Les ofrezco otro relato real de mi vida; espero que esta vez no lo hayan copiado y publicado aquí...
Subíal bus, para ir a mi trabajo, más o menos tranquilo…digo más o menos porque,mientras esperaba, pasó una escolar, faldita muy corta, piernas llenitas ylargas, un culo paradito y redondito…ufff, mi pene me pidió seguirla…pero lahora me lo impidió…
Subí,con la verga, o sea la pinga inquieta…estaba bastante lleno…avancé y me paréjunto a un tubo, para estar más cómodo…bajé la vista y me encontré un par detetas…tetazas, impresionantes, en un escote escandaloso…la pinga se puso enatención, de inmediato…
Me“empujaron” y mi bulto chocó con el brazo de la tetona…casi con el costado dela teta derecha…ella levantó la vista, me miró, y dejó su brazo en el lugar,sobándome la pinga en cada movimiento del bus…
Estabapensando cómo empujar su brazo para tener contacto directo con ese globo que seveía durito y con ganas, cuando, de pronto, me dicen – permiso y una chica se coloca, justo delante de mí,entre el tubo y yo, entre la teta y mi pinga muy dura y parada…
Casila empujo, pero al sentir sus nalgas gorditas y ver su faldita que se metía ala rajita….uffff, sólo pude decir…-siga nomás…
Losmovimientos del bus hacían que mi bulto frotara ese culito…metí una piernaentre las de ella, volteó, me miró, le puse una cara de “perdón pero meempujan” y abrió un poquito sus piernas recibiendo mi regalo justo en laentrada de su rico culo…
Pusemi mano en el tubo, a la altura de sus tetas y ella, muy tranquilamente lascolocó encima…Ufff era una sensación muyrica y arrechante, excitante…nos movíamos, nos pegábamos y despegábamos…era unculeo con ropa...
Mirédónde estábamos, conocedor de la ruta del bus, sabía que iba a permanecer igual a lograr sacar mi pinga, subirle la faldita y ponerla entre sus piernas y, si la tanga lo permitíade lleno, e incluso más, hasta llegar a mi oficina, por lo que me puse a pensarcómo hacer par, clavársela en el culo o la concha…
Necesitabasu complicidad…pensé que si había aceptado todo y puesto sus tetas en mi mano,que las agarraba y apretaba a mi gusto, era porque estaba caliente y quería…asíque, como primer paso puse mis dos manos en su cintura y la jalé hacia mi…aceptó, se pegó y paró el culito…,
Conuna mano, comencé a mover los dedos subiendo la faldita…ella sentía los dedos ysupongo que también que la falda subía…miró a ambos lados y puso una mano sobremi bulto, lo frotó y subió su falda, en el centro…
Yoagarré la falda y con la otra mano, saqué mi pinga y la puse entre sus piernaspegada a sus huequitos, ella juntó las piernas y la atrapó…comenzó a frotar suspiernas una con otra, con mi pinga en el medio…ufff
Ella,yo, su concha y mi pinga queríamos más…pensé en meter mi mano y jalarle latanga, pero, me dije, puta, si hemos llegado a esto, tenemos que terminar bien…
Mandéel trabajo a la mierda…me acerqué a su oído y le dije: ¿nos bajamos?...sinvoltear, movió su cabeza afirmativamente, guardé como pude mi pinga…
Bajéla falda, la agarré de la cintura y la empujé hacia adelante, retrocedí paraque pudiera pasar…la seguí y nos bajamos en el siguiente paradero…esperamos queel bus se alejara, en silencio…
Nosmiramos, sonreímos…sólo atiné a decir, ¿vamos a un hotel?, no habló, tomó mimano, la puso, por delante entre sus piernas y me dijo: si no me lleva en esteinstante, lo mato…
Tomamosel primer taxi libre que pudimos y nos dirigimos al hotel más cercano, sinhablar pero sobando nuestras entrepiernas…llegamos, nos registramos y subimos ala habitación…
Alentrar, nos quitamos la ropa rápidamente…ella con zapatos, era un poco más altaque yo, lo que facilitó las acciones en el bus, pero, descalza era más baja queyo…nos abrazamos, nos dimos besos con lengua, mientras frotábamos nuestroscuerpos lo que hizo que mi pinga se pusiera en posición de ataque…
