Hetero borracho queda en manos de gays pervertidos.

Hay que tener cuidado si no queremos que nos pase esto. Este chico había salido a beber algunas copas con sus amigos, muy confiado con ellos empezó a beber hasta perder el control. Sus amigos lo abandonaron, no por querer, si no porque ellos estaban igual de pedos que él.

Un grupo de chicos gays con el que suelo salir muy a menudo estábamos en busca de heterosexuales borrachos para cumplir nuestras fantasías y bajarnos la calentura. Nos habíamos puesto de acuerdo a reunirnos el fin de semana pasado, si, mucho antes de la cuarentena. Nuestra fantasia era poder poseer a un chico que fuera totalmente heterosexual bajo los efectos del alcohol. Alguien para estrenar esa noche.

Total, todos llegamos y empezamos la party en una de las casa de uno de los chicos del grupito. Abrimos unas cervezas pero mesuradamente, pues para nuestros planes teniamos que estar lo mas sobrios posibles.

Para casar heterosexuales debes de ser muy discreto, es decir, no ir de golpe, bueno... eso si no quieres cazar chichifos, porque si si los quieres entonces tienes que seguir otros pasos.

Fuimos a unos antros y bares en el centro, nos la pasamos bastante bien divirtiéndonos y bailando pero sin beber demasiado, disfrutando el momento pero teniendo los ojos bien abiertos.

Ya pasado de la media noche nos fuimos a un antro bastante normalón, a donde supuestamente nosotros acuden chicos como nuestra presa, habíamos ido a bailar en un antro de ambiente, donde solo van personas de la comunidad LGBT y ahí no va nadie que se apegara a nuestro perfil. El chiste era cazar a alguien heterosexual, ya sabes, que nunca ha probado una verga. No se porque razón esto nos excita demasiado, tipo que seas el primero que lo penetre o que se la chupe.

Así que para las 2:00 a.m., nos habíamos metido a un bar o antro, no se como llamar a ese lugar donde siempre van chavos a ponerse la peda de su vida cada fin de semana, supongo que ya conocerás alguno así. Cuando llegamos, pedimos una mesa y algunas cervezas, mirando al rededor ya habían varios chavos que estaban súper pedos, en especial, casi a dos mesas de nosotros había una mesa llena de bombones aparentemente heterosexuales, machotes que se la estaba pasando muy bien con algunas mujeres que tenían sentadas en su mesa, que envidia.

Dentro de la mesa, sobresalía uno que estaba uff... en su punto más bueno. Imagínate, si todos eran guapos este era lo mas hermoso que mis ojos habían visto. Entre mis amigos nos pasamos la ficha, así le decimos cuando detectamos a nuestra victima. Entre todos tenemos una forma de cazarlos, nos repartimos en diferentes posiciones siempre rodeando a la presa, esto es para que si va algún lugar, mínimo uno de nosotros tiene que verlo a donde se va o que va a hacer para ahí atacar en grupito, y así fue, esta técnica es infalible. Obvio, tenemos un grupo de WhatsApp en donde cuando estamos de cacería nos mandamos mensajes para ver que hace nuestra víctima.

Mi amigo nos había dicho que nuestro pedazo de carne se había separado de su mesa, se había ido a baño. Para allá nos fuimos todos para cazar a la presa. Tenemos que ser muy discretos pues siempre hay alguien que cuida las puertas y uno que otro despistado en los orinales. Entramos todos y si, ahí estaba el en los orinales sacando su verga sin pudor, haciendo sus necesidades. Yo cuando entre solamente pude notar esas riquísimas nalgas, pues me estaba dando de espaldas y había pasado a una cabina, esas nalgotas que me decían que nunca habían sido perforadas por un hombre. Mi calentura aumento.

Dentro del baño uno de mis amigos le hizo la plática, que que tal se la estaba pasando y etc., otro también lo abordo para que se sintiera en confianza, y si, con todas nuestras ganas evitando lo mas probable de verle la verga para que no sospeche porque el truco es no ser tan obvia, es más, entre más macho heterosexual luzcas, estos te toman confianza mas rápido.

Entre broma y broma lo invitamos a la mesa y una buena dotación de cervezas no puede faltar. Recuerda que tiene que estar borracho para que ya sea mas fácil dominarlos. Sin pensarlo aceptó cuando lo retamos a un "fondo, fondo, fondo," nadie se resiste a eso y eso nos ayuda a empedarlos aun más.

