Crónicas de una Mariquita. ❤️

Hoy por fin doy un paso más a mi transformación...
El día de hoy decidí levantarme temprano, ingresé a mis clases en línea y tomé un desayuno ligero...
Últimamente he estado con mucha líbido, derramando fuego cada vez que entro a las redes sociales y veo chicas tan bonitas. Mi cuerpo frágil y delgado de betaBoy exige que lo trate bien, que cuide mi piel, que lo complazca.
Nunca había depilado todo mi cuerpo, solo la parte de mi pene, o debería decir, mi clítoris de nene, pero hoy decidí hacer más por mis deseos.
Despues de que terminó la escuela, fui a tomar un baño y dude en depilar mis piernas, la calentura de sentirme suave me ganó y comencé a hacerlo, cada pasada con la navaja tersaba más mi piel, se sentía limpia, suave, deliciosa, invitaba al tacto de cualquiera que se lo imagine. Seguí con mis axilas, aunque no suelo tener mucho vello en esa zona quité todo, hasta la última parte.
Cuando salí del baño, sentía que botaba fuego, la sensación de sentirme tan suave hacia que me deseara a mi mismo. Jugué a caminar como toda una nena, meneaba mis caderas, mi delgadez resaltaba mis huesos de la cadera, mi pequeño clítoris rozaba mi entrepierna, mientras pensaba... Hoy quiero ser más que solo un chico intentando ser una chica.
Tome prestada ropa muy sexy de un closet ajeno al mío, aunque también yo ya me había hecho de algunas tangas y medias para estrenar. Antes de vestirme de nena humecte todo mi cuerpo con crema corporal, hacia que mi piel se viera lúcida, de buen tono, deseable. Y procedí a usar una de mis tangas favoritas, era diminuta, a penas cubría parte de mis pequeños testículos y mi pequeño pene, sentía la tela meterse entre mis nalgas, un hilo fino que se amoldaba a mi ano jugoso. Después levanté mis pies, pinté mis uñas de color rojo, para que hicieran juego con las uñas postizas que usaba en mis manos, cada que me convertía en nena. Comencé poniendo una media negra de red en mi pierna, sentía su tacto con mi piel, ajustándose a mis muslos, que delicia.
Decidí no usar corpiño, solo usé un par de horas de cinta de aislar negra, formando una cruz, tapando mi pezón. Me sentía como las prostitutas más baratas en un club de table dance.
Una mini falda negra de vinil, estaba esperándome, mi culo quedaba grande en esa falda y hacia que parte de mis nalgas quedarán al descubierto, invitando a qué, aunque sea en mi imaginación, alguien metiera la mano y fisgoneara mi orificio cerrado.
Use una blusa de punto, de las que se transparentar hacia adentro, dejaba ver las cruces de cinta que cubrían mis pezones.
Usé también un collar pegado al cuello, como los de los perros, perfecto para mí, una perra esperando a jugar con ese culo.
Usé una peluca lacia, de color negro, me hacía sentir natural, más mujer, muy femenina.
Y por último unas zapatillas de tacón altísimo, de color negro y que dejaban ver mis hermosos pies.
En la ropa mi transformación estaba completa, salí del baño vestida de nena, tal vez mi nombre sería Diana, tal vez Hilary, tal vez Tiana, pero aún no decido cuál nombre sería perfecto para mí deseo de ser conocida como una puta codiciosa de sexo.
Fuí a maquillarme, siempre un maquillaje un tanto exagerado hace ver más femenina a una sissy, por mi parte me encanta usar sombras y pestañas postizas para mí transformación, quedé divina, finalicé mi maquillaje con un labial rojo intenso, perfecto para dejar huellas en cualquier otros labios, o dejar bien roja una verga, después de una buena mamada.
Salí a la sala, encendí la computadora dispuesta a conocer gente por chat y que me vean como soy, como una putita.