Laagarré de la cintura, le dije que levantara las piernas y que me atenace por lacintura…lo hizo…la cogí de las nalgas…con una mano toqué su entrepiernas,ubiqué la vulva hinchadita y caliente, coloqué mi pinga en la rajita, la frotéhacia arriba y hacia abajo…
Ellacomenzó a temblar, su carita era una mezcla de miedo y deseo…la pinga consiguióabrir levemente los labios de la vagina, entró lentamente…era una conchamojadita, calentita y muy apretada…aaayyy… mmmm… ayyy, lloraba y gemía…
Lapinga avanzaba milímetros, retrocedía, sentía que las paredes la rodeaban fuertemente…erauna sensación indescriptible…en medio de temblores, gritos, llanto y gemidos, caminéhacia la cama, pero nos quedamos, yo parado y ella bien penetrada y en el aire…Losmovimientos fueron en aumento, nos besábamos, le chupaba las tetas…
Cuandosentí las ganas de llenarle la concha de mi semen, que ellas me dicen siempreque es cremoso y dulce, la saqué, la hice parar frente a la cama, que searrodille en el filo, que se ponga en posición perrito y le coloqué la cabeza,el glande, en la entrada del culo…Me dijo, por ahí, no, nunca me han hechoeso…me extrañó…una concha cerradita, un culo virgen…
Estabasoñando o viviendo un milagro…me agaché, le lamí el culito, la eché en la camay, aguantando las ganas, me eché a su lado, haciéndole cariños en su carita,que recién vi con claridad era la de una niñita entre asustada y arrecha…lepregunté su nombre, su edad, 18 años y dos meses, y cómo era que habíamosllegado a esa cama…
Mecontó que era estudiante universitaria, que es muy tranquila, que no tieneenamorado y que, la única vez que había tenido sexo, había sido hacía un año ymedio, en que su mamá y ella visitaron a su tía, hermana de su mamá en su casade una playa del sur, por tres días.
Sutía casada, sin hijos y su mamá le dijeron para ir a hacer compras para lostres días, pero ella prefirió quedarse en la playa, en el mar…el esposo de sutía estaba en la casa…cuando calculó que ya podrían regresar su mamá y su tíade las tiendas, fue a la casa y entró al baño a ducharse…
Seduchó y se dirigió al dormitorio que le habían indicado, a vestirse…el tíoentró desnudo y con la pinga muy parada, la empujó a la cama violentamente,ella se quedó paralizada de miedo, el tío le levantó las piernas, las abrió y sela metió violentamente a la concha…
Ellagritó del dolor y del miedo, el tío se movió muy rápido y, cuando ella trató deempujarlo, eyaculó gran cantidad de semen… sólo pudo hacerlo por adelanteporque escucharon el carro de la tía…el tío le dijo que no contara nada y sefue corriendo dejándola ensangrentada, embarrada de semen y muy asustada…
Esaexperiencia tuvo dos resultados, uno inmediato, odiar al tío y otro que comenzóa aparecer poco a poco…tener sueños calientes, sentir picazón en la vagina…tener mucha curiosidad por el sexo…nunca más vio al tío ni tuvo encuentrosexual con alguien…
Puta,pensé yo, es una virgen esta belleza…ese día antes de nuestro encuentro,mientras se preparaba para salir hacia la universidad vio a su hermanito menor,de 14 años, masturbándose, ver la gran erección, la calentó…
Versu mano recorriendo el cuerpo de la pinga, que parecía crecer en cadarecorrido, le hizo sentir que le picaba entre las piernas y ver la leche de suhermanito salir en chorros, le hizo sentir que se mojaba la tanga…salió casicorriendo de la casa y, mientras se dirigía al paradero, la sensación dehumedad y calor en la vagina era insoportable…