De cerca era mucho mas guapo, tenia unas facciones bastaste masculinas pero a la vez concertaban la inocencia de un niño, era una combinación excitante entre ese cuerpo de hombre y la cara tierna. Tenía una voz aun muy de adolescente pero con toques viriles de hombre, estaba en esa edad en donde ya empieza a morir el niño y salir el macho. Las nalgas no las podía sacar de mi mente, redonditas, paraditas, virgénes... ya quería llevarlo a la casa.

El chavo se veía bastaste a gusto con nosotros y como todo hetero andaba jode y jode que quería ligarse a una chava y llevarla al depa y no se que mas. Ya como a las 3:30 a.m. nos decidimos retirarnos a hacer nuestras fantasías realidad. Durante la hora y media que estuvo en nuestra mesa, había notado sus perfectos brazos, su pecho hermoso con la camisa desabrochada hasta poquito arriba de su pectoral... de verdad que era una delicia de espécimen masculino.

Le dijimos que nos íbamos a retirar, que habían dicho que unas amigas querían seguir la peda pero en la casa de uno de nosotros, que ellas estaban en otro antro y que allá nos iban a alcanzar. El chavo pregunto si estaban buenas nuestras amigas a lo que nosotros le dijimos que ademas de buenas eran unas putas. Su sonrisa se ilumino dándonos un espectáculo a todos lo que estábamos en la mesa y sin perder mas tiempo nos fuimos al depa donde le haríamos las mas bajas aberraciones sexuales.

Nos subimos al coche de un amigo, yo iba en la parte de atrás con otro amigo y en medio llevábamos a nuestro trofeo de la noche. Para esto, mi amigo en la mesa le había pedido su cel para hacer una llamada. Se había metido a su WhatsApp y tenía un mensaje de una amiga que lo estaba buscando. Mi amigo se había hecho pasar por Adrían, así se llamaba el hetero, y le había contestado que había encontrado con quien pasar la noche, que después platicaban. La chava contesto bastaste seca con un "Ok," como que se había enojado la pendeja, pero equis... la presa ya estaba servida.

Adrían ya estaba mas pedo que consciente. Llegamos a la casa y lo invitamos a pasar, en la casa como ya habíamos hecho el pre-copeo había mas alcohol. Nosotros no queríamos dormirlo, porque queríamos escuchar sus gemidos cuando lo penetráramos, queríamos ver como se resistía así que solo le dimos más alcohol y le dijimos que nuestras amigas vendrían en unos minutos.

Ya estaba bastaste borracho Adrían y se empezaba a quedar dormido. Nosotros estábamos con las vergas a full y fuimos poniéndonos mas y mas cómodos. Invitamos a Adrían a hacer lo mismo, el puso un poco de resistencia al querer quitarle la camisa pero aflojó mas cuando nos vio a nosotros hacer lo mismo aunque solo logramos desfajarse la camisa pero eso ya había sido bastante el avance. Pusimos la tele y había música. Afortunadamente para nosotros, los vecinos de mi amigo no estaban, habían salido, así que disfrutaríamos a este pendejo sin que nadie nos descubriera.

Ya en la sala, nos dimos la señal de empezar. Yo me senté frente a Adrian y mis amigos a un costado de él. Poco a poco mis amigos lo fueron manoseando, ya sabes, que ja, ja, ji, ji, manita en la pierna y subiendo poco a poco. Mientras teníamos una platica caliente de mujeres, Sin esperarlo, Adrían se asusto bastante cuando uno de mis amigos puso su mano entre su bulto, dijo que mejor se retiraría porque ya estaba bastante borracho y nuestras amigas no venían. Nosotros le dijimos que no se podía ir, que el era la presa de la noche.

Al escuchar esto, Adrían se molesto, aventando a uno de mis amigos lejos de él y levantándose bruscamente, pero el licor le jugo una mala pasada y apenas avanzo unos pasos cuando dos de nosotros la lo teníamos sujetándolo por la espalda. Adrían empezaba a poner resistencia, intentando defenderse de las morbosas manos que empezaban a recorrer su cuerpo, dando unos golpes al aire y uno que otro a alguno de nosotros.

El alcohol jugo de nuestra parte porque sus movimientos torpes no pudieron derriban a los 5 pervertidos que nos encontrábamos manoseando su cuerpo. Tomábamos su rostro baronil y sujetándolo con nuestras manos, le dábamos besos que él rechazaba moviendo bruscamente su cabeza de un lado a otro. Mis manos recorrían a ese muñecote, se metían en su camisa desabrochada ya bruscamente por nosotros, con algunos botones rotos y tirados en el piso, tocando su abdominales perfectos. Otros le tocaban el paquete, apretando su verga y marcándose por el pantalón, otro amigo le manoseaba las nalgas.

