Como me dieron

Un vez mi trabajo me llevo a Gral Pico, La Pampa, y cuando ingresaba a esa ciudad con el micro a las 2 de la mañana veo que en una esquina había 4 travestis “laburando” a la espera de clientes, y me llamo la atención uno porque era particularmente hermoso, una verdadera yegua rubia alta , grandes tetas delgada, hermoso culo y unas piernas de locura.
Quede bastante conmocionado con eso y me dije que a la noche siguiente daría un paseo por el lugar.
Al otro día después de cenar puse manos a la obra y camine unas cuantas cuadras hasta el lugar y si bien había un par de travas, eran bastante fuleros, lo cual no importa mucho en estos casos de calentura galopante, pero decidí seguir a ver si encontraba a mi rubia.
Dos cuadras más adelante la veo y apure el paso para llegar sin que ningún transeúnte me la robe, jeje, de modo que casi al trote llegue hasta ella, charlamos un minuto nos pusimos de acuerdo en el arancel y el tiempo (una hora y media) y le dije que me espere porque iría a buscar un taxi para ir al telo.
Desesperado camine una cuadra y veo un taxi que venía y lo paro y pase en el a buscar a mi rubia.}
Llegamos al telo, ingresamos, franeleamos un rato, la desnude era espectacular, la bese entera le chupe la pija y me la cogí boca abajo.
Después de eso ella me hizo la cola a mí, tenía una pija media chica, y me acabó en el pecho, hasta ahí todo tranqui, le pague y pedimos un taxi que nos viniera a buscar.
A la vuelta se puso mimosa y fuimos franeleando en el taxi hasta la esquina en la cual la dejé.
Cuando se baja, el taxista un hombre de unos 50 años medio pelado pero de complexión atlética, me dice que me había cogido un verdadero bombón, y que se había calentado viéndonos franelear, y me entró a preguntar que habíamos hecho en la cama, y la verdad estaba muy desinhibido y le conté con lujo de detalles todas nuestras acrobacias sexuales.
El tachero estaba excitado, se tocaba la entrepierna, y me dijo si me gustaría comerme una flor de verga.
La verdad que no estaba en mis planes, pero lo inesperado de la situación, prometía mucho, y uno sabe por experiencia que a veces esos polvos son los mejores.
Acepte su propuesta y el taxi comenzó a rodar a una gran velocidad hacia las afueras del centro, hacia la casa de este tipo.
Llegamos, era una casa prefabricada de madera, este tipo vivía solo, y cuando entramos vi que el orden y la limpieza no reinaban en ese lugar, nos tomamos un vaso de gancia cada uno, que era lo único que tenía, y me dice que pase a la pieza donde había una cama matrimonial sin hacer, y ropa tirada por todos lados, la verdad que ya me estaba arrepintiendo, cuando me agarro de atrás y comenzó a franelearme su pija por el culo, me besaba el cuello y me imploró que me desnude.
Cuando este tipo me vio desnudo se quitó su ropa a la velocidad de un rayo y pude ver que tenía entre sus piernas una pija descomunal!!!, gruesa muy gruesa y bastante larga, un verdadero pijón, y para ser franco me dio un poco de cagazo, porque me di cuenta que el tipo me quería coger desesperadamente y me iba a romper todo con ese termo.
Me puse a chuparle la pija que de casualidad entraba en mi boca, pero por desgracia no soy de garganta muy profunda ya que si me la trago mucho me da arcadas, y tuve varias porque este viejo me empujaba la cabeza hasta el fondo.
M e hizo poner en cuatro, y me regalo una formidable chupada de culo, me metió un dedo primero, luego dos y me dilató muy bien con saliva y dedo.
Cuando advirtió que yo ya movía mi culito pidiendo más, se paró y me apoyó la cabeza en el culo y me metió solo el glande y lo dejó un ratito ahí, para que yo me vaya acostumbrando.
Al ratito empecé a mover mi cola para hacer que entre un poco más y me la fue metiendo de a poco, y sentía como me iba abriendo todo el culo, me bombeó suavemente un ratito y después acometió con todas sus fuerzas, y yo empecé a gritar como puta, no podía dejar de gemir, me estaban recontracogiendo, ¡!, me estaban destrozando el culo, al cabo de un rato se detuvo y me dijo que me pare contra la pared, y ahí me siguió serruchando como loco, y finalmente me acostó boca abajo y ahí me dio para el campeonato, me decía que me iba a secuestrar, que me iba a hacer su mujer, que le limpiaría la casa, plancharía y que me iba a coger todas las noches, y me compraría ropita de mina, yo no daba maás, comencé a acabar en las sabanas un montón de semen, y empujaba con mi culo para que me entierre toda esa tremenda verga y me descosa el ojete de una buena vez, cuando sentí que empezó a gritar él y les juro que su leche como que me quemaba por dentro , la sentí toda su leche, acabó como un caballo dentro mío.
Cuando me la sacó creo que me dolió más que cuando me la metió y pude tomar conciencia del enorme trozo que me había comido.
Me invitó a quedarme a dormir, pero la verdad era una mugre eso si no me hubiese quedado abrazado a ese matambre que tenía entre las piernas.