Subióal bus…y al verme, le recordé a su tío, el recuerdo se mezcló con la imagen dela pinga del hermano eyaculando…y fui el elegido…al verme tan mayor, pensó quetodo se limitaría a roces, de repente un manoseo… pero al sentir mi pinga en elculo…no se calentó, se incendió y aceptó todo lo que le hacía…y así llegamosaquí, me dijo… me sentí ganador del premio mayor de la Lotería…
Medediqué a lamerle todo su cuerpito, a manosearla, hacer que ella me manosee…ydecidí dejar el culo virgen hasta el siguiente encuentro…y le pregunté si habíamamado alguna pinga…me dijo que no, el tío la tiró sobre la cama, metió y sacómuy rápido, eyaculó y se fue…le lamí y mamé sus tetitas, no muy grandes, peroduritas, le hice chupar un dedo…
Levolví a meter la pinga en la concha, esta vez en posición de perrito… lodisfrutó mucho y yo también…fue un polvo largo, delicado y muy rico…cuando mevinieron las ganas de descargar mis huevos recontra llenos de semen, se la saqué,la senté en el filo de la cama, me paré frente a ella, le puse el glande mojadoy goteando muy cerca de sus labios, le pedí que lo bese, lo hizo, le pedí quelo lama…
Memiró con una carita como de asco, le dije que era rico…lo hizo, me miró, sonrióy abrió su boquita…se la metí suave, le dije que mamara, que la lama, quesuccione, cosa que hizo, primero suavemente y poco a poco fue aumentando lapresión y sus gemidos me hicieron saber que le gustaba…
Nome aguanté más y mi pinga soltó un chorrazo de leche que le llegó a lagarganta, la sacó, tosió, le dije que se lo tome, lo hizo, se la volvió a metery me la mamó hasta dejarme seco y muy feliz… se le chorreó por los costados, semojó las tetas…nos quedamos echados en silencio y respirando muy fuerte…
Salimosa almorzar juntos y nos pusimos de acuerdo en encontrarnos cada miércoles, queyo no trabajo y cada sábado…así lo hicimos…el culo virgen dejó de serlo en lasiguiente cita…ufff apretadito, delicioso…le dolió, lloró, pero al final leencantó y se volvió adicta a la culeada…
Mantuvimosnuestra relación abuelo-nieta, de dos encuentros por semana, durante cerca detres años, cuando me tuve que mudar de ciudad por razones de trabajo…somosamigos en Facebook y, cada vez que viajo a la ciudad, recordamos nuestroencuentro en el bus con polvos de campeonato…
Subíal bus, para ir a mi trabajo, más o menos tranquilo…digo más o menos porque,mientras esperaba, pasó una escolar, faldita muy corta, piernas llenitas ylargas, un culo paradito y redondito…ufff, mi pene me pidió seguirla…pero lahora me lo impidió…
Subí,con la verga, o sea la pinga inquieta…estaba bastante lleno…avancé y me paréjunto a un tubo, para estar más cómodo…bajé la vista y me encontré un par detetas…tetazas, impresionantes, en un escote escandaloso…la pinga se puso enatención, de inmediato…
Me“empujaron” y mi bulto chocó con el brazo de la tetona…casi con el costado dela teta derecha…ella levantó la vista, me miró, y dejó su brazo en el lugar,sobándome la pinga en cada movimiento del bus…
Estabapensando cómo empujar su brazo para tener contacto directo con ese globo que seveía durito y con ganas, cuando, de pronto, me dicen – permiso y una chica se coloca, justo delante de mí,entre el tubo y yo, entre la teta y mi pinga muy dura y parada…
Casila empujo, pero al sentir sus nalgas gorditas y ver su faldita que se metía ala rajita….uffff, sólo pude decir…-siga nomás…
Losmovimientos del bus hacían que mi bulto frotara ese culito…metí una piernaentre las de ella, volteó, me miró, le puse una cara de “perdón pero meempujan” y abrió un poquito sus piernas recibiendo mi regalo justo en laentrada de su rico culo…
Pusemi mano en el tubo, a la altura de sus tetas y ella, muy tranquilamente lascolocó encima…Ufff era una sensación muyrica y arrechante, excitante…nos movíamos, nos pegábamos y despegábamos…era unculeo con ropa...