Jalándolo a la fuerza lo llevamos en la habitación. No había retorno, estábamos muy calientes y solo queríamos deslecharnos, Adrían seguía poniendo resistencia intentandonos golpear, diciéndonos de groserías y retirando nuestras manos de su cuerpo. Veíamos una mirada de impotencia, de frustración, de asco, de odio en su varonil rostro, aquel rostro aniñado ahora tenia una forma mas varonil con todas estas sensaciones juntas.

Ya nos habíamos enojado un poco pues nuestra presa estaba bastaste alebrestada, queríamos manosearlo bien, mamarle los pezones perfectos que tenia, las nalgas musculosas que se le marcaban y meternos la verga en nuestra boca hasta atragantarnos. Queríamos poseer a ese macho YA y él no se estaba dejando, lo que si, ciertamente nos excitaba mas. Uno de mis amigos lo agarro por la espalda como en típica pose de secuestro, levantando sus manos al aire, mientras otro le propicio un puñetazo que le saco el aire, dejándolo aun mas indefenso. Al pasar esto, el que lo tenia por la espalda lo aventó al piso. Otro mas lo agarro y juntos lo llevaron a la cama dejándolo boca abajo.

Nuestra presa se intentaba recuperar del ataque pero nosotros nos aventamos a su espalda dejándolo sin poder moverse. Mientras dos lo sujetaban de arriba, sentados sobre su espalda, dos mas lo desvestíamos. Le quitábamos esos jeans que no hacían justicia a las deliciosas piernas que tenía, entre forcejeo y forcejeo logramos bajarle el pantalón y a nuestros ojos salieron unas preciosas nalgas, redonditas, sin vello que ocultaban debajo de toda esa tela, era una delicia. Tenia unas piernas grandes, musculas, poco velludas; piernas de hombre, piernas de macho. Sus nalgas competían fuertemente con sus piernas, yo me pedí en esas hermosas bolas de carne, parejitas, sin pelitos, que pedían ser penetradas YA, que pedían nuestras leches aunque el dueño no lo quisiera.

Yo fui el segundo en comerme ese culo. Uno de mis amigos había agarrado las piernas pues a pesar de estar borracho, se movía bastante bien y fuerte. Otro agarraba otra pierna y uno mas disfrutaba de ser la primera lengua en la vida de ese macho heterosexual.

Mientras nuestra presa luchaba por salir de ahí, pidiendo a grutitos ayuda, los dos que se ponían arriba de él, sentados en su espalda intentaban callarlo tapándole la boca, otro sujetándole los brazos y llevándolos hacia a atrás.

Mientras otros dos le sujetaban por las piernas, solo uno disfrutaba de las nalgas. Cada uno de nosotros paso su lengua en ese asterisco hasta ahora virgen. Íbamos cambiando de posiciones para que todos pudiéramos disfrutar de ese trozo de carne que estaba a nuestra merced. Lo nalgueamos hasta que nos ardió la mano a nosotros. Las nalgas de Adrían habían quedado rojas, rojas, rojas... lo habíamos mordido, lo habitamos desvirginado con 5 lenguas diferentes, le habíamos hecho cosas que él jamas pensó que alguien le haría.

Cuando fue mi turno de chuparle el culo, lo disfruté tanto que no quería que ese momento terminaba. Tenia un sabor diferente, sabía a macho, sabía a humillación, sabía a triunfo. Lamer el culo era un poco complicado pues a pesar de que lo estaban sujetando, sus movimientos de un lado a otro para intentar escapar complicaban que mis nalgas recorrieran las paredes anales y jugaran con su esfinter. Apretaba las nalgas como si me las fueran a quitar, las mordía como si nunca mas las fuera a poseer. Todos pudimos disfrutar de ese culo y era tiempo para pasar al segundo nivel.

Y si, llego la hora de comerse la verga. Lo volteamos con mucha dificultad pero la multitud le gano a la fuerza, y el alcohol nos estaba haciendo todo mas fácil. Nosotros ya sin nada de ropa, empezábamos a besarlo en todo el cuerpo y el macho de Adrían también iba perdiendo fuerzas al saber que no había escapatoria, al saberse violado y resignado. No hacía las cosas mas fáciles pero si, su resignación la notábamos.

