Biografía - 3 Cambio de ciudad y de vida



Siento su fuerza, tratando de meterla más adentro, invadiéndome, sometiéndome, proporcionando un placer indescriptible, tanto que mi pija se hincha, me descontrolo, empujo hacia atrás sincronizando sus embestidas, saboreando la entrega, gozando por el placer recibido y por el dado, sus gruñidos y bufidos anuncian que falta poco, mi cintura va y viene atenazada por esas manos fuertes, el ruido húmedo de sudor de su pelvis y sus huevos chocando con mis nalgas, un concierto de sonidos, aullidos, monosílabos ininteligibles, entonces la entierra hasta más allá de lo imaginable y todo su cuerpo se tensa, queda como suspendido en el espacio y el tiempo, su verga explota y siento el condón inflarse de leche y mi propia leche brota enchastrando las sábanas.
Y quedamos así, en ese vuelo imaginario, donde el pensamiento no existe, donde todo es sensación, donde cada célula ataca al cerebro con mensajes de agradecimiento, pero la mente está ausente, incapaz de procesar tanto placer. Allá, muy adentro explotan luces de colores, suenan campanas y nuestros cuerpos inertes parecen flotar suspendidos en un paraíso vedado a los incrédulos.
Y así, lentamente, vamos cayendo al mundo-cama que nos recibe con aromas y jadeos, las pieles pegoteadas por la transpiración van retomando la calma.
Su respiración entrecortada resuena en mi nuca, me mordizquea las orejas, me besa el cuello y sus manos me acarician con tanta dulzura que caigo en una especie de sopor del que no puedo recuperarme.
Apenas noto cuando desentierra su espada de mi culo, no tengo fuerzas para girar, sacarle el forro y lamer ese nectar que tanto me gusta.
Él se incorpora, me besa un hombro y se va al baño.
A lo lejos escucho sus pies que parecen arrastrarse por el cansancio, el sonido del agua en la ducha y no puedo moverme, ahora mi mente se recupera y me inunda de recuerdos.