Mirédónde estábamos, conocedor de la ruta del bus, sabía que iba a permanecer igual a lograr sacar mi pinga, subirle la faldita y ponerla entre sus piernas y, si la tanga lo permitíade lleno, e incluso más, hasta llegar a mi oficina, por lo que me puse a pensarcómo hacer par, clavársela en el culo o la concha…
Necesitabasu complicidad…pensé que si había aceptado todo y puesto sus tetas en mi mano,que las agarraba y apretaba a mi gusto, era porque estaba caliente y quería…asíque, como primer paso puse mis dos manos en su cintura y la jalé hacia mi…aceptó, se pegó y paró el culito…,
Conuna mano, comencé a mover los dedos subiendo la faldita…ella sentía los dedos ysupongo que también que la falda subía…miró a ambos lados y puso una mano sobremi bulto, lo frotó y subió su falda, en el centro…
Yoagarré la falda y con la otra mano, saqué mi pinga y la puse entre sus piernaspegada a sus huequitos, ella juntó las piernas y la atrapó…comenzó a frotar suspiernas una con otra, con mi pinga en el medio…ufff
Ella,yo, su concha y mi pinga queríamos más…pensé en meter mi mano y jalarle latanga, pero, me dije, puta, si hemos llegado a esto, tenemos que terminar bien…
Mandéel trabajo a la mierda…me acerqué a su oído y le dije: ¿nos bajamos?...sinvoltear, movió su cabeza afirmativamente, guardé como pude mi pinga…
Bajéla falda, la agarré de la cintura y la empujé hacia adelante, retrocedí paraque pudiera pasar…la seguí y nos bajamos en el siguiente paradero…esperamos queel bus se alejara, en silencio…
Nosmiramos, sonreímos…sólo atiné a decir, ¿vamos a un hotel?, no habló, tomó mimano, la puso, por delante entre sus piernas y me dijo: si no me lleva en esteinstante, lo mato…
Tomamosel primer taxi libre que pudimos y nos dirigimos al hotel más cercano, sinhablar pero sobando nuestras entrepiernas…llegamos, nos registramos y subimos ala habitación…
Alentrar, nos quitamos la ropa rápidamente…ella con zapatos, era un poco más altaque yo, lo que facilitó las acciones en el bus, pero, descalza era más baja queyo…nos abrazamos, nos dimos besos con lengua, mientras frotábamos nuestroscuerpos lo que hizo que mi pinga se pusiera en posición de ataque…
Laagarré de la cintura, le dije que levantara las piernas y que me atenace por lacintura…lo hizo…la cogí de las nalgas…con una mano toqué su entrepiernas,ubiqué la vulva hinchadita y caliente, coloqué mi pinga en la rajita, la frotéhacia arriba y hacia abajo…
Ellacomenzó a temblar, su carita era una mezcla de miedo y deseo…la pinga consiguióabrir levemente los labios de la vagina, entró lentamente…era una conchamojadita, calentita y muy apretada…aaayyy… mmmm… ayyy, lloraba y gemía…
Lapinga avanzaba milímetros, retrocedía, sentía que las paredes la rodeaban fuertemente…erauna sensación indescriptible…en medio de temblores, gritos, llanto y gemidos, caminéhacia la cama, pero nos quedamos, yo parado y ella bien penetrada y en el aire…Losmovimientos fueron en aumento, nos besábamos, le chupaba las tetas…
Cuandosentí las ganas de llenarle la concha de mi semen, que ellas me dicen siempreque es cremoso y dulce, la saqué, la hice parar frente a la cama, que searrodille en el filo, que se ponga en posición perrito y le coloqué la cabeza,el glande, en la entrada del culo…Me dijo, por ahí, no, nunca me han hechoeso…me extrañó…una concha cerradita, un culo virgen…
Estabasoñando o viviendo un milagro…me agaché, le lamí el culito, la eché en la camay, aguantando las ganas, me eché a su lado, haciéndole cariños en su carita,que recién vi con claridad era la de una niñita entre asustada y arrecha…lepregunté su nombre, su edad, 18 años y dos meses, y cómo era que habíamosllegado a esa cama…
Mecontó que era estudiante universitaria, que es muy tranquila, que no tieneenamorado y que, la única vez que había tenido sexo, había sido hacía un año ymedio, en que su mamá y ella visitaron a su tía, hermana de su mamá en su casade una playa del sur, por tres días.
