Memorias de un joven indecente: Lenguas

Las lenguas me encienden como nada. Un beso sin lengua me da asco, me encanta sentir sus papilas gustatvias raspando mi lengua, me encanta al besarlas, abrirles la boca y meter mi lengua por su boca a revisar toda la cavidad. Me encanta meter mi lengua en las conchas, rebuscar, frotarla contra los labios, frotarla contra la entrada, ubicar el punto g, y frotarlo. Sentir como sus jugos se salen de su concha y me llenan la boca, sentir como su lengua acaricia mi pija. Como mi pija baila en su boca con sus lamidas y succiones. Sentir como mi lengua pasa por todo su cuerpo, y recorre desde la panza hasta las tetas, dibujar figuras al rededor de sus pezones con mi lengua y morderlos. Pasar mi lengua por sus entrepiernas y llegar a la concha, pasarla sobre su tanga y sentir como se va humedeciendo , luego sacarle la tanga y penetrar su concha con mi lengua como si fuera mi propia pija. Meterle la lengua en el culo, buscar, rebuscar, hacer circulos y sentir sus genidos y su corazon agitado sobre la piel. Me gusta mi lengua, me gusta tu lengua, me gusta frotar mi lengua y tu lengua.
Me gustaria baniarte con mi lengua, limpiarte todo el cuerpo con ella, me gusta cuando me limpias la pija con tu boca y tu lengua, tu lengua raspa mi verga. Me gusta sentir tu saliva en mi boca, tu saliva en mi pija y mi saliva en tus tetas. Me gusta sobretodo mi lengua y tu lengua, las lenguas me encienden.