Venir a vivir a Buenos Aires tuvo un efecto diferente en cada uno de nosotros.
Mi papá estaba feliz.
Mi mamá estaba deprimida porque había pasado de ser una reina de pueblo a ser una absoluta desconocida en la gran ciudad.
Y yo estaba mal, con una tristeza tan profunda que me taladraba el pecho.
Los primeros tiempos fueron durísimos, mucho más duros que aquellos de Bahia Blanca. Mis viejos la pasaban discutiendo y peleando.
Mis ropitas de nena habían quedado en un tacho de basura y supuse que todo lo que estaba pasando era la oportunidad que me daba la vida para "normalizarme" y ser un chico como cualquier otro.
Lo único bueno era que no fuimos a vivir a un barrio militar y con casa propia.
Pero lo peor de todo fue que la escuela donde me anotaron era horrible.
Mis nuevos compañeros eran una manada de idiotas.
No conseguí ni uno solo con el que pudiera hablar de temas que no pasaran de deportes o de minitas.
Pero poco a poco me fui aclimatando e idiotizando para hacer juego con ellos.
Los únicos momentos difíciles eran cuando teníamos gimnasia y después venía el momento de los vestuarios, las duchas y todas esas porongas balanceándose ante mis ojos. Sólo yo sé la fuerza que tenía que hacer para no estirar la mano, para introducirlas una por una en mi boca y succionarles hasta la última gota de leche.
Mi papá estaba mucho tiempo en casa y las peleas con mi mamá iban en aumento. Yo era como una visita, no me prestaban la más mínima atención y así pasaron un par de años.
Hasta tuve algunas noviecitas, con las que no pasé de franeleos y besuqueos. Yo pensaba que estaba todo bién, hasta que un día, estando solos en la casa de la última, llegamos un poco más allá, conseguí sacarle la remera y levantarle la minifalda teniéndola ante mis ojos en ropa interior. Aquello me calentó sobremanera, la desnudé y me desnudé, pero mis ojos no podían apartarse de aquellas prendas que me enloquecían. Algo en mi sangre parecía hervir y no paraba de sentir la sensación que tanto añoraba al ponerme ropas de mujer.
Ella aún no estaba dispuesta a entregarme su virginidad y yo más caliente con mis recuerdos que por su cuerpo virginal, acabé entre sus piernas. Cosa que ella me agradeció infitamente sin saber los verdaderos motivos.
Obviamente, en un descuido le robé aquel conjuntito y la historia comenzó otra vez.
¡Ah! Destino, cuántas maneras tenés para empujarnos hacia donde vos querés.
En el siguiente encuentro, que fue en mi casa, ella me preguntó directamente por su conjuntito.
-Me acuerdo, quedó arriba de la cama -le contesté haciéndome el tonto.
-Si, pero cuando volví del baño ya no estaba. Además te vi cómo lo mirabas constantemente. ¿No te lo habrás llevado vos?
-¿Yo? ¿Y para qué?
-Qué se yo, de recuerdo... -hizo una pausa deliberada-. O tal vez te guste usarla -agregó mirándome fijamente a los ojos.
Me quedé callado, parecía que el piso perdía consistencia y me hundía en un abismo insondable.
-No... no... ¿Cómo podés pensar eso? -dije al cabo de un silencio demasiado largo y delator.
Entonces sucedió algo inesperado, lejos de enojarse, ella comenzó a desnudarme hasta dejarme completamente en bolas, luego se quitó la camisa, la pollerita, las zapatillas y las medias. Yo estaba parado inmóvil, sin entender nada de lo que estaba pasando.
Sin dejar de mirarme, se quitó la bombachita y el corpiño pero no los dejó en la cama, se acercó a mi, dio una vuelta alrededor observándome y después me entregó las prendas.
-Ponételas, pero despacio -dijo con un tono suave pero enérgico que no admitía una negación de mi parte.
Rojo de vergüenza, pero con el corazón latiendo a mil, me vestí lentamente, cerrando los ojos, sintiendo la suavidad en mi piel. Me abroché el corpiño con destreza, abrí los ojos y la enfrenté.
Ella se relamió los labios sin decir palabra. Se levantó, tomó la pollerita y me la puso, luego me colocó la camisa y me llevó al dormitorio de mis viejos, donde había un espejo grande.
-Mirate, sos una chica, me dijo revolviéndome el pelo, que en esa época lo usaba bastante largo.
En mi mente repiquetearon sus palabras. No dijo "parecés una chica", dijo "sos una chica". Mi pija dio un respingo y sentí como se humedecía.
Se acostó en la cama y estiró las manos, llamándome.
Me abalancé sobre ella presa de una calentura inusual, ella me pidió que fuera más suave, que las nenas no son arrebatadas como los "machos asquerosos".
Me saqué su camisa, ella levantó la pollerita y acarició mi pija a través de la tela de la bombachita, mientras yo me dediqué a sus tetas, besé sus pezones y comencé a bajar lentamente por su pecho, por su vientre hasta llegar a su tesoro. Hundí mi cara en su conchita húmeda y por primera vez en mi vida saboreé los jugos de una mujer. Ella gemia descontrolada, mi inexperiencia era suplantada por el puro instinto y aunque no dejaba de comparar mentalmente la diferencia entre chupar la pija de mi lejano amor y esta conchita, disfrutaba más del placer que le estaba dando que del que yo obtenía.
-Yo también quiero -suplicó en medio de un gemido ronco y profundo.
Giré mi cuerpo llevando mi verga que ya había escapado de la escueta prisión de la bombachita hacia su boca.