Cada uno probo ese rico trozo de carne, todos nos lo metimos por la boca, mientras esto pasaba, uno de nosotros se sentaba en el pecho y le daba de cachetadas al macho, para dominarlo, para amanzarlo, para hacerle entender que solo era un trozo de carne a nuestra merced, para humillarlo aún mas. Lo escupíamos en la cara, lo humillábamos todo lo que queríamos, mordiendo y besando sus pezones, arañandole los brazos o sus abdominales.  Le dábamos a probar nuestras vergas, acercándolas a su cara y apretando sus mejillas para abrir su boca mientras tapábamos su nariz, aunque al inicio no quería pero con unas buenas cachetadas y amenazándolo de golpearle en los testículos si nos mordía lo amansamos, lo adiestramos a tragarse 5 vergas diferentes, 5 vergas que estaban escurriendo leche en honor a él.

Abría la boca con resignación, y cuando no quería, los bofetones en su cara lo obligaban a abrirla. También lo besábamos de la forma más morosa posible. Le lamíamos los labios, la cara, los ojos, las orejas, metíamos la lengua en donde quisiéramos, ya te imaginaras, aquello era todo un festín. Mamábamos sus pezones como hambrientos becerros que buscan alimentarse. De su verga ya no te cuento, succionábamos como si fuéramos maquinas buscando el liquido dorado. Adrían solo se retorcía de dolor al estar sometido a todas las atrocidades que le hacíamos. Tenia algunas lagrimas en su rostro y apretaba los puños o los labios en señal de oposición y de coraje.

Cuando llego la hora de hacerlo puto, de dejar de ser virgen este comenzó a suplicarnos que no, que no era de esos, que a él jamas le habían justado los hombres y que le desgraciaríamos la vida, que ya no volvería a ser hombre. A nosotros solo nos excito más... la situación la definíamos nosotros no él.

Todos queríamos tomar posesión de ese culo y decidimos jugamos piedra papel o tijera para ver quien seria el primero en estrenar semejante cosota. Estaba tendido en la cama, sujetado por tres de nosotros, su oposición había mermado pero de la nada daba algunos buenos golpes que nos destanteaban. Todo era inútil porque nosotros queríamos su virginidad y no habría poder humano que lo impidiera.

Después de jugar todos piedra, papel o tijera y aumentar la tensión para nuestra victima, uno de nosotros tomo el premio de ser el primer hombre en la vida de este cabrón. Dos le abrimos las piernas lo mas que pudimos, otro le tomo las manos levantándolas hacia atrás, mientras otro se sentaba en su abdomen y hacía que le comiera la verga. Adrían comenzó a gritar aun mas, no quería perder esta batalla.

Mi amigo se acerco, aventó saliva a su culo, se hinco y empezó a mamárselo nuevamente para estimularlo. Mientras la lengua acariciaba lo últimos minutos que le quedaban de virginidad, uno de sus dedos se empezó a colar por el territorio penetrando a nuestro macho. Las suplicas del macho no tardaron en venir, decía que por favor no, que no era necesario, que si queríamos dinero él no los daría. Sus suplicas se convirtieron en gemidos cuando mi amigo comenzó un entra y saca con su dedo, de una manera magistral. Después ya no era uno, eran dos y se detuvo después de que tuvo tres adentro. Todos los demás solo veíamos ese espectáculo, ese culo siendo desvirgado, las lagrimas del macho mientras pedía su inocencia.

Lo escupíamos en señal de humillación, pero el que lo iba a penetrar, Gerardo, pidió que escupiéramos en su mano. Una vez que todos escupimos e incluso él, le mostró esto al hetero de Adrian, con otra mano tomaba un poco y lo untaba en su verga, con la otra, la empezaba a untar en su culo. Aquel culo ya estaba rojo por las embestidas que le había dado con sus dedos, ya había quedado bastante abierto y aunque Gerardo no era el mas vergón de nosotros, con sus 17 cm y 4 de grosor, seguramente iba a hacer sufrir a nuestra víctima.

Todos esperábamos ansiosos la primera invasión con carne de verdad, lo de los dedos, a pesar de que había estado riquísima, solo había sido el calentamiento. Antes de penetrarlo, Adrian nos había preguntado si alguna vez nos había ofendido, que por qué él era la presa de esa noche. Nosotros solo le dijimos que estuvo en el lugar incorrecto en la hora incorrecta, que no había nada mas allá que no fuera por su guapura.

