mineta no le había mencionado a nadie que se había abstenido de aliviarse durante el mes pasado, esperando ansiosamente una oportunidad como esta.

Masturbándose mientras las mujeres ponían los cuencos seguidos en el suelo para él, Mineta gimió en voz alta cuando comenzó a disparar chorro tras chorro de semen en cada uno de los platos, llenándolos de su semilla uno tras otro. Fue un desastre cuando su spunk salpicó por el suelo, pero logró lograr su tarea después de un minuto de eyaculación.

Docenas de cuencos llenos de esperma tendidos en el suelo, cada uno de ellos rebosante del grueso y blanco goo. ¡Al estabilizar su respiración, Mineta tenía una amplia sonrisa en su rostro mientras informaba a los tres, “Dig in! Esperemos que esto sea suficiente leche para calmar su sed. Si no, todos saben que Iim está más que dispuesto a darte más.”

Mandalay, Pixie-Bob y Ragdoll hicieron una carrera por los platos llenos de spunk, arrastrándose como gatos mientras cada uno pulía varios cuencos en rápida sucesión. Todos ellos temblaban, ya que fueron recibidos con el sabor de las uvas después de un período de tiempo tan largo, y todos estaban lejos de estar satisfechos.

Y Mineta estaba más que feliz de darles lo que querían mientras limpiaban hasta el último tazón, sin dejar ni una sola gota de semen.