Pasó su lengua tímidamente por el glande y después se la fue metiendo poco a poco en la boca.
Era la primera vez que me la chupaban y me pareció delicioso. Sus labios rozaban con tanta suavidad que me enloqueció. Su cuerpo vibraba al ritmo de mis lamidas, mis dedos hurgaban dentro de su conchita y ella acompañaba mis movimientos murmurando y gimiendo, a veces atragantada por mi miembro, que se hundía dentro de su boca.
Aquello no duró demasiado, tanta era la calentura que acabamos los dos al unísono en medio de convulsiones, gruñidos y jadeos. Me giré y la abracé, ella estaba con los ojos y la boca abiertas, pude ver mi leche dentro de su boca, no sabía si tragarla o escupirla, entonces la besé y compartimos mi jugo, nuestras lenguas se enroscaron de una forma primitiva, casi animal.
Ella jadeó otra vez y su cuerpo se convulsionó arqueándose en un orgasmo infinito.
Su carita se iluminó y después reaccionó y volvió a besarme, esta vez con un beso de amor y agradecimiento.
Nos quedamos en silencio, abrazados, acariciándonos con dulzura.
-Estás hermosa, pero falta algo -dijo al cabo de un rato.
Se levantó y se dirigió resueltamente al placard, encontró una bata de mi mamá y se la puso. Después me tomó de la mano y me guió hasta el tocador, me sentó y se puso a buscar en los cajoncitos. Sacó varias cosas y me preguntó:
-¿Alguna vez te maquillaste?
-No -contesté sin mentirle.
Si bien mi amigo varias veces me lo había pedido, yo siempre me negaba porque tenía pánico de que quedaran restos o señales que me delataran.
-¿A qué hora vuelven tus viejos? -preguntó mientras apuntaba una especie de lápiz a uno de mis ojos.
-A la madrugada o tal vez mañana. Tenemos todo el tiempo del mundo -contesté abandonándome a sus deseos y por qué negarlo, también a los míos.
Mientras me maquillaba, yo no daba crédito a lo que veían mis ojos. Paulatinamente me iba transformando en una mujer y mi verga respondía con respingos incontrolables. Ella no paraba de hablar, de lo linda que era, que no te cortás más el pelo y explicándome cada cosa que hacía, enseñándome, aconsejándome.
Cuando terminó, no lo podíamos creer.
Si, yo "era" una chica.
Me acomodó la pollera, y murmuró algo acerca de mis piernas. Si bien soy bastante lampiño, algunos vellos nada femeninos afeaban mi figura.
-Todo tiene arreglo, no te preocupes -me dijo tranquilizándome.
-¿Cómo supiste? -le pregunté sin poder evitarlo.
-No sé. Siempre me pareciste diferente a los demás. Algo femenino se te escapaba al hablar conmigo, por eso me gustaste.
Me quedé pensativo, si ella lo había notado, estaba expuesto.
-No te apenes por eso. Yo también guardo un secreto: me gustan las chicas pero jamás me animé a nada con ninguna. Cuando te conocí supe que en vos podría tener lo que tanto ansiaba. Tal vez por eso me di cuenta, porque cuando estábamos solos cambiabas, cuando estabas con tus amigos eras tan cerdo y macho como cuaquiera.
Su confesión me dejó helado, pero en mi interior sentí una paz como nunca había sentido. Ella era mi alma gemela, éramos el complemento ideal.
Mientras, ella estaba ajena a mis pensamientos, buscaba entre los zapatos de mi vieja alguno que me quedara, pero ninguno le gustó demasiado.
Yo me veía al espejo, la miraba a ella y una ola de deseo me asaltaba sin poder controlarla, fui a mi cuarto a buscar un forro, regresé, la abracé y la besé empujándola a la cama mientras le quitaba la bata.
Ella se abandonó a mis caricias y abrió las piernas frotando su clítoris contra mi verga que estaba durísima.
La penetré con suavidad, atento a sus reacciones, yo sabía muy bien lo que es ser penetrado por primera vez y puse todo mi empeño para que fuera lo menos doloroso posible y que gozara de una manera inolvidable.
Mi pija no es muy grande, entró con facilidad llevándose su virginidad hacia las fronteras de lo irrescatable.
Ella me miraba con los ojos bien abiertos y cuando comencé un mete y saca suave se enloqueció. Me arrancó la camisa y mordió mis pezones, un sinfín de sensaciones nuevas inundaban nuestros cuerpos, éramos miel fluyendo por el espacio sin límites, sin ataduras, éramos libres en nuestro propio mundo.
En aquella vorágine comprendimos que estábamos hechos el uno para el otro, o, mejor dicho: la una para la otra, y que el sexo era nuestro nexo indestructible.
Cogimos toda la tarde y parte de la noche.
Agotados nos bañamos, después ella controló exhaustivamente que no quedaran rastros de maquillaje y cuando estuvo segura de que todo estaba bien, nos vestimos cada uno con sus ropas, la acompañé a su casa y nos despedimos con mucha ternura y mucho amor.
Ese dia fue el inicio de una nueva vida, cuando alguno de los dos tenía la casa a su disposición, lo cual ocurría bastante a menudo, yo me vestía para ella y cogíamos hasta quedar prácticamente destruídos.
El tiempo pasó volando, nuestra relación se hizo más y más estrecha, nos contábamos todo, y, además de amantes éramos sobre todo amigas, entre nosotras no había secretos.
De casualidad, encontré esta foto en internet, no soy yo, pero el parecido es asombroso.