Conocí a varios hombres, rápidamente organizamos videollamadas, la rutina era simple, quería ver chorrear a cada hombre que me viera y justo después de eso escribir su nombre en mi cuerpo con un marcador, eso me hacía sentir como una verdadera puta, hubo un Juan, también hubo un Carlos, hubo también un José, hubo en general varios nombres, la mayoría escrito en mis nalgas.
Me encanta exhibirme, que me traten como nena y que hagan que me baje las bragas y les muestre mi pequeño pene y mi ano lampiño. Todos me dicen que me mamarian el culo y me lo llevarían de leche y a mi me encantaría que fuera así.
La fiesta sigue, yo estoy muy exitado y pronto quiero correrme y lo logro, mi macho ahora es un negro, viéndome a través de la cámara es de República Dominicana, un sable de ébano se muestra en mi pantalla, es un hombre exigente, pero vale la pena complacerlo. Lo primero que me pide es que muestre la cara, toda maquillada me dice que me veo como una reverenda puta y que le encanta como luzco, rápido impone dominio ante mí, yo obediente y sumisa siempre, me gusta que me mire y que me trate así. Me pide que le muestre lo que tengo vestido, me levanto de la cama y muestro mi cuerpo, el me pide que me arrodille, como padrastro comienza a decirme que cierre los ojos, escucho de su parte el obturador de una cámara de fotos, acaba de tomarme una foto, se ríe y me dice que esa va para tener un recuerdito de mí. Eso me sobre exita y siento como gotea mi pequeño pene. Me dice:
-Ya estuvo buena puta, es hora de la acción, levántate y báilame.
Yo respondo:
-Si señor, como lo ordene.
Yo bailo, desesperadamente, el me dice que quite mi blusa y levanté mi falda hasta la espalda...
Me encanta.
Mientras me trata así, me dice groserías, me fascina que me tengan en mi lugar...
Me dice que baje mi tanga hasta que queden en mis rodillas.
El comienza la faena de bañarse la verga rápidamente, me dice que meta mis dedos en el culo, yo ya estando preparada con mucha saliva, meto un plug, salvajemente comienza el mete y saca, El me comienza a grabar con su teléfono, yo haciendo cara de exitacion, recostada en el piso, gimiendo para él, el solo dice, vamos puta, termina para tu papi, correte para mí, Yo como su nena obediente le digo, si papi, aquí está tu nenita.
Veo chorrear su verga de leche espesa, blanca, su flema saliendo del pene me exita de mas, casi puedo sentir su calor en mi culo. Me corro sin tocar mi miserable pene, chorreo mis jugos y se derraman en mis nalgas.
Él me dice que nos volveremos a ver, que tiene trabajo y que le encantó usar a una puta para su complacencia, yo quedó boca arriba, con mi propia leche encima de mi cuerpo, con muchas ganas de sentir un hombre real adueñándose de mi cuerpo. Pero satisfecha me levanto y agradezco a mi Papi por haberme complacido.

Ahora no puedo sacar de mi mente, las ganas que tengo de ser penetrada por un hombre real, sentirme mujercita, alguien que de verdad trate como se debe a una gatita como yo.
Por favor, ya lo saben, yo soy de todos ustedes, mis lectores, si alguien quiere y sabe tratarme, yo estaré ahí, aún soy vírgen, paro ansió estar con un hombre pronto, maduro o jovencito, puedo acoplarme. Soy del estado de México y me encantaría tener un encuentro discreto y casual, con respeto pero mucho sexo de por Medio.
Si alguien se anima, comentelo o mándeme un mensaje privado.

Att: Reina ❤️
P.d. hacepto tributos, fotos etc. Ansió una verga que llene mi culo.

4 comentarios - Crónicas de una Mariquita. ❤️

KinglerKingsman +1
Interesante propuesta, me encantaría poder conocerte, CDMX
BlindManGH
Perfecto papi
salamander222 +1
hola soy nuevo seguidor y me preguntaba si podrias subir una foto tuya para tener algo de referencia gracias