Mi amigo, al estar respondiendo estas preguntas le dejo ir la verga de un solo aventon. Nosotros solo vimos como Adrian se intento levantar de la cama por el dolor que le habían ocacionado, como su rostro había expresado dolor y lo habían tomado sorprendido. Rápidamente nosotros nos abalanzamos sobre él para intentar que se escapara. Yo abracé una de sus torneadas piernas y otros amigos las demás extremidades. Al cabo de unos minutos, con la verga aun adentro, Gerardo le pidió a mi amigo que se bajara del pecho de Adrian, que quería ver la cara de este macho cuando lo estuviera penetrando. Así lo hizo. Se bajo y nos ayudo a sujétalo de las piernas.

Gerardo se acostó casi quedando cara de frente con Adrian, esperando a que ese culo ex virgen se acostumbrara al tamaño y al grosor de la verga. Lo veía en un tono de superioridad. Adrian estaba humillado, sus ojos vidriosos así lo demostraban.

Comenzó un vaivén lento, pues mi amigo quería explorar cm a cm ese culo de macho que nunca había sido tocado por otro hombre. Sus gemidos nos decían el placer hermoso que se sentía al estar dentro de este macho. Otro que gemía era Adrian, no podía creer lo que le estaba pasando. Mi amigo, en esa pose siguió penetrándolo mientras manoseaba su cuerpo, mientras le hacía saber que ahora el era el macho alfa y Adrian solo era un trozo de carne que hacía llegado a nuestras vidas para complacernos. Los chorros de leche inundaron su culo, dejándolo lubricado para el sigueinte de mis amigos.

A mi me toco ser el cuarto en poseerlo. Cuando pasó mi turno, no podría creer que ese culo apretaba después de haberse comido tres vergas seguidas, entre ellas la de mi amigo Carlos, la cual tenia una cosa de negros, tenia una verga morena de unos 23 cm de largo y era tan gruesa como un desodorante pequeño, era enorme y aun así, ese culo no había perdido su hermeticidad. Disfrute meter mi verga en su culo, mi verga de 15 cm estaba en el paraíso, escuchaba el paz, paz, paz de mis embestidas y mis ojos se ponían en blanco. Para esto, mis amigos ya habían soltado a Adrian quien ahora, ya estaba totalmente resignado después de tener tres leches de hombre diferentes dentro de su culo.

Tenía que inmortalizas este momento así que mientras lo cogía, tomé mi celular y le gravé un vídeo, mismo que puedes ver aquí. Observa como aún no puede creer que se lo están cogiendo, sus gemidos de resignación y su cuerpo moviéndose a mi antojo, mi verga entrando y saliendo de su roto culo. Mis amigos diciéndole groserías y otro manoseando su cuerpo.

Cuando las leches de los 5 hombres estuvieron dentro de su culo, nos tiramos a un lado de él. Otro de mis amigos fue por mas alcohol e hizo una mezcla rara de ello. Regresó al cuarto con el fin de dárselo a Adrian, de regreso al depa, tuvimos la precaución de que no se diera cuenta a que parte de la ciudad lo estábamos llevando. Se lo obligamos a tomar lo que hizo que se atarantara aún mas. Lo levantamos de la cama viendo escurrir nuestro semen, lo limpiamos un poco y lo ayudamos a vestirle. Mientras lo vestíamos, nos despedíamos de ese cuerpo masculino que había aguantado bastante bien nuestra cogida. Lo seguíamos manoseando como si nunca lo hubiésemos tenido, lo besábamos salvajemente y aun, con nuestros dedos lo seguíamos penetrando.

Bajamos y lo subimos al coche y nos fuimos al centro de la ciudad, nuevamente dando vueltas por ahí para desubicarlo aun mas. Adrian ya no se movía, ya no había resistencia. Yo iba nuevamente atrás con el, penetrándolo con mis dedos durante todo el camino. Mi otro amigo le iba mamando la verga y ambos pellizcábamos sus posones.

Ya estaba amaneciendo y llegamos al lugar donde lo habíamos conocido, nos metimos a una calle solitaria y en un callejón viejo lo bajamos del coche, mis amigos y yo aun ahí decidimos abusar de él una vez mas, violando sus labios con nuestros cochinos besos y nuestros dedos en su culo, dejándolo ahí.

Nos subimos a nuestro coche diciéndole que no sería la ultima vez que lo veríamos. Un aire de triunfo nos recorría a nosotros regresandonos a la cara para descansar...

(CONTINUARÁ...)

3 comentarios - Hetero borracho queda en manos de gays pervertidos.

FumaFaso79 +7
??? Son unos violadores y lo contas como si estuviese bueno hacerlo, son unos enfermos
abrax90
quiero saber mas del relato, y si lo volviron a ver, o si has tenido mas experiencias así, me parecio super exitante
Sexmexuwu
que relato de violadores, le dejaron alto trauma a una persona