Biografía - 3 Cambio de ciudad y de vida

Mientras tanto, la situación de mis padres era insostenible, eran tiempos difíciles en el país, mi mamá le insistía que era el momento justo para hacer buena letra y ganar otro ascenso, pero mi papá estaba asqueado de lo que pasaba y supe que se negó a participar en una misión, años después supe que esa misión era uno de los "vuelos de la muerte", en los que arrojaban vivos al río a supuestos subversivos. Mi mamá se lo quería comer crudo, no paraba de reprocharle su conducta y decirle que era un idiota.
De esas constantes peleas sacábamos provecho mi novia y yo, ya que mi viejo trabajaba bastante y mi mamá no paraba en casa, apenas mi papá se iba, se mandaba a mudar.
Pero una de esas tardes pasó algo que me marcó para siempre. Mi padre volvió antes de lo previsto y nos encontró en plena tarea de transformación. Nunca olvidaré su cara, una mezcla de espanto, dolor y odio. Sus ojos inyectados en sangre sus puños amenazantes. A ella la echó de casa y a mi me dio una paliza que aún me duele y de la cual conservo una cicatriz imborrable. Luego, conmigo al borde del desmayo, se detuvo, se sentó en la cama y comenzó a sollozar, casi imperceptible repetía: "mi mujer es una puta y mi hijo un puto". Como pude me arrastré hasta mi pieza y me acurruqué junto a la cama. Podía oirlo llorar y maldecir, luego se calmó, oi el ruido de las puertas del ropero y roces ahogados, estaba guardando ropa en una valija. Después silencio, hasta que escuché sus pasos afuera de mi cuarto. Empujó la puerta despacio y dijo:
-Me voy, perdoname.
Cerró la puerta y esa fue la última vez que lo vi.
Luego supe lo que había pasado, ese mismo día se había enterado que mi mamá lo engañaba con uno de sus jefes y que también se había acostado con varios de sus camaradas y con lo mal que le iba en la Armada, me contaron que lo dieron de baja y se fue a vivir al sur.
Por supuesto que lo perdoné, años después me imaginé su bronca y su dolor por no poder participar en la guerra de Malvinas, yo sabía que era su sueño y por eso había entrada en la Armada y se había hecho piloto, sin poder evitarlo, lloré por el.
Ese día, mi mamá llegó más tarde, un poco borracha y se fue a dormir. Por varios días ni hablamos del tema.
Todo esto hizo que me refugiara en mi novia y tan fuerte fue esa relación que terminamos casándonos al cabo de unos años.
Ambos sabíamos que teníamos dos asignaturas pendientes, una era que ella lo hiciera con una mujer de verdad y la otra era que yo volviera a tener una pija dentro de mi culito.
No pasó mucho tiempo hasta que hicimos realidad casi todas nuestras fantasías...

Una voz me saca de mis recuerdos y me vuelve a la realidad. El agua de la ducha sigue fluyendo y él me está llamando.
Me levanto, me pongo la infaltable bombachita, me visto con mi ropa de hombre, guardo mis ropas de nena en el bolsito, abro la puerta sigilosamente y me marcho sin decir adiós.
Otro desconocido queda atrás, otros me esperan más adelante, porque mi destino es buscar lo inalcanzable, y mientras no dejo de buscar, sigo volteando muñecos, entregando mi culo a cualquier pija que se cruce en mi camino.


^o^

22 comentarios - Biografía - 3 Cambio de ciudad y de vida

Tsukuru +2
Es totalmente inhabitual encontrar algo así.
Emocionante por lo doloroso y por lo amoroso.
El 10 con que te califico, tiene un valor simbólico. El precio es una cosa y el valor es otra muy distinta.
KaluraCD +1

Gracias, me guardo este comentario en lo más profundo de mi alma ❤️
angieyruben +2
El relato es maravilloso Kalu !!!
Cuanto has vivido, sufrido y gozado. Tu historia es la de much@s y es sólo tuya al mismo tiempo.
+ 10 y Reco !