Sutía casada, sin hijos y su mamá le dijeron para ir a hacer compras para lostres días, pero ella prefirió quedarse en la playa, en el mar…el esposo de sutía estaba en la casa…cuando calculó que ya podrían regresar su mamá y su tíade las tiendas, fue a la casa y entró al baño a ducharse…
Seduchó y se dirigió al dormitorio que le habían indicado, a vestirse…el tíoentró desnudo y con la pinga muy parada, la empujó a la cama violentamente,ella se quedó paralizada de miedo, el tío le levantó las piernas, las abrió y sela metió violentamente a la concha…
Ellagritó del dolor y del miedo, el tío se movió muy rápido y, cuando ella trató deempujarlo, eyaculó gran cantidad de semen… sólo pudo hacerlo por adelanteporque escucharon el carro de la tía…el tío le dijo que no contara nada y sefue corriendo dejándola ensangrentada, embarrada de semen y muy asustada…
Esaexperiencia tuvo dos resultados, uno inmediato, odiar al tío y otro que comenzóa aparecer poco a poco…tener sueños calientes, sentir picazón en la vagina…tener mucha curiosidad por el sexo…nunca más vio al tío ni tuvo encuentrosexual con alguien…
Puta,pensé yo, es una virgen esta belleza…ese día antes de nuestro encuentro,mientras se preparaba para salir hacia la universidad vio a su hermanito menor,de 14 años, masturbándose, ver la gran erección, la calentó…
Versu mano recorriendo el cuerpo de la pinga, que parecía crecer en cadarecorrido, le hizo sentir que le picaba entre las piernas y ver la leche de suhermanito salir en chorros, le hizo sentir que se mojaba la tanga…salió casicorriendo de la casa y, mientras se dirigía al paradero, la sensación dehumedad y calor en la vagina era insoportable…
Subióal bus…y al verme, le recordé a su tío, el recuerdo se mezcló con la imagen dela pinga del hermano eyaculando…y fui el elegido…al verme tan mayor, pensó quetodo se limitaría a roces, de repente un manoseo… pero al sentir mi pinga en elculo…no se calentó, se incendió y aceptó todo lo que le hacía…y así llegamosaquí, me dijo… me sentí ganador del premio mayor de la Lotería…
Medediqué a lamerle todo su cuerpito, a manosearla, hacer que ella me manosee…ydecidí dejar el culo virgen hasta el siguiente encuentro…y le pregunté si habíamamado alguna pinga…me dijo que no, el tío la tiró sobre la cama, metió y sacómuy rápido, eyaculó y se fue…le lamí y mamé sus tetitas, no muy grandes, peroduritas, le hice chupar un dedo…
Levolví a meter la pinga en la concha, esta vez en posición de perrito… lodisfrutó mucho y yo también…fue un polvo largo, delicado y muy rico…cuando mevinieron las ganas de descargar mis huevos recontra llenos de semen, se la saqué,la senté en el filo de la cama, me paré frente a ella, le puse el glande mojadoy goteando muy cerca de sus labios, le pedí que lo bese, lo hizo, le pedí quelo lama…
Memiró con una carita como de asco, le dije que era rico…lo hizo, me miró, sonrióy abrió su boquita…se la metí suave, le dije que mamara, que la lama, quesuccione, cosa que hizo, primero suavemente y poco a poco fue aumentando lapresión y sus gemidos me hicieron saber que le gustaba…
Nome aguanté más y mi pinga soltó un chorrazo de leche que le llegó a lagarganta, la sacó, tosió, le dije que se lo tome, lo hizo, se la volvió a metery me la mamó hasta dejarme seco y muy feliz… se le chorreó por los costados, semojó las tetas…nos quedamos echados en silencio y respirando muy fuerte…
Salimosa almorzar juntos y nos pusimos de acuerdo en encontrarnos cada miércoles, queyo no trabajo y cada sábado…así lo hicimos…el culo virgen dejó de serlo en lasiguiente cita…ufff apretadito, delicioso…le dolió, lloró, pero al final leencantó y se volvió adicta a la culeada…
Mantuvimosnuestra relación abuelo-nieta, de dos encuentros por semana, durante cerca detres años, cuando me tuve que mudar de ciudad por razones de trabajo…somosamigos en Facebook y, cada vez que viajo a la ciudad, recordamos nuestroencuentro en el bus con polvos de campeonato…
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