Gracias por compartir.


cross
KaluraCD

Gracias queridos mios, estoy en una etapa de grandes cambios en mi vida, contar mi historia es la mejor terapia, pero sus comentarios son verdaderas caricias a mi alma.
Besos ❤️
ChristianJed +1
Buen relato!!
KaluraCD +1
Gracias ❤️
gabm962 +1
Impresionante!!!
KaluraCD

Me alegra que te gustara (o te impresionara) ❤️
Lady_GodivaII +1
Qué maravillosa mezcla de ternura, lujuria joven, miedo y amor...
Hasta me imagino la historia convertida en película !
KaluraCD +1

Que lindo sería una película, aunque mi sueño es verla impresa en su versión completa, ya que acá publico un poco resumido. Todavía estoy a tiempo y si hubiera alguien tan loco como para querer filmarla... adelante.
Me quedé pensando en sus palabras "miedo y amor", mucho de los dos, perocomo dice la canción: "el amor es más fuerte".
Besitos ❤️
kokiCD +1
Una muy linda historia, escrita de una manera magistral
+ 10 y 😘😘
KaluraCD

Gracias Koki, hermoso comentario ❤️
dulce-pan118 +1
Me encnato!!!!!
KaluraCD +1

Gracias, me alegra que te gustara ❤️
quitokiki
Tremenda la continuación, esto ya dejó de ser una promesa, es una historia que merece ser contada.
Gracias amiga por compartirla con nosotros, adelante si te hace bien, yo por lo menos, super agradecido.
Besotes.
quitokiki
Ah, me olvidaba comentar la foto, espectacular, te imagino asi a los ¿cuántos? ¿dieciocho?
Bombón ❤️
KaluraCD

Quito quetido, gracias a vos por estar siempre y darme tanto cariño.
Lo de la foto es increible, pero asi era yo a los dieciocho digamos para no quebrar las reglas.
Besote ❤️
bufarraco
Coincido con todos los comentarios, un post excepcional, por lo intenso, por la mezcla de sentimientos, por las referencias históricas.
Lo que te ha tocado vivir Kalu, me resulta imposible ponerme en tu piel.
Una genia, un personaje adorable, gracias por estar aqui.
KaluraCD

Mi querido Bufy, siempre tan atento, infaltable en mis posts.
Como dije por ahí, lo que cuento acá es bastante resumido, en el original me explayo más osbre esas cuestiones. Si la suerte no me falla, en algún momento va a estar impreso y completo.
Besotes ❤️
SmoothSkin
Simplemente ,extraordinaria historia!!
KaluraCD

Muchas gracias PielSuave, que bueno que te gustó.
Gracias por pasar ❤️
flagram
Grosa!!
Se me hizo un nudo en el estómago.
Solo puedo agradecerte que compartas tu vida asi. Aplausos.
KaluraCD

No se me angustie amigo que ya pasó hace mucho tiempo.
Gracias a vos por estar siempre y como dije, contar mi historia es la mejor terapia.
Besitos.
jatzuf2
Excelente el relato!!,
De los mejores que he leido , la historia te atrapa y me identifique en varias cosas..
Gracias por compartirlo 🙂 +10
KaluraCD

Gracias a vos por la buena onda, me encanta que te haya gustado y que te reflejaras en parte de mi historia.
elledany +1
Excelente lo suyo .....
KaluraCD +1
crossdresser
KaluraCD +1
crossdresser
elledany
😄😄😄
grancucon +1
¡¡¡ Pero que Bueeeeeno.... Excelente relato....Verdaderamente conmovedor y a la vez candente.....Un gusto leer esta biografía.....Felicitaciones y gracias por compartirlo maestro....!!!!
KaluraCD +1


Gracias a vos por pasar amigo 👍
ffll22 +1
tremendo relato
kito09 +1
me encanto, quiero seguir leyendo mas!
vestidodemina
Una delicia tu biografia, para no perderse ni un detalle.
Hermosa la foto ❤️
celuminici
Tremendo relato, me conmoviste hasta las lágrimas.
bigone8in +1
muy buen relato
realmente profundo
gracias x compartir
liluentanga
Vengo de leer los otros relatos y este es un cachetazo de realidad, triste y dolorosa.
Que infancia y adolescencia complicada Kalu... maestra, te amo.
Belll0sCulitos
NADA DE LO QUE HE LEIDO, DEJO DE ATRAPARME NI POR SOLO UN SEGUNDO...MARAVILLA PURA ES TU ESCRITURA, QUE BUENO QUE LLUEVE POR AQUI, ASI ES MAS AGRADABLE LEERTE ENTRE MIS SABANAS, ME HACER SENTIR LO PROFUNDO DE TU BELLO CORAZON EN CADA PALABRA...GRACIAS. DESESPERO POR TENER ALGO DE LO QUE ESCRIBES IMPRESO Y DORMIR LEYENDOTE...TE QUIERO MUCHO, SINCERAMENTE Y SIN OFENDER, ERES DE LO MEJOR QUE HE LEIDO PRINCESITA ADORABLE!